Edén mimético, paraíso perdido en la inconstancia
el no verte es una plácida tortura
el verte una cálida amargura
que se funde y que se pierde en la distancia.
Edén mimético, luminoso rayo de ternura,
tu mirada es alegría desbordante,
tus ojos, ruin estrella rutilante
que destruye y elimina con bravura.
Edén mimético, silbidos arrullados por el viento,
tus palabras son caricias amorosas,
tus labios son dos pétalos de rosa
que me obligan a decirme lo que siento.
Edén mimético, catarata de ébano en la noche,
poderoso rayo que retumbas en el cielo,
viento huracanado que me envuelves con tu pelo,
déjame cantarte sin oír ningún reproche.