La hermandad entre Perú y Chile es sólida apesar de los conflictos que se han tenido a lo largo de la historia. En marzo de 2008, nuestro país demandó a Chile por límites marítimos ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para que esta institución resuelva definitivamente el diferendo sobre la frontera marítima, pero esto no fue un óbice para continuar con las relaciones bilaterales entre ambos países. El presidente Alan García, por ejemplo, acudió a Chile para llevar 30 toneladas de ayuda humanitaria y poner a disposición 21 médicos peruanos tras el terremoto del 27 de febrero de 2010 que sacudió las ciudades de Santiago de Chile, Maule, Araucanía y Bío Bío. El 25 de noviembre de 2010 el presidente Sebastián Piñera visitó Perú, como nuevo mandatario tras la salida de la expresidenta Michelle Bachelet, para entablar relaciones estatales sobre comercio, economía, cultura y migración. Y ahora el Presidente Alan García se encuentra en el país suroeste de Sudamérica donde acaba de recibir la Medalla de Oro del Senado chileno, la más alta distinción otorgada por el Poder Legislativo de ese país, por impulsar las relaciones de amistad entre Perú y Chile; y al ser declarado huésped ilustre de la Municipalidad de Santiago recibirá las llaves de la ciudad de las de manos del alcalde Pablo Zalaquett. Como bien señala el presidente Sebastián Piñera, Perú y Chile son países maduros. Y agrega que “todas las diferencias del pasado es mejor dejarlas atrás y concentrarnos en lo que nos une, concentrarnos en las oportunidades que juntos vamos a aprovechar mejor en beneficio de nuestros pueblos”.
Para el mandatario peruano, la alianza entre Perú y Chile debe hacer germinar las capacidades de crecimiento económico a través de la libre circulación de las personas, de los bienes, servicios y capitales. Esta unión entre ambos países promueve la mejora sustantiva del crecimiento del Producto Bruto Interno y la generación de empleo al interior de cada país. En estos últimos años, Perú y Chile han comprendido que su avance internacional depende mucho del crecimiento económico, el empleo y calidad de vida de sus ciudadanos y sus vecinos. Sin reunirse, el avance de cada pueblo sería autárquico. Somos países complementarios, señala nuestro Presidente; y, en este sentido, debemos encauzar el progreso y bienestar de ambos pueblos.
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¿Cómo citar esta fuente?
LOVÓN CUEVA, Marco (2011). “Somos países complementarios”. Blog de Marco Antonio LOVÓN CUEVA. Lima: PUCP, 20 enero. http://bit.ly/dESefT
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