El Ministerio de Economía y Finanzas ha abierto el diálogo con los distintos gremios sobre el sistema tributario vigente, el cual, gira en torno a 6 impuestos: IGV, impuesto a la renta, ISC, aranceles, ITAN e ITF. El tema más espinoso es el de las exoneraciones tributarias.
Los beneficiarios de las exoneraciones en los servicios crediticios son el consumidor final y las empresas que no realizan operaciones gravadas, ya que en estos casos el IGV de los créditos no se podría utilizar como crédito fiscal. El gravar los créditos con IGV se reflejaría en un aumento de los intereses en 19% perjudicando a los consumidores que toman créditos Mivivienda, hipotecarios, de consumo, microempresas, entre otros. La eliminación de la exoneración podría impulsar el crédito informal y por ende tener un impacto negativo en el nivel de bancarización de la economía. La banca peruana también perdería competitividad frente a la de otros países ya que los clientes podrían financiarse de países vecinos como Chile y Ecuador, donde no existe tal impuesto.Del mismo modo, la eliminación de la exoneración de impuesto a la renta en los depósitos del sistema financiero también impactaría negativamente los niveles de bancarización y promovería una fuga de ahorristas del sistema financiero.
La eliminación de la exoneración del pago del impuesto a la renta sobre las ganancias de capital y sobre los intereses a los bonos que vence a fines del 2006 también está siendo debatida. Los montos negociados podrían ser afectados al buscar los capitales no gravados. Actualmente el monto negociado diario en la BVL representa aproximadamente el 40% del de 1997. Se debe considerar también el potencial impacto negativo sobre los precios de las acciones y bonos lo que repercutiría sobre los aportantes de las AFP cuyo parte de patrimonio está invertido en títulos valores negociados en la BVL.