Más de 3.000 expositores con tecnología de última generación: móviles más potentes, cepillos que analizan el estado del cabello, televisores ultrafinos y cápsulas para hacer cerveza en casa como si fuese el café de George Clooney. En Consumer Electronics Show (CES), la mayor feria de tecnología que estrena la temporada tecnológica cada año en Las Vegas, hubo novedades al margen del circuito comercial, adelantos pensados para hacer más sencilla la vida de aquellos que tienen que bregar con la discapacidad. La Organización Mundial de la Salud estima que más de 1.000 millones de personas viven con algún tipo de discapacidad. Eso significa que uno de cada siete habitantes del mundo está limitado por problemas de movilidad, visión o audición, por poner solo unos ejemplos.
Es muy probable que estos avances tarden en llegar a los hogares pero el mero hecho de presentarlos en este entorno ya marca un nicho de negocio con un fuerte interés tanto social como comercial. El envejecimiento de Occidente, con los baby boomers entrando en la edad de jubilación prometen muchas más novedades en este campo.
Todos los dispositivos aquí reseñados, salvo uno, el cojín para silla de ruedas, han sido distinguidos con los galardones de innovación en la feria de Las Vegas, que acaba de ser clausurada. Los tres primeros han merecido los premios más importantes, denominados Best of Innovations, y que solo obtienen 36 de los 20.000 productos que se presentan.
1. Un chivato inteligente para ver. Aipoly Vision es una aplicación, de momento solo para iPhone, que utiliza la inteligencia artificial para ayudar a invidentes. Usa la cámara del teléfono para reconocer enchufes, puertas, comida o animales. Va relatando al dueño del móvil en tiempo real qué tiene ante sí, de modo que puede tener más independencia para moverse. Es gratis y se puede descargar en la tienda de aplicaciones de Apple. Esta app ha sido distinguida en la feria CES como uno de los productos Best of Innovations, que premian la excelencia en todas las categorías.
5. La silla de ruedas que te dice si estás bien sentado. La silla de ruedas es otro de los aparatos de uso común, pero apenas ha evolucionado más allá de retoques en ergonomía y materiales más ligeros. Gaspard se preocupa por uno de los grandes problemas de aquellos obligados a moverse en una de ellas, la mala postura. Su invento añade una plantilla escondida bajo el cojín del asiento que percibe cómo está sentado el usuario a partir de sensores de presión. Después, a través de una aplicación móvil, le indica si su postura es correcta para evitar dolores crónicos o lesiones derivadas. También sirve como báscula y mide el ejercicio físico, como hace el Apple Watch o las pulseras de fitbit.
6. El guante para tratamiento del ictus. La coreana Neofect pone su atención en las víctimas de los accidentes cerebrovasculares. Ofrecen un guante, Rapael Smartglove, para que el esfuerzo en la rehabilitación de las manos dañadas por la lesión obtenga su recompensa. El dispositivo incluye ejercicios con una vertiente lúdica para mantener el interés del paciente. El guante cuenta con diferentes sensores para medir fuerza, giros, velocidad… En pantalla el usuario estará reaprendiendo a mover objetos virtuales, estrujar frutas o meter la llave en una cerradura ficticia.
7. Sentir en la pantalla. Hap2U no se centra de manera concreta en la discapacidad, está pensando para todos los públicos, pero sí resultará más útil a aquellos cuya movilidad y pulso se hayan reducido. Esta herramienta permite sentir la tensión cambiante, distinguir el tacto rugoso o suave de una pantalla táctil. Ofrece una capa extra de sensibilidad y respuesta al movimiento en casi cualquier superficie que recoja nuestros movimientos sobre ella. Se trata del mismo sistema que ofrecen los últimos móviles de Apple, pero con respuesta adaptable. La tendencia háptica, que hace que los aparatos tengan una respuesta física inmediata y fácilmente perceptible, va a ser una constante en la próxima hornada de móviles. En este primer experimento, permite subir el volumen de la radio sobre la pantalla del coche o cambiar de emisora sin quitar la mirada de la carretera, solo con el dedo sobre el panel