La medicina es uno de los campos más beneficiados con los desarrollos tecnológicos y, precisamente por esto, la salud de las personas se ha visto y se verá en el futuro llegar a niveles siempre superiores.
Uno de los grupos de pacientes a los que han llegado más avances tecnológicos son las personas en condición de discapacidad, sobre quienes, precisamente por sus características complejas, ha recaído un especial interés de los desarrolladores de tecnología aplicada a la salud.
Robots sensibles
Grandes avances se han visto en estos campos, en los que se ha llegado hasta muy profundos niveles de análisis genéticos, por ejemplo, hasta investigaciones en el espacio de opciones para el diagnóstico o tratamiento de enfermedades.
Pero, entre tantas necesidades que desde el punto de vista de la salud plantea el ser humano, el de algunas discapacidades como parálisis totales, hasta hace pocos años era muy poco lo que la tecnología podía ofrecer.
Hoy es posible, como lo describe la agencia Efe, controlar robots con la mirada gracias a una nueva tecnología desarrollada por la multinacional suiza ABB y la compañía española Irisbond, que abre un abanico ilimitado de posibilidades para todo tipo de aplicaciones industriales y sociales, en el ámbito de la discapacidad.
Una partida especial
La presentación de este novedosa tecnología, desarrollada bajo el paraguas del programa Bind 4.0 del Gobierno vasco (norte de España) para fomentar la colaboración entre empresas ya asentadas y emergente, se desarrolló a través de la disputa de una partida de ajedrez entre dos mujeres.
Una de ellas, en silla de ruedas debido a una grave discapacidad de movimientos, estuvo asistida por un robot al que ordenaba realizar distintos movimientos de piezas con la mirada.
Algo posible mediante un ordenador en cuya pantalla aparecía un tablero de ajedrez sobre el que la mujer posaba la mirada para indicar la pieza que deseaba mover y en qué escaque depositarla.
El robot, situado en medio de la mesa y dotado de dos brazos articulados similares visualmente a los de las máquinas quirúrgicas de precisión, movió así varias piezas e incluso se comió la reina de su oponente.
Usos múltiples
La máquina, que tiene en su memoria las reglas de ajedrez y que no permite realizar movimientos prohibidos en el juego, controla también las acciones de la persona que no sufre discapacidad, quien le ha indicado mediante un ratón los desplazamientos de sus fichas.
Una vez concluida la partida, el robot se ha encargado de recoger las piezas y posicionarlas nuevamente en su correspondiente casilla inicial.
Una tecnología denominada “eye-tracking” que podría permitir a un cirujano consultar con la mirada el historial de un paciente mientras le está operando, o a un conductor descolgar el teléfono de su coche al recibir una llamada con solo un movimiento de sus ojos.
La solución desarrollada ahora está basada en un software denominado “web-tracker” que permite el control de ordenadores con el movimiento de los ojos, monitorizados a través de una webcam, y que utiliza sofisticados algoritmos basados en el posicionamiento de la cara y de la visión para permitir a los usuarios interactuar con el robot y controlarlo de una forma natural.
Grandes posibilidades
Esta investigación abre un amplio campo de posibilidades para nuevas aplicaciones de robótica industrial, especialmente en la “robótica colaborativa”, incluyendo nuevas opciones de integración laboral para personas con discapacidad.
Ofrecer a las personas con ciertas limitaciones, la posibilidad de actuar sobre las cosas en forma eficiente es un objetivo que hoy está alcanzado, lo que resta es avanzar sobre estos desarrollos para que el desempeño de estas personas sea cada día mejor.