(Artículo inédito del connotado sociólogo Carlos Reyna Eyzaguirre)
1.- En el último año de su período, el Sr. Alan García y su bancada se han dedicado a sacar cartas de bajo la manga. Una reforma que debieron promover al inicio de su gobierno, recién ahora la colocan sobre la mesa, con propósitos que invitan a la suspicacia.
2.- ¿Cómo es posible que un Congreso elegido por millones de electores sea, al poco tiempo, cooptado y controlado por intereses particularistas, y legisle luego para ellos y a espaldas de la mayoría del pueblo, con solo 7 % de aprobación?
3.- La razón es simple: El único momento en que los ciudadanos tienen poder sobre los congresistas es al momento que los eligen y nunca más vuelven a tenerlo. Eso hace que los congresistas, apenas elegidos, le arrebaten al pueblo su soberanía y ya no sean delegados del pueblo sino sus mandones.
4.- El presente sistema político y electoral ayuda a esa expropiación política del pueblo.
• Hace elegir a los congresistas por regiones y no se les exige residencia efectiva. De ese modo, en el mejor de los casos, los congresistas solo representan a las capitales de región, y a veces ni siquiera porque hay quienes ni vivían en ellas mucho tiempo antes de ser candidatos.
• Se los elige por cinco años, y no hay derecho a revocatoria. Y si hubiera revocatoria, sería imposible por la cantidad de firmas necesarias en la región.
• Para hacer campañas regionales deben tener dinero dada la extensión del territorio y el costo de los avisajes.
• Los requisitos para la inscripción de partidos obligan a grandes gastos, dan más posibilidad a los partidos que se vinculan a intereses económicos y no garantizan la existencia de verdaderas organizaciones partidarias.
• Los partidos que se inscriben no están obligados a practicar democracia interna. Sus procesos electorales, sus padrones, sus escrutinios, son manipulados por sus cúpulas.
• No se permite a las organizaciones políticas regionales presentar candidatos al Congreso. Esto es derecho exclusivo de los partidos nacionales.
• Las propias campañas electorales nacionales son aún mucho mas costosas, especialmente en la TV, el principal medio de comunicación. Eso favorece a que intereses económicos, nacionales o extranjeros, financien campañas a cambio de favores posteriores.
5.- En este contexto, reducir la duración del mandato de los congresistas es absolutamente insuficiente si se mantiene igual todo lo demás. La reforma del Congreso debe incluir cambios en todo lo mencionado en el sentido siguiente.
• Para hacer más real la representación de la nación, los congresistas deben ser elegidos a nivel provincial. Las provincias deben ser organizadas en circunscripciones cada una de las cuales elegiría un congresista. Las llamadas circunscripciones uninominales.
• En el modelo actual, de elección congresal regional, salvo las capitales departamentales, el resto de provincias se quedan sin congresistas. Por tanto prácticamente 170 de las 194 provincias se quedan sin representación. Esa es la gran brecha que no se quiere reconocer.
• Reducir el mandato congresal a dos años y medio. En su defecto, por cinco años pero revocables a mitad de periodo si lo pide el 10% de los sufragantes en su circunscripción
• Tienen derecho a presentar candidatos presidenciales tanto los partidos nacionales como las organizaciones políticas regionales.
• Se deja de lado el requisito de firmas para inscribir a partidos nacionales u organizaciones regionales. Se establece el requisito de acreditar la existencia de verdadera organización partidaria a través de eventos y estructuras debidamente comprobados y certificados bajo estándares establecidos por el JNE y verificados por ONPE.
• La democracia interna debe suponer supervisión efectiva y no solamente asistencia técnica por parte de ONPE. Asimismo, jurisdicción efectiva del JNE frente a impugnaciones o contenciosos electorales internos.
• Establecer legislación que reduzca efectivamente la influencia del dinero en las campañas electorales. La campaña en TV solo se podrá hacer en espacios concedidos por los medios televisivos sin permitirse contratación privada de propaganda electoral.
• Ya el hecho de hacer elección congresal a nivel de provincias organizadas en circunscripciones uninominales pondrá a los candidatos y congresistas mucho más cerca de los ciudadanos, reducirá el costo de las campañas, y el Congreso será mejor reflejo del país diverso. Junto con todo lo demás, dará mas poder a los ciudadanos y hará más real la idea democrática.
En el actual sistema electoral prima el sistema de representación proporcional para la elección del Congreso, el cual permite a grupos minoritarios tener presencia política. Y aunque este sistema permite una representación más fiel de las fuerzas políticas tiene algunas desventajas: propicia la fragmentación partidaria, impide la formación de un sistema de partido dominante; lidia con dificultades de gobernabilidad, etc. En cambio, los sistemas de circunscripciones uninominales, normalmente asociadas con sistemas de partidos bipartidistas, fomentan la concentración partidaria, la gobernabilidad, la moderación política y la alternancia. En efecto, debemos apuntar a un sistema binominal que brinda incentivos para la consolidación del sistema de partidos y la estabilización del proceso democrático.
