La Jaula Invisible en que Vivimos
“[. . .] y esto solo conlleva a la creación de burbujas y cámaras de eco donde los usuarios navegan sin encontrarse resultados, contenidos o personas con una visión opuesta a la suya, o si se la llegan a encontrar la ven tan lejana, tan ajena, que será muy raro que logren generar algún tipo de empatía o de punto en común entre ellos.
Por esto es lógico que ante la hostilidad y la constante radicalización se dé una búsqueda de aislamiento y se tenga cada vez menos una menor resistencia a las personas con ideas diferentes, o lo que es lo mismo, esto no soluciona nada, solo empeora el problema generando tribus y radicalismos sociales por doquier. En esto no son dos redes sociales, es el internet entero, y también lo que está fuera de la pantalla donde se materializa el gobierno de la satisfacción.
Y la lucha no para. Incluso más allá de redes sociales. Por eso se busca nuevas formas de captar más, y más, y más, y más datos. Y no sólo eso, de nuevas formas de procesarlos, por eso decía, que no necesitas cámaras ni micrófonos para espiar a alguien. Existe algo que se llama publicidad predictiva que básicamente es observación predictiva del comportamiento con base a unos pequeños puntos, de unas pequeñas informaciones sobre ti que se pueden entrecruzar entre diferentes bases de datos, lo cual es totalmente normal en internet, se pueden saber cuestiones tuyas que aún no ocurren como, por ejemplo, que vas a estar embarazada o, por ejemplo, que te vas a pelear y separar
de tu pareja, u otras tantas cosas más. Todo eso se ha estado usando para publicidad pero, en serio hay que hacer la pregunta: Si un Estado tiene la posibilidad de simplemente replicar lo que ya hace una empresa, por qué no?
Por ejemplo, el Foro Económico Mundial considera la posibilidad de que en un futuro un algoritmo como el que ya elige las películas de Netflix elija la ropa que la gente va a vestir pues, en teoría, la ropa ya solo se contrataría así como un Uber. Todo esto con un modelo donde no hay estrellas o puntuaciones. Directamente el algoritmo como Netflix decide que cosa probablemente te va a gustar. No piensa en sí tal o cual película tiene tales o cuales galardones, o si es importante en tal contexto, o en la historia de cuál cine. No. Simplemente piensa en la coincidencia: “Piensa sólo en ti”. Solo va generando un súper individuo aislado de todo. Es básicamente la instrumentalización del súper individualismo, llevarlo a un nivel que aún no se ha visto, y a lo que, en opinión de varios expertos, será una sociedad con lazos más debilitados y una política menos democrática y más mecanizada. Pues básicamente la sociedad se estaría convirtiendo lentamente hasta en los puntos más frívolos y banales en un montón de burbujas aisladas entre ellas llamadas individuos, reitero, no como los que tenemos ahora sino a otro nivel.
Así que al mismo tiempo que somos cada vez más complacidos, también tenemos la mejor capacidad de ser controlados. No digo que eso busquen los gobiernos pero está ahí la posibilidad. Esto ya no es ciencia ficción.
Hey! pero esto podría ayudar a muchísimas cosas, no? Digo básicamente orden y control social. Podríamos decir entonces que vamos a una utopía manejada por los datos? No exactamente: Los bots, los softwares, los algoritmos, etc pueden chocar entre ellos como ya lo habíamos mencionado en el caso de Wikipedia, y curiosamente no es nada inesperado que nos den resultados inesperados. Además, como lo destacan ingenieros especialistas, matemáticos, y consultores en seguridad, estamos creando algoritmos que cada vez entendemos menos y por tanto no sabremos a dónde nos pueden llevar o por qué nos llevan a dónde nos llevan.
Como los autos Tesla arrollando robots, los algoritmos ya mencionados para los juicios que llegan a desproporcionar sentencias, basados en sesgos informativos softwares de reconocimiento facial que llegan a confundir congresistas con gente que ya está en prisión, o hasta los programas de alta frecuencia de la bolsa de valores, que en esta década casi causan una crisis económica sólo por seguir su programación.
Caramba! lo que estoy tratando de decir aquí es un principio básico de la ingeniería: Que la máquina, la herramienta, y otras tantas cosas más no cumplen deseos sino cumplen funciones. Pero tal como dice Jure Leskovec, “La caja negra”, refiriéndose al algoritmo, “es la verdad, si funciona funciona, no debemos siquiera intentar analizar que escupe la máquina, la máquina ve patrones que no conocemos”, y luego sentencia que “para muchos y su pensamiento acrítico frente al asunto: ‘Dios es la Máquina'”.
Estamos llegando a la sociedad de la caja negra donde no podemos entender ni conocer todos esos elementos que nos gobiernan, influencian, y categorizan, así como también van creando e hiper-formando nuestra realidad, porque esto de que tu celular te escucha y te de publicidad muy descarada no solo tiene una tendencia de volverse en lo normal, sino a llegar a estar tan pulido en un futuro, que no podremos darnos cuenta de la publicidad, mensajes, propaganda, e ideología que nos puedan llegar.
Simplemente sentirnos satisfechos porque siempre nos sale un anuncio de lo que necesitamos. Simplemente nos sentiríamos satisfechos porque ya seríamos una parte integral más de un gigantesco bucle de satisfacción en el cual ya no seríamos exactamente usuarios de las redes, sino que en parte las redes serían usuarias de nosotros [. . .]”
Video: Esquizofrenia Natural