Francisco actúa en el IOR: tolerancia cero ante corrupción
11.00 a m| 2 jul 13 (ECCLESIA/RD/BV).- El anuncio de la creación de una Comisión Pontificia para investigar el IOR llegó dos días antes de que un nuevo escándalo salpicara los muros, demasiado frágiles, de las finanzas vaticanas. El sacerdote italiano Nunzio Scarano, prelado de honor -no obispo- y responsable del Servicio de Contabilidad Analítica de la Administración del Patrimonio de la Santa Apostólica (APSA), fue detenido, junto a otras personas, en el contexto de una investigación sobre corrupción y estafa.
Desde que sus superiores conocieron que Scarano era objeto de una investigación judicial, hace un poco más de un mes, lo apartaron de sus responsabilidades curiales, y la Santa Sede, lejos de intentar proteger o intervenir, ha hecho saber a las autoridades civiles italianas competentes “su disponibilidad a la colaboración plena”, como afirmó el portavoz vaticano, Federico Lombardi, tras el arresto de Scarano.
Las fechas en el entorno de la fiesta de los santos apóstoles Pedro y Pablo, Día del Papa, suelen ser utilizadas por los Pontífices para tomar y hacer públicas destacadas decisiones. Así ha sido también este año con Francisco, en su primer día del Papa. El 26 junio de 2013 se publicó el decreto –quirógrafo en argot técnico vaticano– mediante el cual el Santo Padre crea una comisión para el IOR (Instituto paras las Obras de Religión).
El quirógrafo pontificio es, una valiente y necesaria medida del Papa Francisco, que busca la reforma del IOR desde la veracidad -ni la leyenda negra, ni los paños calientes- de una institución que lleva demasiado tiempo ocasionando quebraderos de cabeza a los Papas y a la Iglesia. Y es que, como se deduce de la lectura del decreto pontificio, tanto Juan Pablo II como Benedicto XVI -él fue quien potenció el AIF (Autoridad de Investigación Financiera), y escribió una carta apostólica motu proprio para la prevención y lucha de las actividades ilegales en el campo financiero; además sometió las cuentas vaticanas al Moneyval, el organismo del Consejo de Europa para combatir el lavado del dinero- estuvieron sobre aviso y tomaron importantes decisiones en pro de la transparencia y la honestidad.
Además, el trabajo de esta comisión –presidida por el cardenal italiano Rafael Farina (1933) y coordinada por el obispo español Juan Ignacio Arrieta, secretario del Consejo Pontificio para los Textos Legislativos– se inserta “en el contexto más amplio de las reformas que sean oportunas realizar por parte de las Instituciones que prestan ayuda a la Sede Apostólica”, según afirma textualmente el citado documento papal.
Sobre el caso Scarano
El prelado detenido es Nunzio Scarano, responsable del servicio de contabilidad de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), el ente que gestiona el patrimonio inmobiliario del Vaticano, un Monseñor que ya había sido ya destituido de su cargo, pero que seguía “trabajando” al servicio de “familias” económicas y de blanqueo de dinero. Se le acusa de introducir en Italia 20 millones de euros desde Suiza.
Aún no es posible confirmar que el IOR esté implicado directamente, pero según varias fuentes esta detención ha sido posible después que el Papa Francisco ha nombrado la mencionada comisión, para investigar todo lo que ocurra en el banco del Vaticano. Lo que sí se sabe con seguridad es que el Papa ya conocía de la “operación policial” contra Scarano y ha estado a favor de la detención. También aquí, lo mismo que en los casos de pederastia, el Papa quiere “tolerancia cero”.
Con la detención de Scarano se puede intuir que el Papa está confirmando su interés y compromiso en limpiar de raíz los problemas del IOR. Sin duda no es motivo de satisfacción la detención de Nunzio y mucho menos ver las finanzas vaticanas envueltas en un nuevo escándalo, pero sí es satisfactoria la forma en que se ha producido esa detención.
¿Por qué? En el pasado se han hecho investigaciones similares pero la novedad está en el hecho de que (por lo que parece) la policía italiana se ha puesto en contacto con el Papa, y el Papa ha dicho que actúen, que apliquen la ley. Y así han atrapado a Scarano con las manos en la masa, llevando dinero negro desde suiza para blanquearlo.
Antes, los Papas habían defendido a sus “agentes” económicos. Podían hablar de espiritualidad, pero eran poco creíbles, porque en el fondo se escondían sumas opacas (negras) de dinero. No eran quizá sumas grandísimas, no venían de robos, pero eran “secretas” y empañaron la imagen (y el corazón) de la Iglesia vaticana.
Más sobre la comisión y el IOR
En declaraciones a un periódico italiano, otro de los cinco miembros de la Comisión Pontificia de investigación del IOR, el cardenal Jean-Louis Tauran, ha manifestado su convicción de la necesidad de reformar el IOR y de hacerlo encontrando “el mejor camino para poner al IOR en las mejores condiciones posibles en aras al bien del servicio de la Iglesia, pero sin hacer de ello un mito o caer en el sensacionalismo”. Es para que el IOR sea lo que eclesial y evangélicamente debe ser.
Porque esta es la clave de todo este asunto: en la Iglesia, la auténtica rentabilidad es el Evangelio y su misión evangelizadora. Lo que está en juego es, ante todo, la honestidad, la honradez y la transparencia. Es conocer el IOR y sus actividades y armonizarlo mejor con la misión de la Iglesia universal y de la Santa Sede.
Otros vínculos de interés:
– Investigación IOR: Santa Sede confirma plena colaboración (News.va)
Fuentes:
– La reforma del IOR y la rentabilidad de la Iglesia (Revista Ecclesia)
– Tolerancia cero en la Santa Sede ante las corruptelas del IOR (Religión Digital)
Gracias a Dios el Papa está haciendo lo que tenía que hacerse. Sería justo recordar también que esto lo ha hecho posible el Papa Benedicto, tan injustamente calificado.