Quién podría decir: amor y creo que el futuro es mejor que el presente o que el pasado, que el pasado es mejor que el futuro o que el presente y así hasta agotar las posibilidades. Lo anterior no podría ser cierto, sino solo como opinión en cualquier sentido. Lo que se hizo en el pasado es, parece, irrevocable, con lo que se hace en lo que se puede llamar presente, pudiendo ser algo revocable, se obvia por vicios y malas acciones en general; lo que es de lo que solo es posible como resultado de lo que se hace en el estado anterior y no de otra forma, debería ser en la que no haya la palabra irrevocable, pues lo único que tiene que ser revocado o irrevocado, es un o el error. Con algo ya errado, cómo se podría llegar a buen puerto? Tendría que ser algo así como lo errado bueno o lo bueno errado. Algo errado puede ser bueno? Lo bueno puede ser errado? En esto, como en lo del presente, pasado y futuro, solo es cierto en modo de opinión. De esto no es porque no existan ni no se puedan predicar de ellas como verdaderas, ciertas y buenas, pues lo tres tiempo podrían ser lo bueno en sí en conjunto. Lo bueno se salva? Lo malo se salva? Creemos que para lo primero, no, pues ya es salvo y de los segundo, sí, pues puede haber para él compasión y piedad. Puede haber opiniones contrarias, obviamente, sugerir que solo uno de los estados es mejor que los otros. Pero otra razón para que aquello no pueda conocerse, aunque sea en apariencia, es porque quienes las intentan rastrear, tienen, según su clase, limitaciones naturales, unas más indefectibles e irrevocables que otras. Ser comido o comer. Esos con sus limitaciones y el conocimiento de las mismas, unas, también según su clase, las conocen mejor y es su sufrimiento o su gozo. Arrepentirse de algo bueno.
Hay uno que golpea y golpea y golpea… Eso que golpea, según su tipo, debería ceder más que otros objetos, eso que se golpea, debería, también, ceder o hace ceder a lo se deba, pueda y quiera hacerlo. Una forma, no sabemos si avistada o no, de liberar lo instintivo que podría, en unos más que otros, ser el golpear, que se refleja, también en el competir. Dentro de esas competencias, es visible que unas tienen más contacto que otras, más agresividad. Se puede ser agresivo, también, por ejemplo, en el ajedrez. Agresividad no implica necesariamente sangre a menos las neuronas lo hagan. Si ese que golpea, pensando así liberar alguna frustración, parafilia, placeres y vicios, arreglar algún problema, etcétera, supiera que sus actos son falacias, mentiras y vacuidades, no lo haría. Pero, entonces, por qué vemos que suceden cosas que parecen degradantes y denigrantes en general? Como cada una de esas acciones se hace en un tiempo y dijimos que del tiempo no podríamos dar una calificación positiva o negativa, pues desconocemos hasta el propio, no podríamos decidir, tampoco, por lo que algunos puedan hacer filantrópicamente o codiciosamente. El que pudo romper lo que golpeaba, podría haber saciado su ira, pero como ese determinismo lo conoce él y solo él, así como el motivo que lo llevó a hacer lo que hacía. Lo roto, sería lo único que haya cambiado, lo que lo llevó a romper podría estar extinto o vivo. Puede la psicología o cualquier arte llegar a auscultar siquiera ese determinismo individual? Cuando las personas puedan ser auscultadas de forma en la que se podría decir que se las conoce en su totalidad, será porque se viven en bondad pura o maldad pura. Para sobrevivir, se tendría que conocer muy bien al enemigo, saber evadirlo o saber atacarlo, se podría solamente vivir y no tener que sobrevivir en ningún caso, cada hombre.