Grecia presenta nuevas reformas “in extremis”
El Gobierno de Alexis Tsipras estaría dispuesto a abolir las jubilaciones anticipadas a partir del próximo año, a reducir las pensiones complementarias más elevadas de algunos funcionarios y a subir el IVA.
Incluso aunque haya un acuerdo in extremis con sus acreedores y socios europeos, Grecia se verá obligada a llevar a cabo dolorosos recortes. De acuerdo con la edición dominicalde hoy (21.06.2015) del diario alemán Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung, los acreedores internacionales estiman que a Atenas le faltarán a final de mes entre 2.000 y 3.600 millones de euros, debido a una caída dramática de la recaudación fiscal. El rotativo basa estas informaciones en cálculos internos de los acreedores, conforme a los cuales, la consecuencia directa serán recortes en sueldos y pensiones ya en este mes de junio.
En caso de que finalmente se alcance el acuerdo entre Atenas y los acreedores, primero, y los socios del Eurogrupo, después, la situación no se normalizará, en términos de liquidez, hasta mediados del mes de julio. Este mismo medio publica hoy también un artículo del ministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, en el que apela a la canciller alemana, Angela Merkel, a impulsar un acuerdo. Varufakis pide a Merkel no seguir a “las sirenas de su Gobierno”, algunos de cuyos miembros parecen querer, segúne el ministro, lanzar al Gobierno griego “por la borda”.
Reunión extraordinaria del Eurogrupo
“La canciller alemana estará el lunes ante una encrucijada decisiva”, dice el ministro griego, en relación con la cumbre extraordinaria de los líderes del Eurogrupo, convocada para mañana con el fin de abordar la crisis griega. Merkel tendrá que decidirse ahí si desea impulsar “un compromiso honorable”, argumenta Varufakis. “Todo depende de esta cumbre extraordinaria del lunes”, expresa el ministro. Si embargo, la propia Merkel rebajó el viernes las expectativas respecto a este encuentro, diciendo que, si para entonces no se ha alcanzado un acuerdo entre las instituciones acreedoras y Atenas, se tratará simplemente de una reunión de carácter “consultivo”.
Por su parte, en el mismo dominical, el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, advierte de la gravedad que tendría para Grecia una salida de la Eurozona. “Lo que no pueden esperarse es que tras salir de la Eurozona y negarse a pagar las deudas, les sigan llegando los fondos de la UE”, comenta Schulz. Según el diario, la Comisión Europea le ha presentado a Grecia un último calendario para un compromiso sobre el programa de reformas que se apoya en los mismos puntos básicos ya conocidos. Según ese plan, Atenas tendrá que ahorrar o recaudar adicionalmente un 2,5 por ciento del PIB, lo que equivaldría a 4.500 millones de euros. Un 1 por ciento, cerca de 1.800 millones de euros, tendría que provenir de reformas estructurales en el sistema de pensiones y un aumento del IVA.
El plan de Grecia
Precisamente, Atenas prepara una propuesta ante la reunión del lunes, con el fin de lograr el acuerdo. Según informaciones de la televisión privada Mega, el nuevo plan mantendría los tres tipos del impuesto sobre el valor añadido (IVA), el 6,5 por ciento, el 13 por ciento y el 23 por ciento, propuestos ya por el Ejecutivo, pero esta vez Atenas estaría dispuesta a cambiar la imposición sobre algunos alimentos o los hoteles para aumentar los ingresos fiscales.
En cuanto a las pensiones, que es junto al IVA una de las cuestiones en que existen los mayores desacuerdos, el Gobierno de Alexis Tsipras estaría dispuesto a abolir las jubilaciones anticipadas a partir del próximo año, lo que ahorraría unos 200 millones de euros. Además, según Mega, la parte griega estudiaría reducir las pensiones complementarias más elevadas de algunos funcionarios. Además, el Gobierno griego estaría dispuesto a mantener el polémico impuesto sobre la propiedad inmobiliaria, conocido como Enfia, que se comprometió a eliminar este año.
La nueva propuesta podría modificarse si en las próximas horas, como se prevé, Tsipras mantiene una conversación telefónica con el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, con el objetivo de transmitirle estas medidas. La cuestión clave para el Ejecutivo seguiría siendo que los acreedores acepten una reestructuración de la deuda.
MS (efe/FAS/dlf)
En: DW