La explotación del caucho, también llamado “jebe” o shiringa por los nativos de la selva, tomó importancia a finales del siglo XIX y significó el despertar de ciudades amazónicas como Iquitos en Perú (en 1851 era un modesto pueblo de pescadores con menos de 200 personas convirtiéndose, en 1900, en una pujante ciudad de 20 mil habitantes) o Manaos en Brasil.
La demanda del comercio internacional impulsó la extracción de este recurso natural que trajo importantes beneficios al tesoro público entre 1882 y 1912. Un nuevo mito de “El Dorado” se elaboraba en la selva, aunque para las poblaciones de aborígenes representó la quiebra de su organización social, de su vida económica y de sus creencias. Esto sin contar el problema demográfico. De esta forma se escribía una nueva página del eterno choque entre las necesidades de Occidente y el modo de vida de los indígenas americanos.
Para el país la explotación cauchera representó un importante, aunque violento, paso en la ocupación, bajo criterios nacionales, del espacio amazónico. En este sentido se exploró la Amazonía reiniciándose importantes estudios geográficos a cargo de la Junta de Vías Fluviales, creada en 1901, que continuó a los de la Comisión Hidrográfica que funcionara desde 1860.
Los nativos de la selva usaban el caucho para sus juegos (hacían pelotas con él) o para impermeabilizar bolsas. El mundo occidental comenzó a necesitarlo desde 1823 cuando Macintosh logró patentarlo para la manufactura de productos impermeables. Más adelante, en 1839, Charles Goodyear descubrió que si el caucho se mezclaba con azufre y se calentaba se obtenía un producto más fuerte, elástico y resistente tanto al frío como al calor.
A raíz de ese descubrimiento, el “vulcanizado”, la producción del caucho en Brasil, por esos años el primer productor mundial, se incrementó notablemente para subir de 338 toneladas en 1840 a 2,673 en 1860. A finales de siglo, el caucho se convirtió en un producto imprescindible para la industria automotriz cuando, en 1888, se patentó el procedimiento para fabricar llantas inflables.
El auge cauchero atrajo a la amazonía a numerosos migrantes que trabajaron en su explotación (como los casi míticos Carlos Fermín Fitzcarrald o Julio César Arana) y en los servicios vinculados a la misma.
Como cualquier industria extractiva, no consideraba útil la conservación del medio ecológico ni la del árbol productor del jebe, pues se pensaba que el recurso era inagotable (como antes parecía serlo el guano). De esta manera, los árboles eran talados indiscriminadamente y los caucheros pronto se ganaron una siniestra fama frente a la población nativa. Eran los portadores del mal, además de ser transmisores de enfermedades, como el tifus o la malaria, que diezmaron seriamente a la población nativa. Se calcula que unos 40 mil nativos murieron de estas enfermedades durante el “boom cauchero”.
Si miramos algunas cifras, en 1897 el caucho representaba el 9.3% del total de las exportaciones del país. En 1884 se exportaron 540,529 kilos mientras que, entre 1900 y 1905, salieron por el puerto de Iquitos más de 2 millones de kilos de caucho por año. De otro lado, en 1900 el monto en libras esterlinas por su exportación fue de 378,318 y en 1905 fue de casi un millón. A partir de ese momento, le salieron competidores de otras partes del mundo. Exploradores británicos habían exportado plantas a la India y a Ceylán donde se desarrollaron extensas plantaciones. El precio del caucho empezó a disminuir en el mercado. Luego aparecería el jebe sintético. La era del caucho estaba finalizando para el país.
ME PARECE MUY INTERESANTE ESTE ARTICULO Y MAS AUN LAS CIFRAS QUE SE DAN A CONOCER LAS CUALES DESCONOCEMOS LA GRAN MAYORIA DE PERUANOS SIENDO ESTO UNA PARTE IMPORTANTE EN LA HISTORIA QUE POSEE NUESTRO QUERIDO PAIS SIN EMBARGO ME GUSTARIA SABER MAS AL RESPECTO SOBRE EL "BOOM DEL CAUCHO" AGRADECERIA ME PUDIERAN MANDAR ALGUNA BIBLIOGRAFIA ADICIONAL AL RESPECTO.
GRACIAS
MUY BIEN SU REDACCION, LA INFORMACION ABARCO TODO LO QUE BUSCABA
Muy bien como siempre el Profesor Juan LUis siendo claro y directo como en sus clases
es una interesante información, que mas alla de dar a conocer uno de los recursos mas valiosos de la selva amazónica; no muestra y nos da como reflexión, que como Peruanos debemos aprender a valorar los recursos naturales que poseemos y sobre todo darle el uso adecuado.
Porqué en el Perú no hacemos lo que se hace en Malasia, Tailandia e Indonesia (Producen el 95% del caucho natural del mundo). Siembran en surcos y aumenta la productividad por hectárea. El Perú tiene el espacio ecológico y además se reforestaría zonas que han sido arrasadas por la agricultura migratoria, la meta sería dejar de importar caucho y abastecer a la industria nacional
gracias me ayudo muxo para un concurso¡¡¡¡
ME GUSTARIA SABER MAS DEL CAUCHO QUE CONSECUENCIAS TRAJO Y QUE DAÑOS INVOLUCRO
Y SABER UNA OPINION DEL CAUCHO
Felicitaciones, por el artículo, invoco a destacar las formas y sistema de trabajo que se realizo em esse período, el trabajo esclavo, la explotacion, es muy bueno saber que llegó mucho dinero, pero cómo se generaba toda esa riqueza? el trato deshumano, la coerción, las vidas humanas que se perdieron,por la enfermieades tropicales, creo que son cuestiones que seria bueno analizarlos.
abrazos