Lori Berenson se despide del Perú

Si la terrorista Lori Berenson toma ese avión que la llevaría a su tierra natal, USA, podemos estar muy seguros de que ella no regresará al Perú. De igual manera, la terrorista y viuda de Néstor Cerpa Cartolini (el terrorista que lideró el asalto de la embajada de Japón) tiene pase libre para viajar a Francia “a visitar a sus familiares”, qué casualidad que justamente en Francia radica el mayor cuadro “cultural” de este grupo terrorista el cual tiende conexiones con otras asociaciones internacionales que comparten el mismo ideal. El problema de que ambas se queden en sus respectivos países es que van a poder coordinar con las representaciones del MRTA en el extranjero el apoyo suficiente para evitar la eliminación absoluta de ese proyecto del terror en el Perú. Es un hecho que gracias a ONG’s vinculadas a la defensa de los Derechos Humanos se libra una batalla legal por liberar a la mayoría de miembros de la cúpula terrorista. Estas personas asesinaron gente inocente, atentaron contra la vida de muchos ciudadanos, padres de familia, hijos, madres, etc. Personalmente, creo que deberían continuar confinados hasta que pierdan sus fuerzas para vivir, suena duro pero es mi forma de ver las cosas luego de que mi vecino, un ejemplar padre de familia, fuera emboscado y asesinado por estos delincuentes que ahora estan siendo liberados de a pocos. Legalmente pueden salir libres, sin embargo, van a llevar siempre sobre sus espaldas todas esas miradas de desprecio social cuando caminen por las calles de una Lima que fue ensangrentada por sus acciones. Un peligro mayor es que los esfuerzos desde el extranjero podrían devenir en el nacimiento de un nuevo partido político emerretista o terrorista al fiel estilo del M-19 colombiano. El país no puede ceder ante el terror y la violencia.

El tema de Lori Berenson quedaría en el olvido desde que el Perú no tendría la autoridad suficiente para solicitar el retorno de un ciudadano estadounidense. Recordemos que Estados Unidos es una potencia y es muy improbable que consienta el retorno de Berenson al Perú donde ya fue procesada y condenada. La mano blanda del Poder Judicial es escandalosa.