Entramos pronto a hablar de Dios desde la Cruz y la Resurrección de Jesucristo, desde el sufrimiento del inocente, ese es el misterio de nuestra fe.que conmemoramos en la Semana Santa.
La vida y la muerte de la paloma es una metáfora de este acontecimiento cristocéntrico, Nicanor Parra, notable poeta chileno, versifica: “Una vez en un parque de Nueva York/Una paloma vino a morir/Agonizó durante algunos segundos/ Y murió/Pero lo que nadie va a creer es que resucitó de inmediato/ […] El poema remata::/Era un día de otoño/Pero parecía primavera”. En este espíritu pascual nos acercamos a la celebración de la Semana Santa: “Era […] otoño/ Pero parecía primavera/”.
“Una vez en un parque de Nueva York
Una paloma vino a morir a mis pies
Agonizó durante algunos segundos
Y murió
Pero lo que nadie me va a creer
Es que resucitó de inmediato
Sin darme tiempo para reaccionar
Y emprendió el vuelo
Como si nunca hubiera estado muerta.
Y yo me quedé mirándola zigzaguear
Entre los edificios de departamentos
Y me quedé pensando tantas cosas.
Era un día de otoño
Pero que parecía primavera”..