En efecto, la ONPE actualmente se desenvuelve solo como veedor/asistente técnico, pero será difícil que asuma la función de determinar la existencia o no de una verdadera organización partidaria dado que eventos y la existencia de estructuras organizativas de los partidos políticos no pueden medirse fácilmente, a diferencia de las firmas actualmente requeridas; habría que seguir analizando estas alternativas.
Para lograr una verdadera democracia interna en los partidos políticos, los procesos electorales internos deberían realizarse en base al voto universal (un afiliado, un voto).
En lo económico, se debe disponer del presupuesto que por ley corresponde a los partidos políticos para su normal funcionamiento. Esto fortalecerá a los partidos políticos y evitará reclamos posteriores por los favores económicos prestados.
Gracias por la oportunidad de opinar.
Además de propuestas parciales como la revocatoria (o el recorte del mandato parlamentario), lo que se necesita es una reforma integral del régimen parlamentario (bicameralidad acorde con la regionalización, circunscripción uninominal para elegir a los congresistas) e insistir en una verdadera reforma de la Ley de Partidos Políticos.
Por eso, coincido en lo fundamental con lo señalado por Carlos Reyna.
¿Cómo ves la bicamerilidad? ¿Circunscripciones uninominales en los dos casos? Yo imagino distrito único para senadores y distritos uninominales para diputados (pero habría que ver como anda los de las macroregiones, ¿no?).
También sería bueno reformar las relaciones del Ejecutivo-Legislativo, reacomodando los poderes del presidente y devolviendo varias funciones al Senado.
Y, por cierto, el recorte del mandato parlamentario parece un chiste de mal gusto.
Mi estimado Juan Manuel, mi esquema sería el siguiente:
1. La elección de los diputados de la primera cámara sería mediante circunscripciones uninominales.
2.La elección de los senadores se realizaría en una fórmula mixta (tal como la que no llegó a ser aprobada el año pasado en el Congreso): de los 50 senadores que debería haber, la mitad sería elegido uninominalmente, en cada una de las regiones (departamentos). Los otros 25 sería elegidos en distrito único nacional, es decir plurinominalmente, a través de listas de 25 candidatos cada una. En este último caso regiría el criterio de proporcionalidad.
Con ello, habría parlamentarios (diputados o senadores) elegidos por tres niveles diferentes: 25 senadores elegidos nacionalmente, otros 25 elegidos regionalmente, y todos los diputados elegidos prácticamente a nivel provincial (o incluso distrital, como sería en el caso de Lima o las provincias con mucha población electoral).
Finalmente, una pregunta: ¿por qué la idea del recorte del mandato parlamentario te parece un chiste de mal gusto? ¿Es por el contenido de la propuesta en sí, o por la forma en que ha sido propuesta en el actual contexto?
Muchas gracias Carlo.
En verdad tengo dudas sobre circunscripciones tamaño provincial (o incluso menor). Por colocar tres cosas que se ocurren ahora, (1) creo podría traer a la cámara política discusiones locales que deberían ser resueltas en ese ámbito (líos como Abancay vs. Apurímac o Lurín vs. Pachacámac); (2) los intereses demasiado locales distraerían la naturaleza de la cámara de diputados que debería pensar al país desde lo local y no velar por asuntos vecinales, lo que muy posiblemente ocurra (por lo que me parece mejor un representación regional); (3) además, si la propuesta viene unida a la revocatoria, favorecería a que las complicaciones de la revocatoria municipal se traslade a la cámara baja, con el caos, los costos y la angurria (de los segundos lugares y de los propios congresistas, que tendrían casi un mandato imperativo) que ello generaría (la revocatoria con circunscripciones regionales me parece más manejable). Por ello, pensaba en circunscripciones regionales uninominales para la cámara de diputados (lo que implica repensar también el tamaño de las regiones) y un distrito único para la cámara alta.
Sobre el recorte del mandato, la parte cómica y de mal gusto es, desde luego, por cómo ha sido presentada. Adicionalmente a ello, también me parece una propuesta menos interesante que la de renovación, pues –ya se ha mencionado bastante– tendríamos a todos los congresistas en permanente campaña (con todo lo que ello implica para la función parlamentaria, además de los costos para el Estado y las agrupaciones); asimismo, se podría generar el clásico problema de gobernabilidad del que padecen los regímenes presidenciales cuando se quedan sin posibilidad alguna de articular mayoría en el Congreso (la renovación permite contar con parte de la fuerza política que se arrastró de la elección presidencial; no es mucho, pero me parece mejor modelo frente a la posibilidad de perderlo todo al recortarse el mandato).
