Austria y Luxemburgo ponen fin al secreto bancario
Tras seis años de bloqueo, Austria y Luxemburgo aceptaron el jueves poner fin al secreto bancario, permitiendo a la UE dar un paso decisivo en la lucha contra la evasión fiscal, que se ha convertido en una prioridad internacional.
“El secreto bancario está abocado a desaparecer”, dijo el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, al término del primero de los dos días de la cumbre europea en Bruselas.
Esta etapa “indispensable” va a “permitir a los Estados miembros que repriman mejor el fraude y la evasión fiscal”, agregó, explicando que “los dispositivos fiscales eficaces son esenciales para el buen funcionamiento de las economías de mercado y para la justicia social”.
Esta decisión, muy esperada desde hace tiempo, ha sido bien recibida por las ONG como Oxfam que espera que los Estados puedan, al fin, redistribuir entre los más necesitados cantidades ingentes de dinero ocultas por el fraude y la evasión fiscal. Esta lacra hace que en Europa se dejen de ingresar 1 billón de euros por año, según Van Rompuy.
Pese a las numerosas declaraciones de intenciones, los europeos tropezaban hasta ahora con el rechazo de Luxemburgo y Austria a la transparencia. Finalmente, estos dos países muy apegados al secreto bancario, dieron el jueves la luz verde a la ley europea sobre la imposición y el ahorro.
Este texto, empantanado desde 2008, permitirá ampliar el intercambio automático de informaciones fiscales también a los abonos de trusts o fundaciones y no solo de personas físicas, como era el caso hasta ahora. Por tanto, representa un elemento importante en el arsenal de la UE para luchar contra la evasión fiscal y el secreto bancario, aunque no es el único.
“Hace mucho tiempo que Luxemburgo va hacia un centro bancario transparente. Hoy hemos confirmado que queremos ir en esta dirección”, dijo el primer ministro del pequeño país, Xavier Bettel. “Queríamos garantías y las hemos obtenido”, dijo, precisando que la directiva europea se adoptará “en las próximas semanas”.
– Trusts y sociedades pantalla –
Las decisiones en materia de imposición se aprueban por unanimidad, pero hasta ahora Austria y Luxemburgo se habían negado a firmar el texto, alegando el mismo trato que otros cinco países no miembros de la UE (Suiza, Liechtenstein, Mónaco, Andorra y San Marino) en la misma situación.
Al final, han conseguido que la Comisión Europea negocie con los cinco países. “Si al final del año no lo ha logrado, propondrá medidas que alentarán a los cinco países ir en este sentido“, dijo Bettel, que excluyó dar marcha atrás en la decisión adoptada el jueves. La Comisión había previsto un acuerdo a finales de 2013, tras las espectaculares revelaciones de paraísos fiscales (Offshoreleaks), pero en diciembre los mandatarios pidieron ampliar el plazo hasta marzo para resolver este caso.
Por su parte, los países miembros del G20, que representan cerca del 85% de la economía mundial, aprobaron la norma de intercambio automático de información fiscal de la OCDE, y más de 42 países se han comprometido a aplicarla, entre ellos Luxemburgo. Esta norma obligará a las administraciones fiscales de los países que la adopten a ofrecer toda las informaciones sobre los activos financieros pertenecientes a personas o entidades no residentes.
Entrará en vigor a finales de 2015. Dicha norma incluye los depósitos bancarios pero también los intereses y plusvalías, y como la directiva europea, se apoya en el principio del “beneficiario último y real”, en un intento de impedir en teoría el fraude fiscal a través de los trusts y de otras sociedades pantalla.
Para completar sus esfuerzos, los europeos esperan llegar a un “acuerdo político unánime” en la directiva sobre la cooperación administrativa. Este texto, que entrará en vigor en 2015, prevé el intercambio automático de información sobre los ingresos profesionales, pensiones, ingresos de bienes inmobiliarios y algunos productos de seguros de vida. Se espera que se adopte en el segundo semestre de este año.
En: swissinfo