La tecnología ayuda a muchas empresas de construcción a mejorar su nivel de productividad y para reducir costos, dada la magnitud de los proyectos de inversión en el que constantemente toman decisiones. En esa dinámica, como resultado de lo que se viene haciendo en otras experiencias internacionales, las constructoras internacionales del benchmark han implementado mecanismos para controlar con mayor detalle la calidad y los trabajos reiterativos.

“El mundo vive una cuarta revolución industrial, de la mano de la digitalización, algoritmos de inteligencia artificial, y una creciente robotización, que ya genera disrupciones en industrias más tradicionales y cambios en sus modelos de negocios. La construcción no está ajena a esto. Expertos, ejecutivos y líderes de la industria en países referentes, señalan a la tecnología dentro de las dos prioridades para aumentar la productividad”. En esa línea, “Por lo tanto, la industria debe prepararse para innovar con mirada a largo plazo, pero en el corto plazo el foco debiera ser adoptar tecnología existente”[1].

Si este debate sí se da en el sector privado, la pregunta ahora que cabe hacerse es qué puede innovar el sector público para generar valor, de tal forma que los procesos de mejora en temas tecnológicos se trasladen a la ciudadanía a fin de que pueda mejorar el nivel de vigilancia y control social sobre las inversiones públicas.

Experiencia Mexicana[2]

Garantizan transparencia en obras públicas con plataforma de fiscalización

A partir del 19 de febrero el Gobierno de la Ciudad de México puso en marcha la Plataforma de Recopilación y Administración de Información para Labores de Control y Fiscalización de Obra Pública, en la cual, la población podía escanear el código QR colocado en las obras públicas y que, de esta manera, conozca el porcentaje de avance del proceso de contratación, número de contrato, contratista adjudicado, monto estimado de la inversión, responsable de la obra y la fecha estimada de inicio y fin de la obra.,  información que debía integrarse en tiempo real a la plataforma y el código QR se colocaba en un lugar visible de la obra hasta su conclusión.

El contralor General de la CDMX, durante el anuncio, señaló que la metrópoli había sido pionera en la utilización de plataformas tecnológicas y la presentada muestra la relevancia que el gobierno local había dado a la transparencia y rendición de cuentas, con la finalidad de garantizar la rendición de cuentas y presentar a la población qué se adquirió, quién compró, cuánto costó, para qué se compró y todo lo relacionado.

Experiencia argentina[3]

Toda obra en construcción en la Ciudad tienen que su cartel de obra.

Se incorporaron letreros de un tamaño (formato unificado: deben realizarse en un tamaño A1 (84,1 x 59,4 cm) y ser colocados a 1.80 metro del nivel de la vereda para que puedan ser leídos claramente en todo momento), pero más accesibles, incorporan, además la tecnología QR que le permite a cualquier persona obtener a través del teléfono celular información sobre la obra, el propietario, los profesionales intervinientes y la etapa en que se encuentra la construcción.

Esta nueva modalidad facilita tanto el control y fiscalización, como el acceso a la información pública por parte de los vecinos, evitando potenciales conflictos. La información es actualizada online ante cualquier modificación en las características de la obra o en sus controles.

El letrero deberá permanecer visible durante la duración completa de la obra, es decir, desde el inicio de las tareas de demolición, si las hubiera, hasta el momento de la finalización de la obra, momento en el que se realiza la declaratoria de fábrica y recepción de obra.

La lectura del código QR brinda los nombres de los profesionales, empresas y representantes técnicos, los títulos de los profesionales y representantes técnicos, la matrícula de los mismos, el nombre del propietario, la fecha de concesión del permiso, la superficie a construir, el distrito de zonificación, la etapa de ejecución de la obra (si está en fase de demolición, de excavación, de estructura, etc.) y, sobre todo, el estado de la misma, es decir si se encuentra en ejecución, clausurada o paralizada, datos de mucha utilidad para los vecinos que pueden acceder directamente a una información actualizada de manera inmediata y sin intermediarios.

En lo que va de 2019 la Agencia Gubernamental de Control recibió más de 1.500 denuncias de vecinos a obras registradas y muchas de ellas se deben al desconocimiento que genera el estado de las mismas. Al respecto, Director Ejecutivo de la AGC, ente encargado de los controles sobre las obras civiles de construcción de la Ciudad y el organismo que llevó adelante esta innovación, afirmo que el cambio “es un paso más en la búsqueda de transparencia, desarrollo tecnológico y asistencia a los ciudadanos para acceder de manera inmediata y cómoda a información de su interés”.

[1] Estudio de productividad: Impulsar la productividad de la industria de la Construcción en Chile a estándares mundiales. Ver: https://cchc.cl/assets/landings/2020/informe-productividad/pdf/ResumenEjecutivo_Estudio_de_Productividad_Construcci%C3%B3n2020.pdf. Página 21.

[2] Garantizan transparencia en obras públicas con plataforma de fiscalización: https://www.realestatemarket.com.mx/noticias/infraestructura-y-construccion/22519-garantizan-transparencia-en-obras-publicas-con-plataforma-de-fiscalizacion

[3] Cambios en la Ciudad Achican los carteles de las obras en construcción y tendrán que tener código QR: https://www.clarin.com/especiales/achican-carteles-obras-construccion-tener-codigo-qr_0_CiW5RjsHR.html

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