¿Qué está pasando con el Camino Sinodal alemán?

11:00 a.m. | 2 mar 24 (TT/RVN).- Las medidas trazadas por el Camino Sinodal, iniciativa conjunta de laicos y obispos para reformar la Iglesia alemana, han quedado en pausa. El episcopado decidió postergar la aprobación del “comité sinodal”, órgano establecido para dar continuidad a las reformas aprobadas. Esto se dio por pedido explícito de la Santa Sede. El “comité sinodal”, figura de transición hacia un consejo permanente de laicos y obispos en el 2026, fue observado por tener la capacidad de decidir para toda la Iglesia local con mayoría simple, en un escenario en que los obispos son apenas un tercio. Los laicos han manifestado su descontento.

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Los obispos alemanes decidieron, en su última asamblea plenaria, no someter a votación los estatutos para el comité sinodal -organismo establecido por el Camino Sinodal alemán para encaminar sus reformas- tras recibir una carta del Vaticano en la que se les instaba a no proseguir el debate. Los obispos habían previsto estudiar la propuesta en la asamblea en Augsburgo del 19 al 21 de febrero, con la esperanza de que el comité, una vez constituido y funcional, preparara la creación de un consejo sinodal permanente hacia el 2026.

La carta fue dirigida al obispo de Limburgo y presidente del episcopado alemán Georg Bätzing y llegó a sus manos el 16 de febrero. Entre los firmantes están el secretario de Estado vaticano, cardenal Pietro Parolin, el prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe (DDF), cardenal Víctor Fernández, y el prefecto del Dicasterio para los Obispos, cardenal Robert Prevost. El mismo papa Francisco dio la autorización.

“Puedo confirmar que ha llegado una carta del Vaticano”, declaró el portavoz de la Conferencia Episcopal, Matthias Kopp, a la agencia de noticias de la Iglesia alemana el sábado en la noche. Por ello, Georg Bätzing había pedido a sus colegas obispos que anularan del orden del día de la sesión plenaria el debate sobre el comité sinodal. La carta decía que un “órgano consultivo y decisorio” como el propuesto “comité sinodal” no era admisible en derecho canónico, por lo que cualquier decisión de establecer tal órgano sería inválida.

También se recordaba a los obispos alemanes la carta del 16 de enero del 2023, “escrita por orden especial del papa Francisco”, en la que se pedía a los obispos alemanes que “no siguieran adelante con los planes de crear dicho órgano”, y más bien esperen las conversaciones previstas entre representantes de la Curia Romana y representantes de la Conferencia Episcopal Alemana. El cardenal Christoph Schönborn, de Viena, también advirtió a los obispos alemanes que no tomaran decisiones que pudieran conducir a un cisma. “Los obispos alemanes deben preguntarse seriamente si realmente quieren romper la unidad con Roma bajo el Papa”, dijo a Communio.

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Reacciones: “En ningún caso se quiere limitar la autoridad episcopal”

Según Bätzing, hay opiniones divergentes sobre las responsabilidades concretas del comité sinodal. En su opinión, una de ellas era preparar un consejo sinodal que cumpliera el derecho canónico, lo que significaba que era necesario apaciguar al Vaticano. “Me gustaría hacer todo lo que esté en mi poder para resolver las preocupaciones de Roma, que aparecen claramente en la carta”, dijo Bätzing, especificando el episcopado como la cuestión central. Según Bätzing, la idea de Roma sobre la sinodalidad es reforzar el episcopado, que es compatible con las aspiraciones alemanas. “Estamos convencidos de que eso es lo que nosotros también queremos con el Camino Sinodal. En ningún caso queremos limitar la autoridad episcopal. Los obispos [alemanes] estamos convencidos de que lo que se necesita son conversaciones buenas y fructíferas con las autoridades romanas”.

Mientras tanto, el Comité Central de los Católicos Alemanes (ZdK -Zentralkomitee der deutschen Katholiken), que cuenta con varios millones de miembros, declaró que no renunciará a la participación de los laicos en la toma de decisiones episcopales. “La presidencia de la ZdK tiene la intención de mantener su objetivo de garantizar la participación de los laicos en la toma de decisiones episcopales. La posibilidad de asesorar al obispo, es decir, la mera simulación de la sinodalidad, no es suficiente”, declaró su presidenta, Irme Stetter-Carp, poco antes del final de la sesión plenaria.

Acusó a los cardenales firmantes de la carta del 16 de febrero de crear “imágenes distorsionadas” de la situación alemana y de tratar a los obispos alemanes como si fueran unos escolares. Fue “absolutamente engañoso” acusar a los católicos alemanes de proceder a reformas sin consultar a Roma, dijo, añadiendo que era vergonzoso y lamentable que los cardenales no hubieran mencionado que fue el escándalo de abusos sexuales clericales lo que ha motivado los esfuerzos alemanes por la reforma de la Iglesia. “Junto con los obispos alemanes, llevamos años intentando entablar amplias conversaciones con Roma, pero hasta hoy ningún representante de ZdK ha sido recibido en el Vaticano”, afirmó.

En esta misma línea, la vicepresidenta de la Comunidad de Mujeres Católicas de Alemania, Agnes Wuckelt, también se manifestó ayer para cuestionar al Vaticano, al considerar que intervenir el comité sinodal, deja al descubierto que “no existe un interés real por una Iglesia sinodal donde todos los bautizados y confirmados son iguales, todos tienen los mismos derechos”.

La contrarréplica ha llegado de boca del nuncio en Alemania, Nikola Eterovic, que, como es habitual, ha intervenido al inicio de la Plenaria de los obispos. Sin aterrizar de forma explícita en la polémica de los estatutos del comité sinodal, el embajador vaticano, ha explicado que “una Iglesia que se preocupa principalmente por sí misma sufre de egocentrismo”.

El lunes, el cardenal Víctor Manuel Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe y firmante de la carta a los obispos alemanes, declaró que miembros de la Curia se reunirán con representantes de la Conferencia Episcopal alemana el 22 de marzo, en el primero de una serie de encuentros sobre los temas acordados “en la muy cordial reunión que mantuvimos el pasado mes de octubre”. Bätzing había confirmado el 22 de febrero que estaban previstas conversaciones, pero no dio detalles. Dijo que no deseaba mencionar fechas “ya que hasta ahora hemos sido muy discretos sobre las conversaciones y no hemos hablado de ellas públicamente; eso forma parte de nuestra relación de confianza y pedimos comprensión”.

Información adicional

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• La Santa Sede sobre el Camino sinodal alemán: Fusionarse con el de la Iglesia universal, sin decisiones (07-2022)
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Fuentes

The Tablet (2) / Revista Vida Nueva (2) / Videos: Rome Reports / Foto: Christian Toussaint (Neues Ruhrwort)