INCREMENTO DEL PRECIO DE LOS ALIMENTOS

El drástico incremento de los precios de los alimentos en los últimos meses ha tenido como causas: la subida del precio del petróleo, el subsidio a los biocombustibles en EEUU., el incremento en la demanda por alimentos en países con altas tasas de crecimiento tales como China e India, sequías en Australia, así como a factores especulativos de la crisis financiera de EEUU. Con respecto a este último punto Zegarra[1] señala que “esta última escalada de precios está ligada a factores especulativos por la crisis financiera estadounidense, con inversionistas temerosos migrando hacia los commodities alimentarios”. Debido a que varios de estos factores mantendrán vigencia en el mediano plazo, se requiere impulsar el crecimiento de la oferta mundial de alimentos a través del cambio tecnológico. El cambio tecnológico tiene la ventaja de beneficiar a productores agrícolas y consumidores simultáneamente.

Uno de los elementos que componen este cambio tecnológico es la utilización de semillas mejoradas. Según los datos del World Development Report de 2008, que se muestran a continuación, tanto en Africa como en Latinoamérica existe un grupo importante de productores que no utiliza variedades mejoradas. Consecuentemente, ambas regiones presentan un potencial importante en cuanto el crecimiento de la producción de alimentos. Es importante resaltar que existe bastante heterogeneidad dentro de estas regiones. Por ejemplo, en Perú, tan sólo un 20% de los productores utilizaba semilla mejorada el año 2000[2].

A diferencia de los países desarrollados, los países en desarrollo requieren de la intervención del gobierno para promover el cambio tecnológico en la agricultura. La capacidad de los gobiernos en la promoción del cambio tecnológico podría mejorar si es que se llegará a contar con el apoyo financiero de la comunidad internacional. Este apoyo ha disminuido considerablemente en los últimos quince años. Dada la actual coyuntura, es probable que esta situación se revierta.

Se espera entonces, una mayor atención al impacto que podría tener implementar, de manera sostenida, políticas que promuevan el cambio tecnológico en nuestra agricultura, por ser éste uno de los elementos fundamentales en la mejora de la eficiencia económica de la actividad agraria.

[1] Eduardo Zegarra, Investigador Principal del Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE). El Comercio, 06 de mayo de 2008.
[2] ENNIV: Encuesta Nacional de Hogares sobre Medición de Niveles de Vida, 2000 INEI.

Puntuación: 5.00 / Votos: 1

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *