Scorsese y el poder transformador de la vida de los santos
4:00 p.m. | 24 mar 25 (NCR/LC).- Durante décadas, Scorsese consideró un proyecto sobre los santos para mostrar cómo sus historias nos inspiran ante desafíos actuales. Finalmente lo ha realizado con Martin Scorsese Presents: The Saints, una serie documental de ocho capítulos. Cada uno presenta un biopic sobre un santo, seguido de un diálogo con tres invitados para profundizar en su historia. Entre los santos destacados se encuentran Juana de Arco, Francisco de Asís, Juan Bautista, Tomás Becket, María Magdalena, Moisés el Negro, Sebastián y Maximiliano Kolbe.
——————————————————————————————–
Un hilo conductor recorre las vidas de cuatro grandes figuras católicas retratadas en la primera parte de The Saints: Cada uno de ellos encarna una fe con consecuencias, una devoción que exige sacrificio y sufrimiento. Lo que está en juego es la vida y la muerte, pero la recompensa es eterna. La serie, que se estrenó en noviembre del 2024 en el servicio de streaming Fox Nation y concluirá con otros cuatro episodios este próximo abril, está presentada y narrada por Scorsese y sigue la vida y la muerte de los santos Juana de Arco, Juan Bautista, Sebastián y Maximiliano Kolbe.
Condenada por herejía por un tribunal eclesiástico del siglo XV, Juana de Arco, de 19 años, fue quemada en la hoguera en Ruán (Francia). Tras denunciar a Herodes Antipas, soberano de Galilea, Juan Bautista fue encarcelado y decapitado a petición de la hijastra del tetrarca. El soldado romano Sebastián fue atravesado por flechas en el corazón por convertir a sus compañeros bajo el sangriento gobierno de Diocleciano. Cuando Sebastián sobrevivió, fue golpeado hasta la muerte y arrojado a una alcantarilla. Y en un acto de asombrosa valentía y humildad, el fraile franciscano de origen polaco Maximiliano Kolbe eligió la tortura y la ejecución en Auschwitz para salvar la vida de un desconocido condenado a muerte.
Marcada por una narración directa, sin florituras, que reduce los relatos complejos a sus puntos esenciales, The Saints es un curso intensivo, presentado con arte, sobre personas comunes de virtud heroica y fe inquebrantable. No hay grandes alardes ni relatos revisionistas (aunque el debate sobre la retórica antisemita de Kolbe puede resultar controvertido). Es una producción realista que hace hincapié en los aspectos clave de la vida de estos santos sin rodeos ni detalles innecesarios. Francamente, su brevedad -cada episodio dura unos 45 minutos- es sorprendente teniendo en cuenta la duración de las cuatro últimas películas de Scorsese.
Al centrarse en algunos de los santos más populares de la historia católica, que también han suscitado gran atención en el ámbito secular, la serie no se limita a un público exclusivamente católico. Estas personas han estado representadas en grandes clásicos: como la influyente La pasión de Juana de Arco, de Carl Theodor Dreyer; la aclamada Las flores de San Francisco, de Roberto Rossellini; o la atrevidamente queer Sebastiane, de Paul Humfress y Derek Jarman. (Cuando se le preguntó por los abundantes desnudos de la película, Jarman contestó: “No podíamos permitirnos trajes”). La mayoría de los espectadores, tanto católicos como no católicos, tendrán al menos un conocimiento somero de estas figuras.
La excelente iluminación y los altos estándares de producción de la serie la elevan por encima de esos programas educativos que suelen adormecer a los estudiantes a la 1 de la tarde. Sin embargo, The Saints conserva ese aire de “programación educativa”, algo que podría ser intencional. La educación ha sido durante mucho tiempo una vocación para Scorsese, promoviendo la “alfabetización visual” y los fundamentos de la gramática cinematográfica, discutiendo la historia del cine estadounidense o narrando una visión general de cuatro horas del cine italiano. Su conocimiento enciclopédico del cine, compartido alegremente con el brío de un buen profesor, le convierte en un presentador inusualmente atractivo.
Sin embargo, Scorsese no es doctor de la Iglesia ni un erudito de las Escrituras, por lo que reunió a un equipo de tres comentaristas expertos para discutir la vida de los santos después de cada episodio. Estas conversaciones, en las que intervienen el jesuita James Martin, la escritora Mary Karr y Paul Elie, pueden ser la parte más fascinante de la serie, sobre todo por las personalidades implicadas. Las reflexiones de Scorsese revelan muchos años dedicados al catolicismo, leyendo las Escrituras y discutiendo “las grandes cuestiones” con otros. En otra vida, Scorsese podría haber sido un popular historiador de la religión.
