Cuesta más ser extrovertido en las letras, pero lo cierto es que cualquiera puede serlo en ellas, y eso no es un comentario despectivo, es un atributo democrático y yo sé que existe el mainstream de ser un contracorriente, pero en este caso haré caso a lo enseñado por los profesores, creeré en la democracia, haré un remiendo de mis conceptos y me entregaré a la democracia al cuadrado que es el internet y exponencialmente me escribiré, me editaré y me leeré, y no dejaré a salvo error alguno, todos los criticaré, porque a mí mismo me debo, me debo una gran cuenta de tiempo, de ese que le entrego a mis hijos, a mi trabajo y a las noticias, apártense un momento y déjenme amar a mi amada y odiar al enemigo, porque algo de vida debo encontrar en el arte de mis dedos.