Francisco, 10 años: Reflexiones ecuménicas e interreligiosas

7:00 p.m. | 8 mar 23 (CX/VTN).- Medios y organizaciones católicas ya anuncian el décimo aniversario de la elección de Francisco como pontífice. A pocos días del 13 de marzo, ya se difunden artículos y eventos. En esta primera publicación destacamos una edición del episcopado argentino con una recopilación de ensayos que revisan el pensamiento del Santo Padre y su gran aporte para el diálogo, la paz y la concordia. Junto con ello reproducimos un especial sobre los temas centrales para Francisco y la invitación a un evento virtual que reúne especialistas y líderes de la Iglesia para observar el camino y los desafíos de este pontificado.

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El diálogo ecuménico e interreligioso es crucial para construir juntos la paz, ha afirmado el papa Francisco en estos 10 años de Pontificado. Para la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), “este importante aniversario nos da una nueva oportunidad para meditar el magisterio de Francisco y sus gestos”, como escriben en la presentación del compendio de reflexiones ecuménicas e interreligiosas.

“Nos permite admirar cómo ha sido un puente permanente con las distintas confesiones religiosas”, añade la CEA refiriéndose al material disponible en este enlace. Resaltan que esta presentación “es una invitación a detenerse para reflexionar de la mano de estos hombres y mujeres en virtud del gran aporte sobre el pensamiento de Francisco para seguir trabajando juntos por una auténtica fraternidad entre todos los seres humanos”.

En diez artículos, las teólogas Lía Zervino, Emilce Cuda; el secretario de Cultura del Centro Islámico de la República Argentina Ricardo Elía; el presbítero evangélico Marcelo Figueroa; el pastor Christian Hooft; el Gran Rabino Isaac Sacca; el filósofo Santiago Kovadloff; el teólogo Pedro Torres y los obispos Eduardo García (Diócesis de San Justo) y Roberto Álvarez (auxiliar de la Diócesis de Comodoro-Rivadavia) comparten sus visiones personales que, según dice el Episcopado, honran el pensamiento del Santo Padre y su gran aporte para el diálogo, la paz y la concordia.

 

“Hacia una nueva conversión”

El texto de María Lía Zervino, presidenta de la Unión Mundial de Organizaciones Femeninas Católicas (la UMOFC) y miembro del Dicasterio de los Obispos, abre este libro. En su capítulo, Zervino agradece al Obispo de Roma “quien, siguiendo a sus antecesores, nos conduce a una profundización de la aplicación del Concilio Vaticano II”, y confiesa que solo cree poder mostrar algunas líneas de su pensamiento recordando gestos, palabras y hechos, desde el inicio de su pontificado y continuadas a lo largo de él. “Son ‘pinceladas’ -acota- en la obra maestra que está realizando el Espíritu Santo y que nos exhortan a una nueva conversión pastoral, personal y comunitaria”.

Zervino dice: “Esperamos, con la gracia del Espíritu Santo, realizar el sueño del Papa de una Iglesia a la escucha, una Iglesia pobre para los pobres, que no es otra que la Iglesia de la comunión, participación y misión”.

 

“Bendigo a Dios por regalarnos a Francisco”

La última contribución, de Monseñor Roberto Álvarez, está articulada por aquellos textos donde aparece Simón Pedro en el Evangelio según San Marcos. “Porque -afirma Álvarez- yo no he conocido al cardenal Bergoglio sino a Francisco, a Pedro”. Al final de su escrito, el Prelado agradece “este Papa que me hace ver al costado, que me invita a ponerme detrás; porque en los confines se puede ver la enorme multitud que lo acompaña: al hermano sol y la hermana luna, a la tierra, a los descartados, a aquellos que cargan una historia de fracasos y traiciones como María Magdalena y como Simón Pedro, como yo y como el mismo Francisco se encarga de decir sobre él mismo”.

Además, bendice “caminar hacia Galilea y no quedarme detenido”. “Bendigo sin generar pesos ni necesitar dejar construidas casas admirables y contundentes. Bendigo predicar volviendo a la Alegría de la Buena Noticia, al kerigma, a lo esencial sin menospreciar ninguna de las otras verdades aledañas”, subraya. “Bendigo a la Iglesia por ese 13 de marzo en donde nos confirió este obispo de Roma. Bendigo a Dios por regalarnos a Francisco, que me anuncia a Jesús, y me conduce a Galilea”, finaliza Álvarez.