Criado como católico entre italianos-americanos de Manhattan, el antiguo monaguillo dividía su tiempo entre el cine y la iglesia, y puso sus miras en el sacerdocio. Incluso entre los miembros de su familia, el floreciente director era único en su devoción, alimentada por Cristo, Graham Greene y un asiento en el cine. “Fui yo quien se tomó en serio a la Iglesia”, recordaba Scorsese en 1988 al hablar de su enormemente polémica adaptación de La última tentación de Cristo. “Puede que no sea algo elegante hoy en día decir que eres creyente, sobre todo decirlo tan a menudo en los periódicos, como lo he estado diciendo yo. Pero realmente creo que Jesús tenía la idea correcta”.
Cuando Scorsese no fue admitido en la Universidad de Fordham por un rendimiento irregular en el instituto católico, se decantó por una carrera cinematográfica, pero ambas pasiones permanecieron inextricablemente entrelazadas. Su fe adolescente se transformó en una visión madura y moralmente compleja, que combinaba el culto devocional en la Iglesia con la incongruente violencia fuera de sus puertas. A finales de la década de 1980, tras una larga obsesión por “cuestiones de fe, penitencia y redención”, Scorsese convirtió a Cristo en su protagonista en La última tentación, una imaginativa meditación sobre las luchas humanas de Jesús que provocó un alboroto internacional y una violenta respuesta en París.
Sin inmutarse, Scorsese no ha hecho más que agudizar su interés por los temas católicos en los últimos años: Silencio, de 2016, retrataba a los misioneros jesuitas del siglo XVII en Japón y una próxima película narrará la vida de Cristo, un proyecto que anunció tras reunirse con el Papa el año pasado. The Saints es un aporte muy bienvenido a una obra encomiable definida en gran medida por una inquieta búsqueda de Dios. “He intentado durante muchos años encontrar cómo se expresa Jesús en el mundo que me rodea”, dijo en una conferencia en Roma en 2023. “Mi búsqueda de Jesús continúa”.
DÓNDE VER THE SAINTS. Apple TV – Youtube TV
Entre la ficción y el documental
En Martin Scorsese Presents: The Saints, el mismo director estadounidense actúa como narrador y anfitrión para la distribuidora online Fox Nation. La serie relata la vida de estos modelos de santidad, abarcando diversas épocas, orígenes y perfiles. Los episodios se dividen en dos partes: la primera, que ocupa dos tercios de la duración, es un biopic narrado por Scorsese. La segunda parte presenta a Scorsese en un diálogo de salón con el padre jesuita James Martin, la poetisa Mary Karr y el escritor Paul Elie, que reflexionan sobre las lecciones que pueden extraerse de las biografías.
Las discusiones conectan la hagiografía católica con los debates contemporáneos. Santa Juana de Arco se convierte en una lente para examinar la relación de la Iglesia con las conversaciones modernas sobre los roles de género. Los cuatro participantes analizan su atuendo masculino, su papel atípico como guerrera en su época y el énfasis en su virginidad durante el proceso de canonización. En el caso de San Maximiliano Kolbe, el antijudaísmo cristiano generalizado en la Polonia de preguerra, al que Kolbe se adhirió inicialmente, ofrece la oportunidad de debatir cómo han evolucionado las enseñanzas de la Iglesia sobre estas cuestiones desde la declaración de 1965, Nostra Aetate.
Algunos observadores se han extrañado de la elección de Fox Nation, un grupo mediático conocido por su postura editorial abiertamente conservadora. Scorsese es conocido por sus inclinaciones políticamente liberales, típicas del ambiente artístico neoyorquino de su generación. Cuando The New York Times le preguntó al respecto, Scorsese respondió que el grupo le daba “total libertad artística”. Además, el sacerdote jesuita James Martin participa en los diálogos y es reconocido por sus posturas progresistas. El estilo de las secciones del biopic puede sorprender al espectador por su tratamiento un tanto en blanco y negro, que toma prestados tropos clásicos del cine bélico de Hollywood y se desvía del estilo habitual de Scorsese como director.
VIDEO. Martin Scorsese Presents: The Saints (Tráiler extendido)
Diálogo con Scorsese sobre The Saints
Rápidamente empieza a hablar sobre su santo favorito, San Francisco, quien le intriga “por su rechazo al mundo material”. Luego agrega, “he estado muy interesado en San Francisco, y no por el aspecto sentimental de que hablaba con los pájaros, sino por la trayectoria de su vida, a través de las guerras, las fiebres, robando la casa de su padre para pagar la reparación de la iglesia, para restaurarla. Su padre enojándose con él, comprensiblemente, todo eso, y luego diciendo: ‘Te devolveré todo. Vamos a vivir y, ya sabes, afrontar la vida con el amor de Dios’. ¿Cómo se manifiesta ese acto? ¿Cómo se lleva a cabo? Eso me pareció interesante”.
Santos y bandidos
Scorsese sería el primero en señalar que los santos no siempre fueron, bueno, santos. Por ejemplo, Moisés el Negro. No es de los más conocidos este santo etíope, pero Scorsese pone rápidamente al corriente. “Era un bandido terrible”, dice, usando una palabra que debió de aprender viendo películas en blanco y negro cuando era niño. “Era el hombre más temido. Tenía una banda de degolladores y se dedicaba a matar y violar y matar y violar”.
“En un momento dado, de repente, en medio de una batalla, en medio de atacar una caravana o lo que sea, matando a la gente, en un momento dado, simplemente se detuvo, y se levantó y se alejó. Y caminó y caminó y caminó, y se encontró con lo que ahora llamamos un monasterio, pero en ese momento, estos monasterios eran como pequeñas chozas y pequeñas congregaciones, por así decirlo, de hombres que eran santos, hombres que querían permanecer santos y querían salir de Alejandría, donde había tantas luchas entre diferentes cuestiones dogmáticas y herejías. Y sólo querían alejarse de eso”.
“Este monasterio en particular estaba dirigido por un hombre llamado Isidoro, y Moisés encontró su camino allí, y decidió quedarse con Isidoro. Y él es interesante porque pensó que por todos sus pecados y lo horrible que era, tenía que vivir una vida de auto-mortificación. Y lo hizo por varios años, donde se lastimaba a sí mismo y se daba las tareas más duras, todo eso. E Isidoro y los otros se preguntaban, mirándolo, y finalmente en un momento Isidoro le dice: Sabes, Dios no quiere eso de ti”.
Suena como una película de Scorsese: un gánster que trata de encontrar el camino hacia el amor de Dios, pero no antes de pasar por el infierno. Y así es con los otros santos que perfila Scorsese. Juana de Arco gana una gran victoria para Francia, pero pronto se convierte en un problema para el rey y debe ser juzgada por un tribunal de líderes eclesiásticos, quienes la condenan a morir quemada. O Maximiliano Kolbe, quien estaba tan dedicado a María pero sabía desde joven que tendría que enfrentar el martirio, que finalmente llega en un campo de concentración.
Scorsese no se aparta de las sangrientas batallas en Francia ni de las condiciones sombrías de Auschwitz (o de los escritos antisemitas de Kolbe, que reciben la atención que merecen). Estas son historias complejas, llenas de algo de violencia y dolor real. Muchas de ellas también son conocidas, así que, ¿por qué revisitarlas ahora?
“Me encuentro pensando que este es un buen momento para hacer algo serio que pueda llegar a los jóvenes, como una buena expresión de ejemplo”, dice Scorsese. “No estoy hablando de martirio. Estoy hablando de qué impulsó a Juana de Arco, ¿qué la movía? ¿Y qué pasa con [San] Sebastián?”. Son historias que pueden verse con jóvenes, con adolescentes o mostrar a los grupos de jóvenes en que se está preparando para la confirmación en las parroquias. Una generación criada con Marvel podría beneficiarse de una dosis de estas.
Entrevista: “Tenía curiosidad por esas figuras, esas estatuas, y lo que representaban”
—¿Qué le hizo querer hacer The Saints?
—Volver a mi infancia temprana, al respiro y el santuario que encontré en la Antigua Catedral de San Patricio. No poder practicar deportes o ser un tipo duro en las calles. Y, ya sabes, las calles eran bastante duras allí. Encontré un santuario en ese lugar. Ahora es una basílica. La primera Catedral Católica en Nueva York en 1810, 1812. Figura en Gangs of New York. Los Know Nothings y grupos antiinmigración la atacaron en 1844. El arzobispo Hughes respondió. Es un lugar lleno de historia. En esta contemplación, tenía curiosidad por esas figuras, esas estatuas, y lo que representaban. Tenían historias.
—¿Las entendió entonces o parecían divinas?
Me tomó tiempo pensar en eso y aprender que, no, que eran humanos. Para mí, si pudieron hacer eso, es un buen ejemplo para nosotros. Si lo tomas y lo pones en un mundo difícil —si estás en el mundo de los negocios o en Hollywood o en la política o lo que sea— si estás arraigado en algo que realmente actúa con compasión y amor, esto es algo que debe ser admirado e imitado. Ellos cometían errores. Descubrí que al sobrevalorar a una persona, casi te libera de hacer lo mismo. “Al menos hay alguien haciéndolo”. Bueno, ¿y qué hay de ti? Dorothy Day era algo increíble, pero sabía: “No me pongas esa etiqueta porque eso libera a todos los demás”.
