En la madrugada

13 Oct 2021 poes

A quién ladra,
de madrugada,
si no hay nadie;
solo a sí mismo.

Quizás para no estar solo,
acompañado de su “guau, guau”
Para abrigarse y no volverse sordo.

A quién ladra,
en fría helada.
Falto de molicie
y ningún cinismo

Tal vez para su consuelo,
olvidar su dolor y no más “alálau”;
para soliviantarse, no verse acabado

A quién ladra;
Tal vez algún alma,
a Su propio fantasma.
A la noche, a la luna, al frío

Posible que nadie sepa
su propia cólera y su soledad.
Para llamar a otros que ya no están

A quién ladra;
quizás una lágrima,
alimentar a su calma;
obviar su destino y martirio.

Después de ladrar aquella noche se quedó aullando hasta cansarse.

Puntuación: 0 / Votos: 0

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *