Una joven de 17 años, oriunda de Daguestán y viuda de un insurgente islamista abatido por la policía en 2009, fue una de las autoras del doble atentado suicida que dejó 40 muertos.
Moscú, AFP
Una joven de 17 años, oriunda de Daguestán, república del Cáucaso ruso, viuda de un insurgente islamista, fue una de las autoras del doble atentado suicida contra el metro de Moscú que dejó 40 muertos, anunció el viernes el comité antiterrorista ruso.
“Djennet Abdurajmanova es la mujer kamikaze que accionó el artefacto explosivo en la estación Park Kultury”, anunció ese comité, que coordina las acciones de diferentes ministerios rusos, presidido por Alexandre Bortnikov, director de los servicios de inteligencia FSB (ex KGB).
La joven, conocida también como Abdullaieva, había nacido en 1992 y vivía en Jassaviurt, oeste de Daguestán, indicó el comité.
Poco antes de la confirmación oficial, el diario Kommersant, citando a investigadores, había informado que la joven kamikaze habría sido la viuda de un rebelde islamista muerto en 2009, Umalat Magomedov.
Según la prensa rusa, Magomedov, alias “Al-Bara”, considerado por los rebeldes como el “Emir de Daguestán”, fue abatido por la policía el 31 de diciembre de 2009 en Jasaviurt, en el oeste de la inestable república del Cáucaso.
El periódico publica una fotografía de Abdurajmanova, en donde se la ve con marcados rasgos de niña y un pañuelo islámico en la cabeza, junto a Magomedov. Ambos posan con pistolas.
El insurgente era cercano al líder rebelde Doku Umarov, quien se hace llamar “Emir del Cáucaso” y que reivindicó los dos atentados de Moscú en un vídeo publicado el miércoles por el portal independentista checheno Kavkazcenter.
Según informó el viernes el ministerio ruso de Salud, el balance de los ataques del lunes se elevó de 39 a 40 muertos, tras el fallecimiento en el hospital de uno de los heridos. Además, siguen hospitalizadas 84 personas.
Umarov, de barba larga y vestido con un uniforme de batalla, señaló que se trataba de “un acto de venganza” por una operación especial llevada a cabo por las fuerzas de seguridad rusas el 11 de febrero en la república caucásica de Ingusetia, que calificó de “matanza”. En el mensaje, el líder islamista prometió nuevos atentados.
Influenciada por esta retórica, la joven habría sido convencida por los “ideólogos wahhabíes” de “sacrificarse” para vengar a su marido. El wahhabismo es una corriente del Islam caracterizada por su puritanismo, que ha sido impuesta en Arabia Saudita.
Los investigadores no han identificado a la segunda kamikaze, pero se sospecha que podría ser una chechena de 20 años llamada Marja Ustarjanova, que también estuvo casada con un militante del Cáucaso Norte, según el diario Kommersant, que, según el diario Troud, “habría en muerto octubre de 2009 cuando preparaba un atentado contra el presidente checheno, Razman Kadirov”.
La mujer, desaparecida en Chechenia desde 2009, habría conocido a su esposo a través de internet, un método aparentemente utilizado con frecuencia por los insurgentes islamistas para reclutar a futuras kamikazes.
Sin embargo, una fuente de los servicios de seguridad chechenos indicó el jueves a la agencia de noticias Ria Novosti que la foto de la joven no correspondía con las imágenes de los cuerpos de las autoras de los atentados de Moscú.
Acostumbrados en los últimos años a que la violencia islamista y separatista ocurra sobre todo en el Cáucaso Norte, los rusos se encuentran conmocionados por los ataques del lunes.
Los ataques de Moscú fueron seguidos por un atentado el miércoles que dejó diez muertos -incluidos nueve policías- en la localidad de Kizliar, en Daguestán.
En: http://www.elcomercio.com/noticiaEC.asp?id_noticia=343796&id_seccion=5 Leer más