—Ha hecho películas directamente religiosas como Silencio y La última tentación de Cristo, pero me pregunto cómo ve el papel de la fe en el cine. ¿Cómo están Dios y el cine relacionados para usted?
El cine viene de Dios. Viene de un don. Y ese don también está involucrado con una energía o una necesidad de contar historias. Como narrador, de alguna manera hay una gracia que se me ha dado que me hizo obsesionar con eso. La gracia fue a través de tener esa habilidad, pero también de luchar a lo largo de los años para crear estas películas. Porque cada una es una lucha. A veces tropiezas, caes, golpeas la lona, no puedes levantarte. Te arrastras sangrando y golpeado. Te echan un poco de agua y de alguna manera lo logras. Vas a otra. Luego vas a otra. Esta es la gracia, realmente lo es.
—¿Qué sentimiento tiene luego de las elecciones presidenciales?
Bueno, por supuesto tengo sentimientos fuertes. Creo que se puede notar por mi trabajo, por lo que he dicho a lo largo de los años. Creo que es una gran tristeza, pero al mismo tiempo, es una oportunidad. Una verdadera oportunidad para hacer cambios en última instancia, tal vez en el futuro, nunca desesperarse y entender las necesidades de otras personas también. Se necesita una profunda introspección en este momento. ¿Acción? No soy un político. Sería el peor que puedas imaginar. No sabría qué acciones tomar, excepto continuar con el diálogo y, de alguna manera, la compasión entre nosotros. De esto se trata.
LEER. Entrevista completa concedida a AP, traducida por Infobae
VIDEO. Martin Scorsese habla sobre su fe al presentar The Saints
Scorsese y el jesuita James Martin en The Saints
El sacerdote jesuita James Martin, quien contribuyó a la serie, habló sobre su colaboración con Scorsese y la relevancia de los santos hoy en día. Dijo que los santos fueron elegidos porque sus historias impactaron a Scorsese, y que los santos siempre son relevantes en el mundo moderno. Describió al cineasta como “uno de los católicos más inteligentes, comprometidos y apasionados que conozco” y explicó que las historias de los santos no solo interesan a Scorsese, sino que también son parte de su fe. “Y, por supuesto, es un gran artista”, añadió.
Citando al teólogo jesuita Karl Rahner, el Padre Martin señaló que los santos nos muestran lo que significa ser cristiano “de una manera particular”, y que ser santo significa ser uno mismo en la situación que Dios nos ha puesto. Un santo que le resonó fue Juana de Arco. El jesuita destacó cómo ella “se mantuvo fiel a su llamado”, incluso cuando otros la veían como loca. La vio liderando el ejército francés como “un acto de liberación”. Aunque su historia pueda parecer difícil de comprender, el P. Martin recordó que en su época, liberar a un pueblo oprimido era un acto claro de justicia.
Añadió que, aunque otros santos como Maximiliano Kolbe dieron su vida por otros, las acciones de estos santos a menudo nos parecen “sensatas”. Por último, aclaró un malentendido sobre el martirio, explicando que el mártir “no desea la muerte por sí misma”.
“El martirio, como vemos en la vida de Kolbe, suele ser el resultado inevitable de defender a alguien o de tomar el lado de los pobres, perseguidos o que están luchando”, dijo el P. Martin. “En la mente de Kolbe, la invitación de Dios era decir ‘sí’ a la invitación de ofrecer su vida. Su acción trataba sobre la vida, no sobre la muerte”.
El jesuita Martin espera que la serie de documentales ayude a los católicos a redescubrir a personas que oran por nosotros y nos dan ejemplos a seguir. Espera que, para los fieles, les recuerde que la fe vale la pena, aunque no siempre sea fácil. “Y para aquellos que no creen, siempre digo: Miren sus historias. Dejen que les inspiren. Y luego pregúntense si esto tiene sentido sin Dios”.
Conozca al creador de la nueva docuserie Saints de Martin Scorsese
Matti Leshem aún recuerda cuando conoció por primera vez a los santos católicos siendo un niño judío. “Estos eran individuos tan comprometidos con sus creencias que estaban dispuestos a soportar la persecución e incluso el martirio,” le dijo a Our Sunday Visitor en una entrevista. “Era un concepto tanto ajeno como impresionante para un niño criado en un hogar judío”. Hoy, Leshem comparte las historias de los santos con millones de personas como creador de Martin Scorsese Presents: The Saints.