Creo que ya se acabaron los plazos para lograr esos cambios, no se requieren dos legislaturas?….y la convocatoria es este año, quien conoce los plazos?
Yo conozco los plazos estimada Gabriela, y aunque están ajustados para hacer una reforma constitucional, aún hay tiempo, ya que este año hay dos legislaturas, la que acaba en julio y la que se inicia en agosto.
En cuanto a los plazos, hay dos opciones: (1) Basta que una legislatura apruebe la reforma con 61 votos si también se aprueba por referéndum (podría lograrse la reforma en octubre de 2010, si se obtienen los votos suficientes en legislatura que viene y si se consulta a la ciudadanía en el siguiente proceso electoral); (2) pueden ser dos legislaturas con aprobaciones de 81 votos en cada ocasión (saldría igual el 2010, con las justas y solo si se logran todos esos votos). En abstracto, el trámite podría agilizarse si hubiera una iniciativa ciudadana de reforma en marcha, pues el Congreso debería pronunciarse dentro de los 120 días de recibida la propuesta con las firmas acreditadas; aquí el problema es, como se sabe, que ya hay una iniciativa popular de reforma constitucional presentada por ciudadanos apristas, que debe ser tramitada conforme a ley…
Gracias por esta información, otra consulta, y les pido disculpas porque soy absolutamente ignorante en la materia,…si esto se aprueba en dos legislaturas este año, se puede aplicar para la siguiente elección?…teniendo entendido que a fin de este año la convocatoria electoral nacional ya debe haber sido formulada?
Si la reforma se aprueba antes de la convocatoria a elecciones generales por supuesto que debería aplicarse para dichas elecciones. Esta convocatoria se realiza entre 150 y 120 días antes de las elecciones. Dado que las elecciones son el segundo domingo de abril, y que por regla general el Presidente utiliza el plazo de 120 días, la convocatoria sería en diciembre.
Es decir, insisto, aunque el tiempo es ajustado, la reforma podría hacerse y aplicarse desde las próximas elecciones generales. Lo que hay que ver es si existe verdadera voluntad política para llevar adelante la reforma. Ese es el meollo del asunto y eso si es algo que no podemos garantizar, teniendo el Congreso que actualmente tenemos.
Carlo, sobre el tema de si existe o no la voluntad politica, creo que los peruanos ya tenemos una informacion, este tema lo han venido pateando reiteradamente.
la propuesta como la ha planteado el gobernante creo que no es integral, y no se si los votos de este gobierno sirvan para lograr este proposito o si es absolutamente distractivo.
muchos saludos y gracias por tu ayuda, te molestare siempre que tenga dudas , eres un encanto.
feliz fin de semana.
Estimada Gabriela, lo que creo es que la oposición debería aprovechar el empeño que ha puesto el oficialismo en realizar una reforma del régimen parlamentario, para lograr que se apruebe una reforma integral. No se olvide que, si consideramos los diversos proyectos de reforma constitucional que existen, las cartas ya están sobre la mesa.
Bastaría sumar el proyecto de bicameralidad que se discutió el año pasado, con la a propuesta de revocatoria + distrito uninominal de Compromiso Democrático (http://blog.pucp.edu.pe/ite…) y ya tendríamos una propuesta integral a nivel de reforma del régimen parlamentario. Lo de la Ley de Partidos Políticos es técnicamente más fácil aún.
Lamentablemente, tanto el oficialismo como la oposición, no han demostrado estar a la altura de las circunstancias. Aunque aún abrigo la esperanza (remota) que se puedan reivindicar.
Y, por supuesto, estimada Gabriela, muchas gracias por las generosas palabras que has expresado sobre mí.
Estoy de acuerdo contigo Isabel,mejor explicado no pude estar.
Provincias uninominales puede ser, ampliando el número de representantes; ver cómo se balancea eso con el número de votantes. De paso, así pasan a ser propiamente representantes y deberían complementarse con un senado nacional. Lo de la revocatoria, lo hemos visto en la onpe, no parece solucionar nada; me gusta lo de periodos más cortos pero ya aparecerá algún demagogo diciendo que sin reelección lo que tendr{ia a los congresistas aprendiendo todo desde 0 cada dos años
segunda vuelta para ejecutivo y legislativo
Estimado Walter,
Estoy totalmente de acuerdo en que habría que ampliar el número de los congresistas de la primera cámara (diputados). Estimo que deberían ser unos 170 diputados, conforme lo sustenté en un antiguo artículo académico: http://blog.pucp.edu.pe/med…
De otro lado, de acuerdo con la segunda vuelta parlamentaria; la misma que sólo sería viable si las circunscripciones son uninominales.