Introducción.- La práctica del deporte llegó al Perú en la segunda mitad del siglo XIX y se difundió rápidamente entre las décadas de 1880 y 1920, cambiando las costumbres y comportamientos de la población (según el poeta José Gálvez, desde la década de 1840 se practicaban el cricket y el tenis en Bellavista y La Legua, aunque de modo ocasional). Si bien es cierto su práctica fue introducida por los extranjeros residentes en Lima muy pronto el Estado y la élite entendieron que era muy útil en la formación del hombre viril, con voluntad y capacidad de acción, que el país necesitaba. En sus inicios, fue visto como un nuevo entretenimiento, vinculado al hombre moderno, que requería un conjunto de actividades al aire libre y así organizar el tiempo de descanso. Se trataba de una actividad saludable que permitía a las personas alejarse de los vicios o de los pasatiempos poco productivos (como los juegos de azar, por ejemplo), algo que era muy común entre los limeños. Asimismo, el deporte fomentaba el optimismo y la competencia, y producía emociones intensas pero sanas. Por ello, al igual que en Europa o Norteamérica, la sociedad peruana le asignó al deporte una función educativa: desarrollar un cuerpo autónomo y dinámico y, al mismo tiempo, inculcar la disciplina y el control.
Practicar deportes era un signo de ser moderno, según los estudios de Fanny Muñoz. Era una fuerza moralizadora que formaba el carácter de las personas. El ejercicio físico estaba, entonces, muy asociado a la idea de progreso tan en boga por estos años. Si muchos pensaban que el peruano promedio era físicamente débil, el deporte era una solución para formar nuevos ciudadanos. Por ello, su práctica debía desarrollarse desde temprana edad. Prueba de ello fue que, en 1896, el gobierno de Nicolás de Piérola reglamentó a todas las escuelas diseñar cursos de Educación Física con el objetivo de formar una generación orgánica y moralmente vigorosa. En otras palabras, se trataba de formar hombres de acuerdo al ideal burgués: sanos, viriles, autónomos y esbeltos. Cabe destacar, además, que hacia 1910 el curso de Educación Física se complementó con la llegada de los Boy Scouts, organización que tenía la tarea de completar la educación física y moral de los niños poniéndolos en contacto con la naturaleza, enseñándoles a valer por sí y a fortalecer sus músculos.
Como es lógico, la práctica del deporte no se limitó a los colegios; también lo hizo la Universidad de San Marcos (Gimnasio de la Universidad de San Marcos) y otros centros de educación superior. Las colonias de extranjeros y la población en general, además, se organizaron en clubes para fomentar la práctica de algún deporte en particular, ya sea el tenis (Lawn Tennis de la Exposición, 1895) , la regata (Club Regatas Lima, 1875), el fútbol (que con el tiempo se convertiría en el más popular), el tiro, el ciclismo (Club Ciclista Lima, 1897), el automovilismo (Touring Club del Perú), el boxeo (Lima Boxing Ring, 1921), la natación (Callao Old Boys Club, 1924) el golf (Lima Golf Club), el polo (Lima Polo & Hunt Club) o el baloncesto.
Los inicios del fútbol.- Se dice que el fútbol llegó al Perú con los barcos ingleses hacia la década de 1880. Sin embargo, recientes estudios (como los de Gerardo Álvarez) afirman que los primeros peruanos que practicaron el fútbol fueron jóvenes de la élite que habían viajado a estudiar a Inglaterra. Allá aprendieron el juego y, al retornar, iniciaron su práctica en nuestro país. El economista y escritor Alejandro Garland (1852-1912) sería el introductor del fútbol en el Perú. Los campos de juego estaban ubicados en los terrenos que existían entre la Penitenciería (donde hoy está el Hotel Sheraton) y el Palacio de la Exposición (hoy Museo de Arte). Pero parece que esta primera iniciativa no prosperó tanto; además, al estallar la Guerra del Pacífico, la práctica del fútbol y de otros deportes se paralizó.
Culminada la guerra, la vida peruana tardó en normalizarse. Así ocurrió con el deporte. Según Jorge Basadre, el primer partido se jugó el 7 de agosto de 1892 en la cancha del Lima Cricket, que tenía un campo deportivo, llamado “Santa Sofía”, en un terreno contiguo al actual Politécnico José Pardo de la avenida Grau. Los aficionados eran, por lo general, de los sectores altos. Luego, en las Fiestas Patrias de 1895 se organizó otro partido de fútbol entre un equipo formado por peruanos y otro por ingleses; la victoria correspondió a los últimos. También en 1895 se jugó un partido entre un combinado peruano-inglés frente a los marineros del buque “Leander”, al que asistieron 3 mil personas, todo un acontecimiento. En 1896, hubo un partido entre un combinado de Barranco y el Callao contra uno de Lima. También hay noticias que en 1897 se jugó un encuentro entre Barranco y Chorrillos. Pero, como vemos, los partidos eran escasos y aislados. Su práctic se circunscribía a ciudadanos ingleses y jóvenes de la élite limeña. Por ello, cuando se celebró un torneo deportivo en el campo de “Santa Sofía”, entre los días 20 y 30 de septiembre de 1897, el fútbol no fue incluido.
El primer club para la práctica exclusiva del fútbol fue el Association FootBall Club, fundado el 20 de mayo de 1897, a iniciativa de Augusto Brondi, alumno del Colegio Labarthe, junto a estudiantes del Colegio Guadalupe y del Convictorio Peruano. Otros clubes que impulsaron el fútbol fueron el Lima Cricket and Football Club, formado básicamente por extranjeros, y el Unión Cricket, de composición mixta. En 1898 se fundaron el Union Foot Ball (10 de julio) y el Club Foot Ball Perú (17 de septiembre). L amayoría de estos clubes eran fundados por jévenes de edad escolar.
El primer torneo entre equipos escolares se llevóa a cabo en 1898 con ocasión del Campeonato Atlético Nacional. Participaron el Instituto de Lima, El Colegio de lima, el Colegio de la Inmaculada, el Instituto Científico el Colegio Guadalupe y el Colegio Whilar; campeonó el Guadalupe.
Las canchas de fútbol.- Aparte del terreno de “Santa Sofía”, otro escenario deportivo, donde había una cancha de fútbol, fue la “Cancha Meiggs”, contigua a la actual Plaza Dos de Mayo. En 1896, Pedro de Osma, presidente del Unión Cricket, obtuvo de la Municipalidad de Lima un terreno de propiedad municipal en el fundo Santa Beatriz. Allí se inauguró, el 18 de junio de 1897, el primer estadio en el Perú; era para la práctica de varios deportes: fútbol, cricket, salto alto, carrera de 100 metros planos y nudo de guerra. Ya en el siglo XX, el “Circolo Sportivo Italiano” construyó el primer estadio de fútbol de Lima; fue inaugurado el 23 de agosto de 1922 y estaba en Magdalena Vieja (hoy Pueblo Libre). Luego, la colonia inglesa obsequió, como homenaje al Centenario de la Independencia, el antiguo Estadio Nacional (de madera) en Santa Beatriz; fue inaugurado el 29 de julio de 1923 con un partido de fútbol entre el equipo del Lima Cricket y un combinado nacional.
Escuela de Artes y Oficios de Lima (1905); en los terrenos contiguos a este local se jugaron los partidos de fútbol en la década de 1890
esta pagina web me parece excelente porque nos ayuda aconocer como es que el futbol llego a nuestro pais y nos orienta a seguir practicandolo
, Quisiera decir que la antigua cancha Meiggs se ubicó en los terrenos de hacienda La Legua. Esto es en el cruce de la av.Faucett con Colonial y argentina. En terrenos obsequiados por Enrique Meiggs en el año de 1873, para la construción del primer hipódromo que se tuvo en el Perú.
exelente reseña que nos da a conocer un poquito mas de nuestra historia
Excelente, quisiera saber si alguien me podría recomendar bibliografía sobre este tema: los orígenes del fútbol en el Perú. Gracias.
Me interesó encontrar un blogg con importante información sobre la historia del fútbol peruano. De mi parte puedo referir que ha recopilado información referente al fútbol en Piura, basándome en antiguas crónicas y autores de mediados del siglo pasado y que desearía compartir con ustedes.
Atentamente
que porqu. esta pagina por que no son mas especificos como es eso de un conbinado nacional. ese combinado deve tener nombre hay criollos tenian que ser lo que se quiere saber cual innombrable equipo que no se quiere mencionar o tal ves el que a escrito ni sabe