Una vez en el poder, Prado desarrolló una hábil estratega para lograr el apoyo internacional. Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial rompió relaciones con los países del Eje (Roma-Berlín-Tokio) y les declaró la guerra asociándose a los aliados. Cuando Estados Unidos ingresó al conflicto luego del ataque a la estación de Pearl Harbor, firmó un Tratado de Préstamos y Arriendos, por el que se congelaban los precios de las exportaciones peruanas a cambio de la reducción de los aranceles latinoamericanos. Declarándose amigo personal del presidente Franklin D. Roosevelt, Prado permitió la instalación de una base aérea en Talara a los Estados Unidos y deportó en masa, tonta e injustificadamente, a residentes alemanes y japoneses. Esta chauvinista posición le valió a su régimen, efectivamente, obtener el aval del gobierno norteamericano. Pero esta política de acercamiento a los aliados provocó resistencia por parte de algunos de sus colaboradores debido a una cierta simpatía del sector de la clase alta por el fascismo, simpatía que se fue esfumando durante el desarrollo de la guerra con las debacles de Mussolini y Hitler. Los hacendados, por su parte, estuvieron satisfechos con el curso de la guerra puesto que la demanda internacional trajo prosperidad al sector exportador.
La guerra mundial también hizo replantearse al Partido Comunista y al APRA. El primero, liderado por Eudocio Ravines, se alió al gobierno en su lucha, junto a los Aliados, contra el Eje, su principal enemigo ideológico a nivel internacional. Haya de la Torre también redefinió su posición frente a los Estados Unidos -léase imperialismo- en función del New Deal y la doctrina de la “Buena Vecindad”. De esta forma, según el aprismo, se creaban las condiciones para una libre y equilibrada relación entre Indoamérica y los Estados Unidos en beneficio de ambos.
Divisiones aéreas en la guerra con Ecuador (1941)
Simultáneamente a estos cambios políticos, el Ejército Peruano obtuvo, en 1941, su primer triunfo bélico en mucho tiempo. El conflicto con el Ecuador, cuyas tropas nuevamente invadieron territorios peruanos, fue el marco para propicio para que la población orientara su apoyo a las Fuerzas Armadas y al gobierno. Los puestos peruanos de Aguas Verdes, Lechugal, La Palma y varios sectores de la región oriental, así como los de Ecuador: Huaquillas, Chacras, Balsalito y Carcabón, se convirtieron en los focos iniciales de esta contienda bélica. La acción militar más importante fue la de Zarumilla (23 de julio de 1941) donde el ejército peruano al mando del general Eloy G. Ureta venció a las tropas ecuatorianas; todo culminó con la ocupación militar peruana de la provincia de El Oro y el sacrificio del héroe de la aviación militar José A. Quiñónez. Las tropas peruanas pudieron haber llegado hasta Guayaquil si Estados Unidos no interviene para arreglar el conflicto.
Tanque peruano en territorio ecuatoriano
El 29 de enero de 1942 se firmó, bajo el patrocinio de la Conferencia de Cancilleres realizada en Río de Janeiro, el Protocolo de Paz, Amistad y Límites que lleva el nombre de aquella ciudad, el cual estableció una frontera definitiva, cuya delimitación en el terreno correría a cargo de una comisión mixta que cumplió su cometido poco después bajo el amparo de los países garantes del Protocolo de Río de Janeiro (Estados Unidos, Argentina, Brasil y Chile). En virtud de aquel incuestionable documento diplomático, acorde a las normas del derecho internacional, el Perú recuperó los territorios de Cocha Redonda (en el río Lagartococha), Lagartococha, Puerto Pichincha y Puerto Obando (en el río Aguarico); Rocafuerte, La Banda, Arcadia, San Antonio y Yasuni (en el río Napo); Vencedores (en el río Nashiño); Tarqui, Bellavista y Conocaco (en el río Corrientes); y Huachi, Pinches, Chambira, Andoas y Tonegrama (en el río Pastaza).
