Continuando con nuestras publicaciones relacionadas a la ocupación chilena de Lima, hoy compartimos un interesante post sobre la Reserva rural de Lurigancho, un batallón de reservistas formado por civiles voluntarios provenientes de lo que actualmente conocemos como San Juan de Lurigancho, Canto Grande, Chosica y la zona de Jicamarca. Este batallón se formó debido a que, en medio del descalabro de las defensas peruanas y ante la amenaza del ataque chileno a nuestra capital, se prepararon diversos grupos de defensa tanto en el norte como en el sur. Todos conocemos las dos líneas defensivas que se armaron en el sur, en San Juan y Miraflores para resistir el avance chileno, sin embargo, se armaron también puestos en el norte, apuntando hacia Ancón pues se sospechaba también que el desembarco se haría allí. Y es aquí donde entra a tallar la Reserva rural, quienes tenían en Las Flores y Zárate, su zona de entrenamiento y en el Cerro San Cristóbal su puesto de vigilancia.
Este texto es firmado por el arqueólogo Julio Abanto Llaque, quien ha realizado investigación arqueológica en la zona y ha publicado varios textos académicos sobre poblaciones ancestrales de Lima.
Les comparto este post de la web SJL Digital que disfruté mucho leyendo.