Visitamos Churubamba, un hermoso pueblo a treinta minutos de Huánuco. Su bella estampa de campiña, su pasado milenario, representado en las momias que el pueblo orgulloso muestra al mundo, además de su pintoresca plaza e iglesia, crean un ambiente acogedor, encantador e interesante para el visitante. Churubamba, ubicado en la carretera camino a Tingo María, se ha convertido en el nuevo point de Huánuco.
![](http://blog.pucp.edu.pe/blog/wp-content/uploads/sites/414/2011/01/100-0380.jpg)
En Churubamba se practican danzas ancestrales como “la Palla”. Foto: Marco Gamarra Galindo.
Hemos dejado atras el Centro de Huánuco y nos topamos con campos de color trigo. Una cadena de montañas contemplan, imponentes y silenciosas, nuestro recorrido. La ruta a Churubamba se vuelve cada vez más serpenteante, mientras más nos alejamos de Huánuco.
![](http://blog.pucp.edu.pe/blog/wp-content/uploads/sites/414/2011/01/100-0404.jpg)
Paisajes de Churubamba, Huánuco. Foto: Marco Gamarra Galindo.
Atras quedan los recuerdos previos; acuden nuevos, rodeados del verdor que alcanza la zona en su éxtasis máximo, cuando uno se acerca más a la selva interior del departamento. De pronto, un desvio nos anuncia que estamos entrando a Churubamba.
![](http://blog.pucp.edu.pe/blog/wp-content/uploads/sites/414/2011/01/100-0388.jpg)
Pintoresco sacerdote se anima a tocar guitarra en la iglesia de Churubamba. Foto: Marco Gamarra Galindo.
Tejados andinos, banderas patrias, rostros amigables, pintan las primeras calles de Churubamba. Frente a algunas casas hay 4×4 todo terreno estacionados. Las casas, humildes y preciosas, evidencian el caracter tradicional del distrito. El museo que abre sus puertas a los visitantes, a su turno, muestra lo histórico que este pueblo andino conserva. Las momias de Papahuasi, un interesante hallazgo de restos humanos, nos permiten conocer la presencia de nuestros antepasados en esta zona.
![](http://blog.pucp.edu.pe/blog/wp-content/uploads/sites/414/2011/01/100-0395.jpg)
Momias de Papahuasi, Churubamba. Una gran cantidad de ellas son de niños. Foto: Marco Gamarra Galindo. Leer más