El también llamado “Cono Norte”, es el sector septentrional de Lima Metropolitana. Es la zona comprendida por 8 distritos que se ubican al norte de la ciudad de Lima. Se extiende en dos ejes, uno de ellos por el noreste a todo largo de la Cuenca del Río Chillón hasta el Kilómetro 40 de la carretera a Canta y el otro por el Noroeste, hasta el Kilómetro 43 de la Carretera Panamericana, abarca además parte de la cuenca del Río Rímac. Se une al Centro histórico de Lima a través de estos dos ejes viales: la Avenida Túpac Amaru y su prolongación, la Carretera a Canta y la Carretera Panamericana. Una tercera vía, la Avenida Universitaria, sirve de conexión con la zona de San Miguel. Su población estimada, según el censo del 2005, es de 1’524,252 habitantes, casi 43 habitantes por kilómetro cuadrado.
El termino Cono Norte, al igual que en otras metrópolis, fue acuñado inicialmente para distinguir los ejes de crecimiento urbano de Lima Metropolitana y los lugares donde se concentraban las poblaciones de pobreza y pobreza extrema de la capital. El termino Lima Norte es más reciente referido a esta misma zona geográfica nace en base a una redefinición del espacio urbano de la ciudad a partir de su desarrollo económico, urbano y factores de dependencia: La ciudad de Lima ya no tiene conos o extremos dependientes de un centro económico, sino esta constituido por centros de desarrollo económico independientes, uno de ellos y el de mayor crecimiento es Lima Norte. En efecto, Lima Norte ha adquirido mayor notoriedad en la vida nacional por su crecimiento económico a partir del año 2000. Prueba de ello es que los distritos de Los Olivos y San Martín de Porres han elevado sus categorías de sectores socio-económicos C y D hacia B y C respectivamente. Este relativo auge se refleja en la gran cantidad de negocios que se han desarrollado en los alrededores del centro comercial “Mega Plaza Norte”, considerado uno más prósperos de Lima; otro centro comercial de mayor magnitud, el “Plaza Lima Norte”, se encuentra en construcción. Finalmente, un nuevo eje de desarrollo comercial en Lima Norte se viene gestando desde hace algunos años en Puente Piedra, donde actualmente el comercio crece aceleradamente (esta información general es de wikipedia).
LA FORMACIÓN DE “LIMA NORTE”.- Hay consenso en señalar que a partir de la década de 1940, la sociedad peruana ingresa en una nueva etapa en su historia que se caracteriza por una fase de modernización e industrialización capitalista. Uno de los factores que impulsó ese proceso fue el incremento de la demanda de materias primas como consecuencia de al Segunda Guerra Mundial. Uno de los efectos directos de este proceso de industrialización fue el explosivo proceso de urbanización del país: aumento violento del flujo migratorio hacia Lima y, especialmente, la consolidación de la Capital como una metrópoli que terminaría por concentrar y centralizar casi toda la capacidad productiva y los recursos del país.
Los orígenes de Lima Norte se remontan a la década de 1930 con la construcción de los barrios obreros en Caquetá y San Martín de Porres, construidos durante el gobierno del general Benavides. Hasta allí, hubo cierta “planificación” en esta zona de Lima. Pero en la década siguiente, surgen las invasiones y las barriadas. A mediados de la década de 1950 ya están constituidas las barriadas “27 de Octubre”, “El Pedregal” y toda la zona de “Zarumilla”. La Panamericana Norte sería, junto a la carretera a Canta y al ferrocarril Lima-Ancón, un eje decisivo para el crecimiento de Lima Norte. A partir de la década de 1960 se produciría una sucesión de nuevos asentamientos: “Pampa de cuevas”, “La libertad”, “Comas”, “Carabayllo” e “Independencia”, entre otros.
El caso de “Ventanilla” fue distinto porque respondió al concepto de ciudad “satélite”. “Previ” (Proyecto Experimental de Vivienda), a la altura del kilómetro 19 de la Panamericana Norte, también respondió a este modelo, y forma parte del patrimonio urbanístico de Lima Norte. Pocos saben que “Previ” fue uno de los laboratorios de experimentación urbanística más importantes de América Latina y hoy es un foco de “turismo urbanístico”. Según Wiley Ludeña, el barrio es interesante por las propuestas y por la obra allí presente de arquitectos mundialmente conocidos, como james Stirling, Alexander Christopher, Aldo van Eyck, Charles Guerra, entre otros. Cada uno tiene una casa modelo construida. Previ debería formar parte del patrimonio urbanístico de la ciudad de Lima Norte. Son este tipo de evidencias e iniciativas que coadyuvan a dotarnos de una especie de autoestima por aquello que tenemos en este territorio valioso de Lima Norte.
En la década de 1990, concluyó un ciclo histórico y se inició otro: la barriada aspira a convertirse en ciudad. Deja de ser el “Cono Norte” y surge la “Lima Norte de hoy. Temas como el de la renovación, el ornato público y la instalación de un equipamiento urbano adquieren sentido para los nuevos distritos. Se inicia así un proceso de renovación urbana de la nueva-vieja periferia constituida por cientos de barriadas, muchas de las cuales aparecen hoy como demasiado viajas sin haber llegado nunca a ser ciudades nuevas. Como concluye Ludeña, para el caso de Lima Norte, creo que el gran desafío es restituir y configurar una centralidad urbana que pudiera afirmar una idea de ciudad radicalmente distinta, porque de una u otra manera esta piel que cubre a Lima Norte va a cambiarse y modificarse. Y este es un proceso que va generando transformaciones dramáticas en diversas zonas de Lima Norte. No nos referimos solo a la zona de Megaplaza Norte, sino a una serie de espacios donde surgen rápidamente edificios de cinco o diez pisos, así como grandes centros comerciales. El problema es que en el fondo, aun cuando detrás de este tipo de cambios existen normas o profesionales que la hacen aparentemente “formal”, sigue siendo un modo informal, caótico y espontáneo de hacer ciudad. Cambiar para no cambiar. Corregir esta tendencia histórica es el reto principal.