Firma del Protocolo de Rio de Janeiro
Es necesario aclarar que, años después, sólo quedaba por demarcar un estrecho tramo, de 78 kilómetros, ubicado en la Cordillera del Cóndor, habiéndose colocado los hitos respectivos en el resto de la extensa zona fronteriza. El problema es que diversas declaraciones ecuatorianas han pretendido desconocer el contenido del Protocolo de Río de Janeiro. En tal cortina de humo, Ecuador mantuvo una activa política de difusión internacional, incluyendo falsos mapas, reclamando suyos territorios peruanos en una amplia área que llega por el sur hasta los ríos Marañón y Amazonas. En este contexto se inscribieron las incursiones al territorio peruano por la Cordillera del Cóndor en 1981 y 1995.
Regresando al gobierno de Prado, el triunfo de 1941 acentuó sus buenas relaciones con los militares. El presidente aparecía en público con su uniforme de teniente de reserva para resaltar sus simpatías por las Fuerzas Armadas. El país, además, aún dolido por la derrota ante Chile y la posterior derrota diplomática en manos de Colombia, reaccionó ante la victoria con entusiasmo irrefrenable. El Congreso declaró a Prado “héroe nacional” y con esto su familia podía sacudirse del nefasto recuerdo que la memoria de los peruanos guardaba sobre la actuación de Mariano I. Prado durante la Guerra con Chile.
Prado aparecía así como un hombre de recursos que hizo de él uno de los políticos más eficaces del Perú moderno. Su astucia política y carisma personal lo acercó a los grupos populares y la coyuntura internacional favorable lo presentó como el gestor de una reducción de la presión popular y, por ende, de la represión gubernamental, pudiendo ofrecer una imagen, tanto nacional como internacional, de que en el Perú imperaba la democracia.
DESPUES DE LA GUERRA DEL 41 CON LA NOTORIA VICTORIA PERUANA, EL PERU NUNCA MAS VOLVIO A TENER OTRA GUERRA CON EL ECUACOR. LO QUE PASO EN EL 95 NO FUE UNA GUERRA SINO UN CONFLICTO ARMADO. TODO EL EJERCITO PERUANO YA ESTABA EN LA FRONTERA CON EL ECUADOR ESPERANDO UNA ORDEN DE LIMA PARA REALIZAR UNA INVASION MILITAR MASIVA A NUESTRO VECINO PAIS DE ECUADOR. NADIE SE OLVIDE "NUNCA TUVIMOS UNA GUERRA CON EL ECUADOR EN 1995 SOLO FUE UN CONFLICTO" A VER REPITAN DE NUEVO "NUNCA TUVIMOS UNA GUERRA CON EL ECUADOR EN 1995 SOLO FUE UN CONFLICTO"
Para que nadie se olvide, de nuevo repitan "NUNCA TUVIMOS UNA GUERRA CON EL ECUADOR EN 1995 SOLO FUE UN CONFLICTO" Y si algun ecuatoriano les dice sobre la guerra del 95 ustedes que diran:
"NUNCA TUVIMOS UNA GUERRA CON EL ECUADOR EN 1995 SOLO FUE UN CONFLICTO"
Gracias por la informacion. Me gustaria saber si hay informacion disponible a las tropas que pelearon primero se que el 1 de infanteria acantonado en lambayeque enfrento la guerra no se si fueron los primeros o quien ataco primero. Si tienes informacion te agradeceria que me la hicieras llegar.
necesito información sobre las detenciones y posteriores deportaciones a los japoneses peruanos hacia los cmapos de internamiento en estados unidos. quisiera tener acceso a fotografías.
tambien se dice que desde julio de 1941 tuvo lugar un conflicto armado con ecuador. se inicio luego de que ecuador tomara varios poblados fronterizos en el departamento de tumbes. el ejercito peruano al mando de Eluy Ureta, logro repelar a los invasores y pcupo la provincia ecuatoriana de el Oro
gracias por la informacion
DON JUAN LUIS, FELICITACIONES POR SU BLOG.
Interesante el artículo sobre el Presidente Prado. Mi Padre siendo un joven de 15 años, en Tumbes (1937-1946), fue testigo de los preparativos bélicos contra Ecuador, de observar y escuchar muchos comentarios y anécdotas de quienes regresaban del frente de batalla. En todo caso Perú y su gobierno de ese entonces, fueron más responsables ante la historia, ejemplo digno de imitar.
Si no es mucho molestar, le solicito muy comedidamente, me proporcione fotos de la toma de los puestos ecuatorianos en Juio 1941.
Saludos desde Machala, El Oro, Ecuador.
Ing. EDGAR ALVARADO AVILEZ