Cuando la profesora Giuliana Cassano presentó las conclusiones finales de su investigación sobre la ficción televisiva en el Perú, los representantes de IBOPE le comentaron que sería muy provechoso trabajar de la mano con quienes toman las decisiones en los canales de televisión. Eso podría ayudar a mejorar la calidad de nuestras producciones y hacer un análisis más preciso sobre el éxito o el fracaso de las producciones nacionales. “La ficción televisiva en el Perú: una visión integral” es la investigación que realizó junto a los profesores James Dettleff, Guillermo Vásquez y un grupo de estudiantes de Comunicación Audiovisual. El proyecto, que recibió el apoyo del Vicerrectorado de Investigación (VRI) y forma parte de un estudio internacional promovido por el Observatorio Iberoamericano de ficción televisiva (OBITEL), se presentará en la segunda fecha de ALAIC 2014.
Giuliana Cassano y sus alumnos del curso Video 2 serán premiados este viernes 27 de junio en el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, por la realización de dos spots que sensibilizan a la población en la problemática de los feminicidios y la violencia de género. Conoce más sobre la investigación y el trabajo de la profesora Cassano en la siguiente entrevista.
¿Cuál era el objetivo de la investigación?
Queríamos observar la ficción televisiva nacional en señal abierta y ver cuál era la pauta de seguía, sus características, los horarios, el rating, los temas que aborda, los escenarios, las preocupaciones. Hicimos un seguimiento de 24 horas al día, de lunes a domingo, durante todo el año. Nuestra investigación empezó el 1 de abril del 2013 y terminó el 31 de diciembre del mismo año.
Durante el tiempo que duró la investigación ¿Notaron algunos cambios en la ficción televisiva del Perú?
Hubo cosas interesantes. Todos los investigadores peruanos tienen la sensación de que producíamos poco. La verdad es que producimos mucho más de lo que creemos. Vimos cambios con respecto al año anterior. En 2012, las historias estaban muy ligadas con sujetos emprendedores. En el 2013 estos personajes dejaron de aparecer y surgieron otras temáticas, como miradas al pasado o hechos de la vida cotidiana más reciente. No hemos tenido a lo largo del 2013 muchos relatos de sujetos emprendedores. Además, notamos que en el Perú replicamos mucho las fórmulas exitosas y no apostamos por innovar. Por eso, hemos visto con gusto la apuesta del canal del estado por la ficción con temas muchos más variados a través de “Conversando con la luna”. Este proyecto está creciendo. Pasó de contar con 4 temáticas en el 2012 a abordar 12 en el 2014.
Esta investigación estuvo ligada a otras que se realizaron en diferentes partes de América Latina. ¿Estamos muy lejos de la producción de ficción en otros países de la región?
Al inicio pensamos que sí, pero nos dimos cuenta que producimos casi lo mismo que Argentina. Superamos a países como Chile y Uruguay. No tenemos un mal nivel de producción. Por supuesto, Brasil y México producen mucho más que nosotros. Ellos tienen un promedio de 30 productos al año. Nosotros estamos entre los 13 o 14, que es un número bastante bueno para el tamaño de nuestro mercado.
Entonces ¿Qué estaría causando esa percepción de escasa producción?
Es complicado. Creo que tiene que ver con que los productos de ficción que tenemos en la televisión son de larga duración. Si le preguntas a alguien sobre ficción en el Perú te hablará de Al Fondo Hay Sitio, que los acompaña de lunes a viernes, todo el año. Además, muchos olvidan las producciones de verano. La televisión peruana tiene una dinámica muy temporal. Eso influye en la recordación.
Además del monitoreo de medios ¿Qué otras herramientas de investigación han usado?
Usamos mucho el cruce de tablas. Trabajamos con porcentajes, analizamos el tipo de información. También revisamos mucha bibliografía y pusimos énfasis en la recuperación histórica y de la memoria. Ese ha sido un tema muy presente. Revisamos qué se ha producido en el país que tenga el objetivo de abordar el tema de la memoria desde la ficción.
¿Qué conclusiones nos ha dejado su investigación?
Por el momento, hay que dejar claro que el Perú es un país que produce y que trabaja temáticas variadas, como el racismo, la desigualdad social, la superación y el emprendedurismo, entre otros. Las historias que tienen más éxito son las que muestran a personas que, sin tener las posibilidades y las comodidades soñadas, luchan mucho por triunfar en la vida. Estas conclusiones son las del 2013 y se irán enriqueciendo anualmente. La meta es que, cuando tengamos los datos de cinco años de investigación, hagamos una mirada más amplia.
¿Cómo se llegó a trabajar con el Ministerio de la Mujer?
Es un trabajo que viene de tiempo atrás. Coordino algunas cosas con la DARS hace tres años, porque considero que un curso como el de Video 2 debe servir para que los estudiantes se vinculen con los clientes y las audiencias. En la primeraparte del curso hacemos un ejercicio con temáticas que vinculen al estudiante con problemas de la realidad nacional. Un estudiante no puede vivir en una burbuja. Tiene que conocer cuáles son los problemas que lo rodean. Así llegó la conexión con el Ministerio de la Mujer, porque ellos tenían interés en sensibilizar a la población. El tema que elegimos fue el creciente número de feminicidios en el Perú. Usamos la dramatización, que es lo nuestro, buscando sensibilizar a la gente. Hicimos cuatro spots que han sido evaluados por el Ministerio. Han decidido premiar dos de ellos y serán trasmitidos por todos sus canales oficiales.