“En la escuela católica, comencé a entender las profundas implicaciones de esa fe a través de las historias de Jesús, los apóstoles y los santos que siguieron sus pasos”, dijo Leshem. “La narrativa del sacrificio máximo, dar la vida por una verdad trascendental, ha permanecido conmigo desde entonces, moldeando no solo mi comprensión de la fe, sino también mi sentido de contar historias”.
Leshem habló sobre su educación católica, su colaboración con Scorsese, su conexión personal con el Holocausto y el impacto de los santos en su propia vida: “Mi esperanza es que los espectadores vean a los santos no como figuras distantes e inalcanzables, sino como individuos profundamente humanos que lucharon con la duda, el miedo y el sufrimiento, tal como nosotros lo hacemos”, dijo. “Sus historias son, en última instancia, sobre la transformación y el poder de la fe para inspirar actos extraordinarios de amor, valentía y sacrificio”.
La relación con San Maximiliano Kolbe
Leshem habló sobre el impacto de su propio origen en la serie, incluyendo el episodio sobre San Maximiliano Kolbe, un sacerdote polaco que sacrificó su vida por otro hombre durante el Holocausto. “Cuando conocí la historia de San Maximiliano Kolbe, un sacerdote católico que voluntariamente tomó el lugar de otro hombre en un bunker de hambre en Auschwitz, me tocó profundamente”, dijo Leshem. “El sacrificio de Kolbe trasciende las fronteras religiosas; habla de la capacidad universal para la abnegación y el coraje moral”. Leshem describió su conexión personal con el Holocausto como “profunda e inevitable”.
“Mi abuela murió en Auschwitz, y mi padre, miembro de la resistencia checa, sobrevivió asumiendo una identidad falsa”, dijo. “Estas experiencias han moldeado profundamente mi visión del mundo y mi trabajo”. Llamó al episodio sobre San Maximiliano Kolbe “una oportunidad no solo para honrar el legado de Kolbe, sino también para arrojar luz sobre las historias poco conocidas de los prisioneros no judíos en Auschwitz”. Luego, dijo, “este proyecto es una forma de contribuir al grito perdurable de ‘Nunca Más’, asegurando que tales historias sigan vivas y sean relevantes.”
Una introducción a Santa Juana de Arco
El primer episodio del docudrama aborda una santa muy conocida: Juana de Arco. Leshem llamó a su historia “atemporal e incomparable”. Una santa francesa, Juana de Arco luchó en la Guerra de los Cien Años contra los ingleses, guiada por las voces y visiones de los santos. La joven campesina, celebrada por liberar Orléans y llevar a Carlos VII de Francia al trono, murió en la hoguera en 1431 después de ser condenada por herejía. Tenía 19 años.
“Es, sin duda, una de las santas más icónicas, y su historia resuena a través de los siglos por su pura audacia y drama”, dijo Leshem. “Una niña adolescente, guiada por visiones divinas, consigue una audiencia con el rey, lo convence de confiarle un ejército, y luego lidera ese ejército hacia victorias decisivas; estos son hechos históricos, no adornos”.
“Su valentía y convicción son asombrosas”, añadió, “y su vida es un testamento al poder de la fe y la determinación”. Ella destacó para los creadores de la serie, dijo. “Nos atrajo especialmente el registro de su juicio, un documento extraordinario que conserva sus propias palabras mientras enfrentaba a sus acusadores”, dijo. “En nuestro episodio, bellamente escrito por Kent Jones, tratamos de capturar la esencia de esta joven extraordinaria, una visionaria cuya vida nos desafía a considerar los límites del coraje, la fe y la resistencia humana”.
LEER. Entrevista completa a Matti Leshem
VIDEO. Scorsese, “Mi búsqueda de Jesús continúa…” conversación con Antonio Spadaro
Información adicional
- La serie católica de Scorsese que está a punto de estrenarse
- Los Santos son extraños. Scorsese lo entiende
- La nueva serie de Scorsese sobre los santos inició con Juana de Arco
Publicaciones relacionadas en Buena Voz Católica
- San Francisco de Asís: la inspiración para el Papa
- Descubriendo el proceso para la santidad
- San José: Figura humilde y profética del cristianismo
- Diez mujeres santas: Artífices de humanidad
- The Chosen: Popular serie sobre Jesús estrena temporada
- Nueva serie invita a releer obra de Tolkien
- Religión y fe en series: True Detective, Juego de Tronos, Los Sopranos y más
Fuentes
National Catholic Reporter / La Croix / America Magazine / AP News / Deseret / Videos: Fox News – La Civiltà Cattolica / Foto: Fox Nation