Premio Zayed 2022: impulso a la fraternidad

10:00 p.m. | 22 mar 22 (VTN/AO).- La fundación Fokal de Haití, con más de 25 años dedicados a la promoción de los derechos humanos y a la formación de jóvenes, y la pareja real de Jordania recibieron el galardón que reconoce sus esfuerzos y compromiso por promover un mundo más pacífico, armonioso y compasivo. El Premio Zayed se inspira en los valores plasmados en el Documento de la Fraternidad Humana por la paz mundial y la convivencia común (2019) firmado por el Papa y el Gran Imán Ahmed Al-Tayeb, líder del islam sunita. El jurado, que cuenta con expertos en diálogo intercultural e interreligioso, evaluó más de 200 postulaciones. La fundación caribeña ya es un referente internacional en el trabajo con comunidades locales y la sociedad civil.

——————————————————————————————–

Más de diez mil kilómetros separan Jordania de Haití, pero esos dos países hoy están profundamente unidos por el Premio Zayed que ha recaído en representantes de dichas naciones. Este galardón reconoce las contribuciones a la promoción de un mundo más pacífico, armonioso y compasivo. Fue instituido como uno de los primeros frutos de la firma del Documento de la Fraternidad Humana por la paz mundial y la convivencia común, el 4 de febrero de 2019 por el papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmed Al-Tayeb, egipcio y una de las máximas autoridades del islam sunita. Ambos líderes religiosos asistieron telemáticamente a la entrega de los galardones.

Tras recibir y evaluar más de 200 postulaciones, un jurado independiente, integrado por ex jefes de Estado, un ganador del Nobel de la Paz y expertos en diálogo intercultural e interreligioso, concedió el premio a la organización humanitaria haitiana Fokal, y al Rey Abdullah II ibn Al Hussein y la Reina Rania Al Abdullah de Jordania. El año pasado lo ganaron la activista franco-marroquí Latifa ibn Ziaten, que tras el asesinato de su hijo trabaja para prevenir la radicalización de los jóvenes musulmanes en Francia; y el secretario general de la ONU, António Guterres, que lo donó a ACNUR. En ocasiones posteriores, ambos han comunicado cuánto ha contribuido este premio a promover su trabajo.

Apenas conocidos los nombres de los vencedores de este año, el Presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso de la Santa Sede, cardenal Miguel Ángel Ayuso-Guixot, explicó que “el significado principal del premio es un modo para recordar la importancia de la responsabilidad común y personal, comunitaria e individual, que tenemos para promover el valor de la fraternidad humana”. Lo dice con especial fuerza precisamente en el momento en que el mundo es testigo de un conflicto armado entre Ucrania y Rusia.

Formando la juventud haitiana

La Fundación Fokal para el Conocimiento y la Libertad nació en Haití en 1995 y actualmente despliega un amplio trabajo con comunidades locales y organizaciones de la sociedad civil del país caribeño, sosteniendo y promoviendo una gran variedad de proyectos en áreas como las artes, la cultura, el desarrollo y la educación. Sus programas focalizados en la formación de miles de jóvenes, sus iniciativas de servicio al bien común, así como su permanente espíritu por construir una sociedad más próspera y armoniosa en medio de uno de los países más pobres del mundo, impactaron al jurado que decidió concederles el reconocimiento.

Respecto de la organización humanitaria Fokal, el Santo Padre recordó cuán cerca Haití está de su corazón y de sus oraciones. Por eso, se alegró particularmente por el hecho de que se les haya concedido este premio que, además del honor, les otorga un fondo de medio millón de dólares para sostener sus actividades orientadas a la promoción de los derechos humanos en el país caribeño, en especial por medio de la formación de los jóvenes. “Gracias por su dedicación a la promoción de una sociedad más humana, basada en el valor de la fraternidad. Gracias por su atención a las nuevas generaciones y a su educación, porque a través de ellas puede producirse un verdadero cambio en la sociedad”, sostuvo Francisco en su intervención desde el Vaticano.

Estas palabras del Papa fueron refrendadas por las del Gran Imán, quien hablándole a la presidenta de Fokal, Michèle Pierre-Louis, le manifestó su admiración y gratitud “por sus sinceros esfuerzos por servir al heroico pueblo haitiano que ha sufrido tanto y continúa sufriendo las tragedias de la pobreza y de los desastres naturales. Ustedes son verdaderamente un ideal y un modelo para tantas personas”, expresó por medio de su mensaje desde Egipto.

