Húanuco se encuentra en el corazón del Perú, a ocho horas de su capital. Se le conoce por su clima, ya que se dice, posee todos los climas del país. Esta constituido por un 61% de selva y 31% de sierra; aún posee un alto índice de ruralidad, similar a Puno o Cusco.
Puente Calicanto, Huánuco. Foto: Marco Gamarra Galindo.
Para llegar a Huánuco solo se necesitan ocho horas: desde la capital tomando la carretera central hasta la ciudad minera de La Oroya, luego tomando el desvío a la izquierda (409 km). Por otro lado, las salidas aéreas a Huánuco son diarias.
Si te gusta las antiguas civilizaciones, Huánuco es una buena alternativa ya que evidencia la evolución cultural del hombre andino mediante sus escritos en la cueva de Lauricocha, edificaciones milenarias como la de Kotosh, ciudadelas prehispánicas como Tinyash, Huánuco Pampa y Tantamayo, las momias de Churubamba, restos antiguos y preincas de los Huanacos, Chupacos y Papahuasi.
La más conocida podría decirse que es Kotosh, donde se encuentra el templo de las Manos Cruzadas. Su antiguedad se estima en casi 4 mil años. Está ubicado a 10 minutos al oeste de Huánuco. Se sabe poco de las ceremonias que se realizaró en este templo, pero se puede deducir, por los restos encontrados al interior de los fogones, que en dichos actos se incineraron
vegetales en presencia de un reducido numero de personas, como parte de un ritual.
Largo pasaje en las ruinas de Kotosh, Huánuco. Foto: Marco Gamarra Galindo. Leer más