[Quería escribir esto que tengo en mi cabeza desde hace unos días… Además que acabo de ver que hace un mes que no escribo nada en este blog :S]

Ha muerto…
Estamos todas de duelo, porque ella era única.
Tal vez la sonrisa más brillante que hemos conocido,
tal vez una sinceridad inusual para nosotras,
tal vez creada por un un amor que nosotras no comprendíamos…
y tal vez, un producto de una soledad absoluta.

Su muerte, no ha sido una sorpresa
Intentamos protegerla, cuidarla,
pero ya estaba escondida entre nosotras
desde que lo obvio se hizo evidente.
Y la puñalada final,
simplemente la dejó callada
silenciosa,
y no notamos que la mató.

Pero ahora, como ya no oímos su voz,
estamos seguras
que se ha muerto.
Sentimos un vacío, pero de cierta forma
es mejor así,
porque ya no tiene que vivir llorando
y nosotras, podemos sobrevivir sin ese amor que ella pregonaba…
y buscar uno mejor.

El problema es,
que sabemos quien es el asesino.
Pero la venganza no es una opción,
porque mancharía el recuerdo de ella.
Ella, soñará eternamente
pero no será olvidada.

[Je, que dramática me puse. El estrés y “la muerte de ella” me ha tenido con otras cosas en la cabeza. Recuerdo que en el último post terminaba con un “hasta mañana” Intentaré escribir la 2da parte de ese post en esta semana, si es que los mil pendientes que tengo en el trabajo me dejan unos segundos de respiro.]