(blog Lima de Siempre)
El primer rastro de esta plazuela, ubicada entre la avenida Tacna y el jirón Huancavelica, la encontramos en el plano de Lima de Amédée Frezier de 1716, cuando las Nazarenas era un beaterio. Ahora forma parte del atrio de la iglesia de las Nazarenas. Tiene piso de lajas, está enrejada y presenta dos puertas de ingreso donde se aprecia la Iglesia de Santo Cristo de los Milagros o de las Nazarenas. En el otro extremo hay diversas tiendas de objetos religiosos vinculados a la adoración del Cristo Morado. Artísticamente hablando, en realidad, como bien dice Pedro Benvenuto, la modesta plazuela de las Nazarenas está rodeada de edificios cuyas fábricas no llaman la atención y aun la misma iglesia no tiene valor arquitectónico alguno. Su celebridad le viene de poseer el más preciado tesoro religioso de nuestra ciudad: la venerada imagen de nuestro Amo y Señor de los Milagros. Naturalmente, esta plazoleta cobra trascendencia durante el mes de octubre de cada año, cuando sobre su explanada el anda del Señor de los Milagros y miles de fieles lo aguardan, apiñados y con gran devoción, en sus inmediaciones.
Mañana, plazuela de Santa Rosa de Lima.
Felicitaciones por esta iniciativa. Mi Universidad, UCSS, publicó la obra "El rostro de un pueblo" en el que se incluye un artículo interesante sobre la iglesia por el P. Antonio San Cristóbal. Te alcanzo un dato de mi artículo.
El 14 de septiembre de 1671 se ofició la primera misa ante el crucificado de Pachacamilla, fecha que coincide con la fiesta de la exaltación de la Cruz. Venían de lejos en piadosa plegaria y mística romería, comenzando a denominarlo "El Santo Cristo de los Milagros o de las Maravillas". En el plano dibujado por el P. Pedro Nolasco, mercedario, en 1685, para el libro en homenaje a la beatificación de Toribio Alfonso de Mogrovejo, “La Estrella de Lima convertida en Sol” de Francisco de Echave y Assu le da el expresivo título de “Capilla del Santo Cristo de la Pared” . Sin embargo, en octubre de 1687, cuando un maremoto arrasó con el Callao y parte de Lima y derribó, como ya hemos dicho, la capilla edificada en honor de la imagen de Cristo, quedando erguida solamente la pared con la imagen dibujada del Señor crucificado, tan terrible designio originó que se confeccionara una copia al óleo de la imagen y que, por primera vez, saliera en andas por las calles del barrio de Pachacamilla, estableciéndose que a partir de ese momento la procesión tuviese lugar los días 18 y 19 de octubre de cada año.
Gracias, José Antonio, por tu valiosa colaboración.
Saludos,