LEER. Recopilación 10 años de Francisco: Diálogo interreligioso y ecumenismo (PDF completo)

Diez años de papado de Francisco a grandes rasgos

En prácticamente todos los temas de importancia moderna el papa Francisco ha tenido algo que decir durante sus diez años en el cargo. Sin embargo, de entre todos ellos, algunos destacan como prioridades más claras y globales para este pontífice y que, si se analizan a grandes rasgos, constituyen la columna vertebral de gran parte de su retórica y sus directrices a lo largo de la última década. He aquí un resumen de los que posiblemente sean los cinco temas principales del papado de Francisco:

 

Una Iglesia pobre para los pobres

A estas alturas, la historia del papa Francisco sobre cómo eligió su nombre pontificio es bien conocida. Estaba hablando con los periodistas pocos días después de su elección al papado el 13 de marzo de 2013, cuando dijo que fue su amigo, el fallecido cardenal brasileño Claudio Hummes, quien se lo inspiró. Según contó el Papa, una vez que quedó claro que había sido elegido, Hummes, que estaba sentado a su lado, le susurró: “no te olvides de los pobres”, inspirando al recién elegido pontífice a elegir el nombre de Francisco, en honor a San Francisco de Asís, apodado el “pobre de Asís”.

Desde su sencillo atuendo blanco hasta el humilde Fiat en el que se desplaza, desde su decisión de pagar su propia factura de hotel tras su elección hasta su elección de a quién lavar los pies cada Jueves Santo, dando prioridad a las mujeres, los inmigrantes, los discapacitados mentales y los presos, todo se ha basado en un espíritu de pobreza.

Como hombre que, mientras era arzobispo de Buenos Aires, tomaba regularmente el metro y caminaba por las calles de las villas miserias, ha priorizado sistemáticamente a los marginados, sobre todo a través de su defensa de los migrantes y refugiados, y en sus viajes al extranjero. Los que se percibe que ocupan el peldaño más bajo de la escalera, los que no pueden abogar por sí mismos, están y siempre han estado entre sus principales prioridades, y es probable que sigan estándolo en el futuro.

 

Clima y medio ambiente

Junto con el cuidado y la atención a los pobres y marginados, Francisco ha abogado por el medio ambiente, cuyo maltrato ha vinculado como un factor que contribuye a una serie de problemas, incluida la migración, abogando por los llamados “migrantes climáticos”, así como la pandemia del coronavirus. Esta ha sido una de las principales preocupaciones de Francisco desde el principio, sobre todo con la publicación de su eco-encíclica de 2015 Laudato Si, en la que el Papa condena enérgicamente el consumismo y lo que considera modelos de desarrollo irresponsables, y advierte de los peligros del cambio climático y el calentamiento global, llamando al mundo a la acción inmediata.

El Sínodo de los Obispos sobre la Amazonía de 2019 se centró en gran medida en cuestiones medioambientales y en la necesidad de proteger la biodiversidad de la selva amazónica y salvarla de la agricultura de tala y quema y de las técnicas mineras erosivas que invaden las tierras indígenas, obligando a muchos a huir de sus hogares a medida que las empresas se adentran aún más en la selva rica en minerales. También ha pedido constantemente que se ponga fin a la explotación del continente africano -más recientemente durante su visita a la República Democrática del Congo y Sudán del Sur- acusando a las industrias extractivas y a las poderosas corporaciones de “violar” la tierra sin remedio y de cosechar toda la riqueza para sí mismas, dejando a los ricos más ricos y a los pobres, más pobres.

 

Sinodalidad

Otro concepto clave durante los diez años de mandato del papa Francisco es el de “sinodalidad”, una palabra de moda en su papado que, aunque todavía difícil de definir para muchos, contiene su visión de la Iglesia global y se ha convertido en uno de los aspectos contemporáneos más destacados de este pontificado. El Papa siempre ha utilizado la palabra “sinodalidad” para expresar un cierto tipo de intercambio colegial y abierto en el que las decisiones se toman conjuntamente. Con el tiempo, la “sinodalidad” ha llegado a entenderse generalmente como un estilo de gestión colaborativo y consultivo en el que todos los miembros, clérigos y laicos, participan en la toma de decisiones sobre la vida y la misión de la Iglesia.

La palabra comenzó a ganar fuerza durante el Sínodo de los Obispos de 2018 del Papa sobre los jóvenes y ha crecido en prominencia hasta tal punto que es el principal tema de reflexión para un proceso de consulta de 4 años y múltiples etapas en la iglesia mundial que se desarrolla como parte del Sínodo de los Obispos sobre la Sinodalidad. Caracterizado por diferentes etapas que comienzan con consultas locales, diocesanas, con laicos en las parroquias, y pasan a una etapa continental en la que los resúmenes de esas consultas se discuten a un nivel más amplio, el proceso se inició en 2021 y culminará con dos reuniones de obispos en Roma, una en octubre de este año, y la siguiente, la reunión final, prevista para octubre de 2024.

El principal objetivo declarado del Sínodo sobre la Sinodalidad ha sido hacer de la Iglesia un lugar más abierto, acogedor e inclusivo, donde todos tengan voz y donde nadie se sienta excluido, y donde las decisiones no se tomen por decreto desde arriba, sino en consulta con el pueblo. En efecto, la sinodalidad engloba varias de las principales prioridades del Papa, desde la erradicación del clericalismo hasta el empoderamiento de los laicos y los jóvenes, y la garantía de que las mujeres tengan un papel más importante en la Iglesia, especialmente cuando se trata de liderazgo y toma de decisiones.

