Fecha: 20/03/2012
Cadiz
(EUROPA PRESS) – El presidente del Tribunal Constitucional (TC), Pascual Sala, ha presidido un Pleno extraordinario con el que dicha institución se suma a los actos de homenaje para celebrar el bicentenario de la Constitución de 1812, de la que, según ha dicho, “nació de manera auténtica el constitucionalismo español”. El acto se ha celebrado en el Oratorio de San Felipe Neri, el mismo lugar que hace exactamente dos siglos vio nacer la Carta Magna gaditana.
Según ha manifestado, “la nación concebida como conjunto de los ciudadanos españoles, la soberanía nacional, la división de poderes y la garantía de los derechos, piezas vertebrales de aquella Constitución, son hoy, pasados ya 200 años, las mismas piezas vertebrales de nuestra Constitución vigente”.
El presidente del TC ha enfatizado que la promulgación de la Constitución de Cádiz fue posible gracias al “consenso” y el “equilibrio” buscado los diputados doceañistas, siendo una característica que “une también, de una manera muy especial, aquélla Constitución con la nuestra actual, surgida igualmente del equilibrio y el consenso”.
Ha apuntado que, “por desgracia”, la Constitución de Cádiz estuvo poco tiempo en vigor, pero “su impronta se cernió, como un mito, en todo nuestro constitucionalismo liberal y democrático hasta el presente, e incluso se proyectó, como un contrapunto, sobre nuestras Constituciones más conservadoras”. Tuvo, pues, una “gran influencia interna, y desplegó también una extraordinaria influencia exterior”, no sólo en Iberoamérica, sino también en Europa.
Sala ha enfatizado los motivos “más que suficientes” para homenajear una Constitución que “marcó el verdadero nacimiento en España del Estado constitucional como Estado en el que el pueblo tiene atribuida la soberanía y los ciudadanos garantizada su libertad mediante un sistema basado en la división de poderes y en los mecanismos del Estado de Derecho”. “Fue, sin duda alguna, un hito en nuestra historia”, ha agregado.
En su opinión, una institución como el TC, cuyo significado está “fundido” con la Constitución misma y cuya defensa jurídica se le confía, “no podía estar ausente en la justa celebración”. Por ello, ha considerado que “el mejor homenaje” que se le podía rendir era realizar en el Oratorio el acto que más caracteriza al Tribunal por ser el propio de su naturaleza.
De este modo, se ha procedido a aprobar y dictar una sentencia de Pleno. Subraya Pascual Sala que no se ha elegido una sentencia menor o de circunstancias, sino una sentencia correspondiente a un proceso constitucional de “extraordinaria entidad”, en el que se debaten dos cuestiones centrales del Estado de Derecho y que fueron, por ello, también centrales en la Constitución de 1812: la función del Tribunal Supremo –creado en España precisamente por aquella Constitución– y el significado y alcance de la independencia judicial –por primera vez garantizada también por la Constitución de Cádiz–.