Pedro Castillo ganó las elecciones presidenciales.

La crisis generada, una vez más en la gobernabilidad en el país, promovida por la ex-candidata y tres veces derrotada Keiko Fujimori, a escalado:

1. Ex mandos militares en un pedido flagrante contra el estado de derecho, están pidiendo el desconocimiento de Pedro Castillo como Presidente del Perú.
2. El congreso vergonzante de golpistas que intentaron colocar a Merino por encargo de la mafia, esta intentando hacerse del Gobierno, para elegir un TC a la medida del Fujimorismo.
3. La prensa “terruqueadora”, filo fascistas, esta enervando a una parte de la población, exaltando sus miedos, prejuicios y traumas.

Tener una candidatura en las elecciones presidenciales del 2021, de quien es acusada por la fiscalía como cabecilla de una organización criminal, es uno de los factores de la situación de la crisis ya mencionada. Pero la simiente, la causa raíz, es la presencia del “modelo” de gobierno, gestión y promoción basado en el ejercicio de la corrupción que la clase social, mediática-informativa, política y empresarial de los socios de la derrotada, se esfuerzan por conservar, sus privilegios y poder.

Los estados de crisis emanan de eventos disruptores, que desbordaron los protocolos existentes. Hasta el momento todos los protocolos existentes validados por la Constitución están siendo utilizados, la autonomía y proceso del cumplimiento del proceso electoral es claro y se ha cumplido a través del JNE y ONPE.

La Fiscalía y PJ deben hacer su trabajo, procesar a estos felones y “polichinelas”, ex militares, tinterillos, prensa “terruqueadora” y sediciosos civiles, que pretenden ir contra del estado de derecho y la paz de los peruanos.