 

Economía

Un estribillo claro y constante a lo largo de los diez años de Francisco como líder de la Iglesia ha sido su crítica abierta al capitalismo de libre mercado, y su defensa de un sistema global más justo que se centre menos en el beneficio y más en una distribución equitativa de los recursos al servicio del bien común, y que beneficie a los pobres. Francisco cree que muchas de las reformas sociales que reclama empiezan en el plano económico, y ha pedido grandes cambios en el sistema global en casi todos los discursos y documentos importantes a lo largo de este papado, desde la exhortación a modelos de desarrollo más sostenibles en Laudato Si, hasta sus llamamientos a una economía renovada basada en la integración y la dignidad humana al recibir el prestigioso Premio Carlomagno en 2016.

Su encíclica de 2020, Fratelli Tutti, sobre la fraternidad social, sigue en gran medida el mismo tono, con largas críticas al populismo, el liberalismo y el capitalismo de libre mercado, y un ávido apoyo a los esfuerzos y políticas multilaterales que dan prioridad a los más vulnerables, incluidos los migrantes y los refugiados. El papa Francisco también ha tratado de reclutar a los jóvenes para la causa a través de su evento “Economía de Francisco”, celebrado en Asís el año pasado, que atrajo a jóvenes economistas y agentes de cambio de todo el mundo para debatir la transición a una economía más pacífica y equitativa que dé prioridad a los pobres y al medio ambiente.

 

Conversión pastoral

Quizá el tema más importante de los diez años de pontificado de Francisco es su impulso a la conversión pastoral. Desde sus largos discursos anuales a la Curia Romana, a los principales documentos papales, y a las audiencias y discursos con el público en general, ha llamado constantemente a los creyentes a la conversión personal, y ha instado a la Iglesia y a sus pastores a hacer lo mismo. Desde el inicio de su pontificado, el Papa ha impulsado esta conversión criticando a la Iglesia por permanecer “encerrada” en sí misma y expresando su deseo de “una Iglesia que salga” y esté en contacto con la gente y sus necesidades, en lugar de obsesionarse con triviales debates internos.

Toda su estrategia pastoral ha estado encaminada a ayudar a la Iglesia a convertirse en el “hospital de campaña para los enfermos” por el que tan a menudo aboga, en lugar de un club exclusivo para élites percibidas que siguen todas las reglas y abrazan todos los dogmas. Ha instado constantemente a la Iglesia a ser más misericordiosa y a dedicar menos tiempo a los debates teológicos y más a atender a los heridos y a los que sufren.

Este fue el resultado de su Jubileo de la Misericordia, durante el cual permitió a todos los sacerdotes absolver el pecado del aborto y amplió el acceso a las indulgencias, y fue el factor motivador de su decisión en la nota 351 a pie de página de su documento Amoris Laetitia de 2016, publicado tras el Sínodo de los Obispos de 2014 y 2015 sobre la familia, en el que autorizó una cautelosa apertura para que los católicos divorciados y vueltos a casar recibieran la comunión.

En última instancia, el papa Francisco considera que su tarea es reformar la Iglesia, abriéndola aún más al mundo y haciendo de la misericordia y la evangelización la fuerza motriz de todas sus acciones, aplicando esencialmente la visión del Concilio Vaticano II y erradicando todo lo que cree que se interpone en su camino. La conversión pastoral es la clave de todo ello, es esencial para poner en práctica su visión, y probablemente seguirá siendo una de sus principales prioridades durante el resto de su pontificado.

Seminario internacional “10 años del papa Francisco”

El legado teológico-pastoral y el legado social del papa Francisco son los temas centrales del seminario internacional organizado en conmemoración del décimo aniversario del Pontificado de Bergoglio. Se llevará a cabo el sábado 11 de marzo en los siguientes horarios: 9:00 a 13:00 (México, Costa Rica); 10:00 a 14:00 (Nueva York, Colombia, Perú); 11:00 a 15:00 (Venezuela); 12:00 a 16:00 (Argentina, Brasil, Chile); 16:00 a 20:00 (Europa y Guinea Ecuatorial).

Este evento, promovido por la Academia de Líderes Católicos Latinoamérica, contará con la participación de expertos y líderes de la Iglesia Católica de todo el mundo, quienes discutirán el impacto del papa Francisco en la Iglesia y en la sociedad, y su visión para el futuro. Entre los exponentes, se encuentran Andrea Tornielli, Director Editorial del Dicasterio para la Comunicación; el Cardenal Felipe Arizmendi, obispo emérito de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas (México); Cristóbal Fones SJ; Rafael Luciani, doctor en Teología por la Pontificia Universidad Gregoriana.

ENLACE. Inscripción gratuita al seminario virtual

Información adicional
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Fuentes

Crux Now / Vatican News / Revista Vida Nueva / Videos: Cadena 3 Argentina – Rome Reports / Foto: WCCM

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