Por JUERGEN BAETZ
The Associated Press
Un grupo de investigadores en Alemania desarrolló una nueva tecnología que permite que los automovilistas muevan el volante utilizando solamente sus ojos.
Raúl Rojas, un mexicano nacionalizado alemán e investigador en el terreno de la inteligencia artificial en la Universidad Libre de Berlín, dijo el viernes que la tecnología rastrea el movimiento ocular del conductor y luego gira el volante a la dirección en que está mirando.
Rojas y su equipo presentaron el prototipo con dicha tecnología en un aeropuerto abandonado de la capital alemana.
La camioneta Dodge Caravan maniobró por la pista del aeropuerto de Tempelhof y su conductor utilizó la vista para controlar el volante, que giraba como si estuviera manipulado por un fantasma.
La tecnología llamada eyeDriver permite manejar el vehículo hasta a 50 kilómetros (31 millas) por hora.
“El próximo paso será lograr que funcione a 96 kilómetros (60 millas) por hora”, dijo Rojas.
En definitiva, agregó, “el mayor desafío será por supuesto conducir en una ciudad con peatones y numerosos obstáculos”.
Por ahora, los ejercicios son relativamente sencillos. La Dodge puede seguir las evoluciones de los peatones y los demás automóviles e incluso retrocede cuando el conductor mira al espejo retrovisor.
Sin embargo, no está claro cuándo -si acaso- la tecnología será comercializada debido a las dudas sobre seguridad y utilidad: ¿qué sucede si un automovilista desvía la vista unos pocos segundos para mirar a una chica linda que pasa por la calle? O si alguien tiene la ocurrencia de desviar la mirada para tomar un teléfono celular que está llamando.
Pero los investigadores tienen una respuesta a los conductores distraídos: el auto, bautizado “El espíritu de Berlín”, es también un vehículo autónomo con navegación posicional, numerosas cámaras, láser y escáners que le permiten marchar solo.
“El automóvil puede hacer todo. Puede marchar de manera autónoma o puede ser conducido por la vista del conductor”, dijo Rojas. Cuando conduce solo, de acuerdo con la información suministrada por los escáners y las cámaras, sólo requiere la orientación del conductor en las esquinas.
“Se detiene en las intersecciones y pregunta al conductor qué camino tomar”, según los investigadores. El chofer mira hacia la dirección deseada y el automóvil reanuda la marcha.
Para demostrar la autonomía del auto, en un momento Rojas saltó frente al vehículo -que iba a unos 15 kilómetros (10 millas) por hora- y el Dodge se detuvo instantáneamente guiado por las cámaras que detectaron el obstáculo.
“¡Vaya! Me salvé esta vez”, dijo Rojas bromeando.
El conductor David Latotzky ocupó el asiento delantero del pasajero, provisto de un casco de ciclista clave para el funcionamiento del eyeDriver: una cámara montada en la parte superior vigila el camino, y otra rastrea constantemente su movimiento ocular.
“Los sistemas de manejo autónomos podrían cambiar mucho la forma en la que nos movemos en el futuro”, dijo Rojas.
Fuente: elnuevoherald.com