Para Michèle Pierre-Louis, presidenta de Fokal, el Premio Zayed llegó como una gran sorpresa que la emocionó hasta las lágrimas. Habían postulado como asociación, pero jamás pensaron que les otorgarían este galardón que en su primera versión recibieron el mismo Papa y el Gran Imán de Al-Azhar. “Es un honor considerable y un gran refuerzo de ánimo”, confidenció esta mujer que entre 2008 y 2009 fue la Primera Ministra de Haití. El juez Mohamed Abdelsalam, Secretario General del Comité Superior para la Fraternidad Humana, manifestó que “al conceder el Premio Zayed a la Fraternidad Humana a Fokal, pretendemos dar a conocer los esfuerzos de las instituciones y organizaciones humanitarias para ofrecer modelos inspiradores a personas e instituciones de todo el mundo para que hagan todo lo posible por promover los valores de la fraternidad, la tolerancia y la convivencia”.

Reyes de la fraternidad

Al igual que las dos versiones anteriores, el Premio Zayed 2022 tiene más de un ganador. Esta vez será compartido con los reyes Abdullah II y Rania de Jordania, cada uno con méritos propios, según los miembros del jurado, por ser una fuente de inspiración y un verdadero epítome de la fraternidad humana. Del líder del Reino Hachemita se ha valorado su rol crucial en el diálogo interreligioso en toda la región de Oriente Medio, su trabajo por superar las divisiones entre los musulmanes y su compromiso por fortalecer las relaciones entre Occidente y Oriente. A la reina se le reconoce su férrea defensa de los derechos de los refugiados en todo el mundo y su compromiso en la promoción de la tolerancia y la inclusión a través de los diversos proyectos que lidera.

“Para todos es conocido el compromiso de Sus Altezas Reales en la acogida de un gran número de refugiados, en la promoción de los valores de convivencia y diálogo entre las diferentes tradiciones religiosas, en la lucha contra la discriminación y por la emancipación de los jóvenes y las mujeres. Al defender los valores de la fraternidad humana, han contribuido a hacer del Reino de Jordania un modelo de tolerancia y convivencia”, aseveró Francisco al felicitar a los monarcas del Reino Hachemita. Mohamed Abdelsalam explicó que el rey Abdullah II “ha presentado un modelo de tolerancia en la región, y apoya el diálogo entre religiones y culturas”, mientras que la reina Rania “es un modelo pionero para las mujeres árabes y ha contribuido en gran medida a empoderar a las niñas jordanas y a garantizar sus plenos derechos”.

El discernimiento del jurado

Leah Pisar, activista antiextremismo y miembro del jurado, explicó que lo que primó al momento de otorgar el galardón al Rey Abdullah II y a la Reina Rania fue la potencia del ejemplo que ellos ofrecen al mundo. “Ellos podrían relajarse y no ser valientes, pero eligieron ser valientes y defender algo”, comentó. Respecto de Fokal, Pisar aseguró que dicha fundación revela “una bella historia de resiliencia y determinación de cara a la adversidad. Haití es un lugar duro, golpeado por la naturaleza, por problemas políticos y por la violencia. Y aquí hay personas que decidieron que eso no los limitaría y que ayudarían a sus hermanos y hermanas”.

Este galardón se concede en memoria del padre fundador de los Emiratos Árabes Unidos, el Jeque Zayed bin Sultan Al Nahyan, y distribuye un millón de dólares para que los ganadores sigan perseverando en su contribución a la fraternidad humana. Este valor, permanentemente promovido por el papa Francisco, arranca del “hecho que somos todos hijos e hijas del Padre Creador. Eso es lo que somos, pero eso no es solo un hecho, es también una vocación, y la vocación es precisamente de tratarnos como hermano y hermana. De pasar de la esencia a los actos, a los gestos de misericordia, de justicia o, con las palabras del Sínodo, de caminar juntos”, detalla el cardenal Michael Czerny, Prefecto ad interim del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, quien este año integró el jurado que deliberó acerca del reconocimiento.

Y es ese el objetivo del Premio Zayed, que la fraternidad humana no sea solo un concepto, sino que se realice en acciones concretas que colaboren a la promoción de los pueblos, de tal modo que todos puedan gozar de una convivencia común donde la justicia engendre la paz.

Información relacionada
Antecedentes en Buena Voz Noticias
Fuentes

Vatican News (2) / Revista Alfa y Omega / Foto: Vatican Media

Puntuación: 0 / Votos: 0

Buena Voz

Buena Voz es un Servicio de Información y Documentación religiosa y de la Iglesia que llega a personas interesadas de nuestra comunidad universitaria. Este servicio ayuda a afianzar nuestra identidad como católicos, y es un punto de partida para conversar sobre los temas tratados en las informaciones o documentos enviados. No se trata de un vocero oficial, ni un organismo formal, sino la iniciativa libre y espontánea de un grupo de interesados.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *