Sinesio López Jiménez
En los diversos estudios comparados sobre el Estado en AL, el peruano es uno de los más débiles si se consideran la dimensión coercitiva, la de provisión de bienes públicos y la de extracción de los recursos de la población. Los más fuertes son Chile, Uruguay, México y Argentina. Del mismo modo, el estado peruano es uno de los que distribuyen más desigualmente sus funciones y capacidades en el territorio, a diferencia de los estados chileno y uruguayo cuyas funciones y capacidades se distribuyen mucho más igualitariamente en todas sus regiones.
Para comparar a los Estados las diferentes investigaciones discuten las dimensiones del Estado que se consideran tanto en sus funciones como en sus capacidades. Las dimensiones que ellas asumen, con pequeñas variantes, son las ya señaladas. Una vez establecidas las dimensiones buscan los indicadores más vigorosos que las cuantifiquen adecuadamente. Debido a que las comparaciones son históricas y de larga duración, la ausencia de datos e indicadores limita con frecuencia la consideración de las dimensiones estatales.
En un primer avance que irá mejorando, el equipo de investigadores sobre Estado y Democracia en el nivel subnacional ha logrado establecer el nivel de penetración del Estado peruano en todas las provincias de las diversas regiones del Perú. Las dimensiones estatales y sus respectivos indicadores que se han tomado en cuenta son las siguientes: efectividad legal (jueces, comisarías y policías), eficacia burocrática (capacidad del gasto público, número de profesionales y funcionarios de los gobiernos locales), seguridad ciudadana (homicidios dolosos), provisión de bienes públicos (indicadores de salud y educación), capacidad extractiva (impuestos de los gobiernos locales) y nivel de penetración del estado en la población (población con DNI, ciudadanía efectiva) y en el territorio (% de viviendas con agua y desagüe, % de viviendas con electricidad, Kms de carreteras). Cuando tengamos los datos necesarios mediremos la función coercitiva.
A partir de las cuantificaciones parciales de las diversas dimensiones estatales se construyó un índice general que mide la distribución de las funciones del Estado en todas las provincias del Perú. El mapa del Estado peruano es claro: El estado es básicamente costeño. En la mayoría de las provincias de la sierra y de la selva, el Estado es débil o no está presente. Existe una brecha estatal entre la costa, por un lado, y la sierra y la selva por otro. El mapa del estado muestra la distribución de las funciones estatales en el territorio. El análisis de las capacidades estatales o las habilidades con que cuenta el Estado para desempeñar las funciones que tiene requiere la realización de estudios de casos regionales.
Es cierto que el mapa real del Estado tiene su historia y sus actores que será el tema de reflexión de otro artículo. Por ahora quiero señalar los límites que tiene el Estado peruano para gestionar las políticas públicas en las regiones y provincias donde es débil o casi no existe. Si no hay Estado o este es débil, no hay políticas públicas o éstas son deficientes.