– Entonces, ¿el arte ha muerto?
– Me recuerdas a Adorno: “Después de Auschwitz es difícil escribir poesía”
– No… después de ti, es difícil escribir poesía.
Agradecí la feliz naturaleza de los pensamientos silentes. A mis pensamientos sólo los escucho yo. No sé… yo no creo que el arte muera. Ella es eterna, inacabada, como eternos son los pesamientos.
Quizás sea mi prejuicio Vic, no lo sé… pero se me hace más tolerable escuchar hablar de estas maravillas a alguien a quien aprecio. Pero, ¿qué dices oeeee? A mi me pareció que la última ponencia fue magistral. Sí, no lo sé, por eso te decía que era mi prejuicio, y sabes que mis prejuicios están para ser desbaratados, bueno, algunos…
Con la siguiente charla, mi prejuicio quedó desbaratado. No lo conocía. Nunca antes lo había visto. Pero luego de escucharlo responder a la pregunta del paradigma comunicacional con esa bella analogía de Gadamer sobre el mundo de la vida, le sonreí. Pensar en la posibilidad de una apertura de la conversación, del diálogo, de no saber hacia donde irán, qué giro tendrán que tomar, me pareció dulce y sublime. Dulce pregunta, Cecilia. Una respuesta más dulce aún.
Nota Mental: Debo confirmar mi hipótesis de si es cierto que es más fácil escuchar a alguien a quien aprecias porque el mensaje y el mensajero son para ti como si fuera uno. Pero, ¿y la falacia ad hominem?… Por eso te decía, que mis prejuicios están para ser desbaratados… algunos. ♫ ♪