Cardenal De Kesel propone “acción de gracias” para bendecir uniones homosexuales
10:00 a m| 15 may 18 (LC/RD).- Considerando que la Iglesia católica debe tener más respeto por las parejas homosexuales, el arzobispo de Malinas-Bruselas (Bélgica), el cardenal Jozef De Kesel, ha apuntado a un “cambio de paradigma” en el trato de la Iglesia hacia personas con atracción al mismo sexo. Un cambio que podría incluir una celebración eclesial “de acción de gracias o de oración” por las relaciones homosexuales, dado que “ya es insostenible la condena de estas” por parte de la Iglesia, ha declarado el primado de Bélgica.
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A finales del mes pasado el cardenal De Kesel se reunió con la organización pro-LGBTI HLWM en su palacio arzobispal, ante los que aseguró que no tiene “absolutamente nada en contra” de las uniones homosexuales, siempre y cuando se lleven a cabo en un contexto donde “la honestidad, la firmeza y la lealtad sean fundamentales”.
“Veinte años atrás hubiera hablado de manera diferente a como lo hago ahora sobre este tema”, explicó De Kesel, en declaraciones recogidas por Zizo Online. “Entonces habría seguido la enseñanza oficial de la Iglesia. Ahora lo veo mucho más ‘comprensivamente’. El respeto es fundamental”.
En este contexto, el cardenal De Kesel expresó su deseo de responder a la petición de las personas homosexuales creyentes, comprometidas en una unión estable y duradera, deseosas de beneficiarse de un reconocimiento simbólico de la Iglesia. No podría tratarse de un “matrimonio religioso” ni de una “bendición eclesiástica que se pareciera demasiado a la bendición de un matrimonio”, precisó el portavoz.
Si los homosexuales quieren, a pesar de todo, un símbolo cristiano, el cardenal piensa más bien en una celebración de agradecimiento, de oración. “Pero no en un intercambio de consentimientos sellado mediante el intercambio de alianzas”, añadió Geert De Kerpel, destacando que “si hay cierta limitación en el punto de vista de la Iglesia, es para conservar el gran valor del matrimonio y la familia”.
Aún así, el apoyo de De Kesel a la idea de un reconocimiento eclesial de las relaciones gays se suma al de cardenal Reinhard Marx, quien afirmó en febrero de este año que no ve nada malo en un cuidado pastoral más “cercano”, y hasta en un “ánimo” explícito, a los católicos homosexuales.
Esta información fue ampliamente comentada el sábado 5 de mayo en los medios belgas que destacaron que el cardenal De Kesel estaría tomando “una posición revolucionaria”. Sin embargo, solo ha confirmado algunas opiniones anteriores de la Iglesia en Bélgica sobre este tema.
Conocido por su apertura de espíritu, Jozef De Kesel, 71 años, arzobispo de Malinas-Bruselas desde noviembre de 2015 y cardenal desde noviembre de 2016, anunció, en su primera homilía como arzobispo, querer “una Iglesia más abierta, más atenta a los pobres, a las personas más vulnerables”.
35 de las 93 diócesis francesas ya cuentan con oficinas de atención pastoral a los homosexuales
Una idea del “cambio de paradigma” eclesial hacia los homosexuales que proponen los cardenales De Kesel y Marx ya empieza a hacerse evidente en Francia, donde cinco años después de la legalización de los matrimonios gays 35 de las 93 diócesis nacionales ya cuentan con oficinas de atención pastoral a los homosexuales, según informa La Croix.
Programas como el de la diócesis de Creteil, en las afueras de París, donde un diácono casado y su mujer reúne periódicamente a fieles gays para “testimoniar a la presencia fraternal de la Iglesia” con los homosexuales. O en Saint-Etienne, cerca de Lyon, donde el obispo ha mandado que trabajadores pastorales acompañen a los gays en “tiempos de oración” para “confiar su amor a Dios”: en mayor parte para contrarrestar la impresión -extendida entre la comunidad homosexual- de que la Iglesia apoyó las manifestaciones en contra del matrimonio gay organizadas por la asociación La manif pour tous.
Como ha explicado Fabienne Daull, miembro de un grupo de cristianos pro-LGBT en Nimes, la idea de estos programas es “decir y repetir que es posible ser cristiano y ser homosexual, que no es incompatible ni contrario a la fe”. Que es posible que los gays encuentren a Dios en sus vidas y que estén plenamente integrados en sus parroquias. Un cambio de actitud y de trato que ha sido impulsado por las famosas palabras pronunciadas por el Papa Francisco en 2013: “¿Quién soy para juzgar a un gay?”.
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Fuentes:
La Croix / Religión Digital
La posición de la moral católica respecto a la sexualidad requiere de una amplia revisión a la luz del moralista Häring.