Prosa

Enamorada de una canción

Hacía tiempo que no me emocionaba. O al menos, que no me llenaba de emoción por escribir. Pero a veces, me enamoro de una canción. Dicen que siempre lo hago, pero enamorarme de una canción no es lo mismo que obsesionarme con ella. A veces, escucho una canción una y otra vez, porque su música tiene algo repetitivo que me deja concentrarme en otras cosas. O tiene una letra simple, que puedo repetir sin pensar demasiado. O… en el momento de escucharla me hizo sentirme identificada con ella. También me obsesiono con canciones que expresan un estado de ánimo. Cuando estoy molesta, existe una canción. Cuando pienso en alguien, existe una canción. Cuando me siento sola, existe una canción. Cuando quiero reír, existe una canción.

Pero a veces, hay una canción que en el primer momento que la escucho, me hace querer saberlo todo de ella. Lo que la letra dice, como es quien la canta. Y no tiene que ver la forma en que llegó a mí… puede ser una canción de Anime, puedo haberla escuchado en la radio, puede haberme sido entregada por alguien… y puede estar en cualquier idioma. Muchas de estas canciones pasan automáticamente a mi blog, si cumplen el ser en un idioma que no es el español. De otro modo, sólo quedan en mi mp3 para ser recordadas en momentos de soledad. Esta canción que me enamora en este momento, pasará al blog en algunos días, pero la emoción de escucharla por primera vez no podía esperar.

Esta canción me hace sonreír. Siento una alegría de las cosas que me han pasado últimamente, de las indecisiones de las otras personas, de los errores que yo misma cometo, de mis indiscreciones, de las amistades que cultivo, de las emociones con las que me peleo. No soy una persona fácil de tratar por momentos. Pero hay seres que me aprecian, y ellos lo demuestran de tan distintas maneras— Por unos momentos puedo enfocarme en lo positivo, y no llorar porque todo no es siempre como quiero… Mi trabajo a veces no es como quiero, mi familia a veces no es como quiero, mi corazón a veces no es como yo quiero… Yo misma, a veces no soy como yo quiero. Pero… ¿qué importa? Estoy viva y me siento feliz por las pequeñas cosas que me rodean. Y estos momentos hay que dejarlos escrito para recordarlos cuando las nubes grises nos rodean. Hoy (o bueno… ayer, es la 1am), una canción me enamoró. Espero que lo que quede del día me llene de vida y emoción ♥

Silencio

Estoy en silencio. Una frase que alguien me dijo una vez. “¿Por qué crees que estoy molesta?” “Porque has estado en silencio últimamente” Es un silencio figurativo. ¿Es real? Porque no estoy en silencio realmente, hablo… me comunico… río… canto… pero hay una pared entre mí misma y una persona. Eso es “estar en silencio” según ese alguien. Y no lo hago sólo con ese alguien… lo he hecho ya varias veces.
Hoy he estado en silencio. No lo hago conscientemente, y no es necesaria una pelea para armarme en mi silencio. Basta un sentir. Porque a veces, la otra persona no tiene culpa (aunque otras veces, sí que la tiene), sino el sentimiento que me ha generado. Y me resguardo en mi silencio, porque así, ese sentimiento se calmará… o porque si rompo el silencio, el silencio se escapará de manera hiriente y no se podrá recoger después. El silencio, es mi escudo. Pero de ahí… se tiene que romper. Qué difícil.
Una vez rompí el silencio cuando aún no lo había procesado… y tuve que escribir una larga disculpa (y fue pública). Años atrás rompí el silencio cuando éste no era silencio, sino una sombra de sí mismo: el sarcasmo. Aún curamos las heridas. Últimamente he roto el silencio de a pocos, pausadamente, sin dejar que dure mucho. Esos silencios, han generado situaciones buenas, con ese alguien que ha bautizado mi silencio.
Hoy he estado en silencio con una persona importante. Al final, soy siempre la que lo rompe, y mañana deberé romperlo, aunque no sepa como. Esa persona, merece no tener silencio. Aunque me ponga en una situación imposible, aunque la única forma de arreglarlo todo es darle el silencio a otra persona, al menos le quitaré el silencio a esta persona. Porque el silencio es cruel. Y yo quiero a esa persona. De alguna forma, tenemos que desaparecer ese silencio.

[Vamos a rayar un poco a los lectores con un nuevo estilo de “Emociones Literarias” Culpemos a los Idus de Marzo… ¡que ya se acercan! Espero sus regalos, los pueden dejar en la PUCP XD]