[Visto: 472 veces]
Veintidós años, dos meses, nueve días, diecinueve días y cuarenta y ocho minutos se tardó uno en comprender al filósofo más preclaro de la historia, y con ese camino demuestra uno punto por punto su antropología y su política: “El pensamiento retrocederá más de cuatro siglos, para intentar hacer las cosas no bien, pero sí mejor. Los predicadores pedirán disculpas y culparán a la revolución y a la guerra, culparán incluso a la pintura. Y llamarán a esta época, la segunda edad media. En qué parte del universo se ha visto que sea el pueblo el que gobierne. La muerte del optimismo sobre el hombre en algún momento se dedujo, pero los filósofos venideros solo recogieron lo conveniente y lo mezclaron con su religión”.