El día de hoy escuché que un nuevo verbo: “forecastear”.
Podemos preservarnos y eternizarnos en los neologismos, así ya no nos sentiremos limitados por el purismo de los que hablan bonito y tienen los dientes blanquitos.
Nosotros nos “trichearemos” y nos reivindicaremos. Y nunca más nos excluirán. Y “el baile de los que sobran”, será “el baile de los que estamos aquí”.
Y así será, porque también estaremos truffauteados y sachaguitryados. Y seremos muy felices por los siglos de los siglos, amén.