Pratibha Patil denegó petición de clemencia a dos condenados a muerte en medio de las críticas de grupos defensores de los derechos humanos
Viernes 27 de mayo de 2011 – 08:15 pm
(Reuters)
La pena capital se retomaría en la India. La presidenta de este país, Pratibha Patil, denegó la petición de clemencia a dos condenados a muerte dando así luz verde a su ejecución.
Devinder Pal Singh Bhullar y Mahendra Nath Das son los afectados por la decisión de la mandataria. Mientras que el primero fue juzgado por “planear ataques terroristas”, en los que varias personas murieron; el segundo será condenado a muerte por asesinatos.
“La presidenta consideró que estos dos hombres no merecían una revisión de su pena y que sus delitos les hacían acreedores de la condena a muerte, por lo que decidió confirmarla”, informó una fuente del Gobierno indio.
Esta es la primera vez que un presidente indio autoriza una pena de muerte decretada por el Supremo desde el 2004. Antes era una práctica común que los jefes de Estado perdonaran a los condenados o que no declararan sobre sus peticiones de clemencia.
Cabe destacar que la justicia de este país aplica la pena capital siguiendo el principio de caso “rarest of the rare” (“el más extraordinario entre los extraordinarios”).
CRÍTICAS
No tardaron en llegar los cuestionamientos sobre la decisión de la presidenta india. Así, el director de Amnistía Internacional para Asia-Pacífico, Sam Zarifi, dijo que la ejecución de dos hombres tras siete años es “completamente decepcionante y supone un paso atrás para los derechos humanos en el país”.
“Para la India, usar la pena de muerte en este momento supondría dar la espalda a la tendencia global contra la abolición de las ejecuciones, un número que continúa en declive”, añadió.
SOBRE LAS ÚLTIMAS EJECUCIONES
La última ejecución que se llevó a cabo en la India fue en el 2004. El preso afectado en dicha oportunidad fue Dhananjoy Chatterjee, a quien ahorcaron por haber violado y asesinado a una colegiala.
Desde su independencia, en 1947, la India había reconocido oficialmente solo 45 ejecuciones. Sin embargo, la Amnistía Internacional asegura que en la década de 1960 se habían cometieron 1.450.
fuente: EL COMERCIO PERU