En los primeros meses del año 2012 el Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) Adriana Rebaza Flores, contará con su nuevo local en el distrito de Chorrillos, que permitirá atender mejor a los pacientes y desarrollar más adecuadamente la investigación y docencia en materia de rehabilitación.
Una misión japonesa se reunió la semana pasada con los representantes de esta institución y del Ministerio de Salud para ultimar los detalles de los planos correspondientes a la nueva sede institucional.
“Este mes debemos recibir los planos completos para iniciar los trámites de licencia de construcción ante la Municipalidad de Chorrillos”, dijo el director del INR, Fernando Urcia Fernández.
Anunció que a fines de noviembre o los primeros días de diciembre deberá viajar al Japón un representante del portafolio con poderes para firmar el contrato con la empresa japonesa que resulte ganadora de la licitación que se realiza en ese país para la construcción del local.
Esta obra –reveló Urcia– demandará una inversión superior a los 99 millones de nuevos soles; de esta suma, el 52 por ciento lo dona Japón y el 48 por ciento restante lo aporta el Perú.
“Cuando se suscriba el contrato en diciembre de este año, iniciaremos la construcción. Calculamos que puede ocurrir en los primeros días de enero próximo, por lo que el nuevo local estaría listo para febrero o marzo de 2012”, señaló.
El nuevo local tendrá un área construida de 18 mil 700 metros cuadrados, de los que ocho mil metros cuadrados construirá el Perú y 10 mil 700 metros cuadrados le corresponderán a Japón.
“La extensión total del terreno es de 37 mil metros cuadrados y quedarán libres algo más de 20 mil metros”, detalló el funcionario.
Además, contará con un área para el laboratorio de análisis de marcha, un tomógrafo y una piscina terapéutica.
Las áreas de atención serán las mismas que existen en la actual sede del INR, que se encuentra en Bellavista, Callao, pero con espacios más amplios para mejorar la atención de los pacientes.
Con su nuevo local, la atención en el INR mejorará mucho, pues ha sido diseñada para atender a personas con diversos problemas motores. “El hospital que tenemos actualmente fue diseñado para otros fines”, precisó Urcia.
Explicó que la nueva sede ofrecerá una atención que tendrá un soporte de infraestructura y equipo necesario y adecuado.
“También nos ayudará a desarrollar las dos funciones de la institución que se cumplen ahora, pero con dificultad: la docencia y la investigación”, agregó.
Ante este panorama, adelantó que se optimizarán las condiciones en que se realiza la capacitación e investigación y se implementarán más programas en beneficio de los pacientes.
Atenciones
En su actual sede del Callao, el Instituto Nacional de Rehabilitación atiende a un promedio de 35 mil personas por año en consulta.
La demanda de atención en el nuevo local se retraería inicialmente para incrementarse luego hasta llegar a un número considerable de pacientes. Posiblemente se duplicarán las 225 mil atenciones de terapia.
Fuente: ANDINA
