Francisco a imanes: “Hablemos y escuchémonos como hermanos”
9:00 p m| 19 abr 17 (AGENCIAS/BV).- En primer lugar “escuchémonos” porque “cuando se escucha y se habla, ya estamos en el camino”. El Papa ha expresado esto en el saludo que dirigió a una delegación de líderes musulmanes de la Gran Bretaña, cuando se reunieron en la Santa Sede. El cardenal Vincent Nichols coordinó el encuentro después del atentado en Londres, y aprovecharon esta ocasión para insistir en el compromiso común por la unidad de las religiones.
Aprovechando la visita, Vatican Insider entrevistó a uno de los imanes, Ibrahim Mogra: “El odio entre las religiones es una idea de los terroristas. En este sentido hay que aislarlos, debemos quitarle fuerza a esta argumentación demostrando que las religiones no tienen problemas entre sí, que están unidas”. Finalmente, en la coyuntura del encuentro compartimos la nota de la BBC sobre la familia musulmana que, de generación en generación por cientos de años, mantiene en custodia la única llave con la que se abre diariamente el templo del Santo Sepulcro en Jerusalén.
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Pocas semanas después del brutal atentado de Londres, y en un gesto que quiso desterrar la falsa identificación terrorismo yihadista-Islam, el Papa Francisco recibió a una delegación de líderes musulmanes del Reino Unido, ante quienes hizo un llamamiento al diálogo y a afrontar tres desafíos: integración, educación y violencia.
En la audiencia, junto a los cardenales Vincent Nichols (arzobispo de Westminster) y Jean-Louis Tauran (presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Intereligioso), se encontraban Moulana Ali Raza RIZVI, Presidente de los ulemas de Europa; Moulana Muhammad Shahid RAZA, jefe del British Muslim Forum; Shaykh Ibrahim MOGRA, co-presidente de dicho organismo; y Moulana Sayed Ali Abbas RAZAWI, director general de la Scottish Ahlul Bayt Society.
Durante el encuentro, previo a la Audiencia General del miércoles, Francisco destacó la importancia de “escucharnos”. El “trabajo de la oreja”, como lo define Bergoglio, “sin apuro de dar la respuesta”.
Para el Papa, es urgente “acoger la palabra del hermano, de la hermana y pensar después a dar la respuesta”, porque “cuando las personas tienen esta capacidad de escucha, hablan con un tono bajo, tranquilo. En cambio, cuando no la tienen, hablan fuerte y gritan incluso”.
“Entre hermanos, todos nosotros debemos hablar, escucharnos y hablar despacio, tranquilos, buscar juntos el camino. Y cuando se escucha y se habla, ya se está en el camino”, recalcó Francisco, quien agradeció a los líderes islámicos “el camino que están haciendo”, y les pidió que rezaran por él.
“El odio entre religiones es idea de los terroristas. Hay que aislarlos”
“El Papa Francisco es un hombre valiente. Es el único que ha tenido la valentía para decir que el islam es una religión de paz. Él es un verdadero cristiano, porque ve a la persona humana sin importar su pertenencia religiosa”. Shaykh Ibrahim Mogra es uno de los cuatro Imanes ingleses que Francisco recibió en el Vaticano, a pocas semanas del atentado que el pasado 22 de marzo sacudió Londres y a pocos días del atentado de San Petersburgo. Un gesto lleno de significado, promovido por el cardenal arzobispo de Westminster, Vincent Nichols, para demostrar la voluntad de las religiones de permanecer unidas y contrarrestar la oleada de terror que lacera Europa y el mundo.
“Cualquier atentado es contra la humanidad, toda persona debería condenarlos”, afirmó el Imán de 50 años. “Las causas de estos ataques son bastante complejas. Sin embargo, no creo que la matriz sea religiosa, sino que proviene más bien de un “impase” geopolítico”.
-¿En qué sentido?
Se juega con la contraposición entre el Occidente, considerado como principalmente cristiano, y el Oriente, principalmente musulmán. Pero, insisto, no es un desafío religioso. Es más, todas las religiones están en contra de la violencia, enseñan a vivir pacíficamente como ciudadanos que respetan la ley. Pero creo que nosotros, como gobiernos del Occidente, hemos demostrado una “doble medida” al tratar a los países de mayoría musulmana. Por ejemplo, tenemos el Irak de Saddam Hussein amenazado por las resoluciones de la ONU que atacó el país porque no había seguido estas indicaciones.
Por el contrario, Arabia Saudita viola constantemente los derechos humanos, pero nosotros seguimos vendiéndole armas y manteniendo relaciones comerciales. En Egipto, los Estados Unidos permitieron que el ejército tomara el poder a pesar de que hubiera un gobierno de la Hermandad Musulmana elegido democráticamente. Todos estos son ejemplos para demostrar que el trato que reserva el Occidente a los países musulmanes cambia según el lugar. Todo esto ha creado mucha rabia, por lo que creo que una solución podría ser la de tratar a cada país de la misma manera, con justicia y con equidad.
-Entonces, ¿esta rabia podría justificar las masacres?
No, nunca. La violencia en contra de la humanidad es despreciable. Siempre y en cualquier caso. Nunca hay una justificación. Pero hay que comprender de dónde surge, observar qué sucede en el mundo político y tener en cuenta esta rabia… Una rabia política, en la que la fe no tiene nada que ver.
-Pero los atentados son perpetrados bajo el grito de “Allahu Akbar” y en contra de los “infieles”.
Cuando hay personas malas que hacen daño y que quieren hacerlo, una de las justificaciones es utilizar la religión. Es fácil gritar “Allahu Akbar”: da un pretexto para llevar a cabo actos horribles que no tienen nada que ver con la religión. Estos no actúan en nombre del islam. Pongo un ejemplo: ¿usted, a qué equipo le va?
-No, no le voy a ninguno, pero prefiero la Roma.
Muy bien, pues digamos que uno que le va a la Roma coge un ladrillo y lo lanza contra las ventanas de una iglesia gritando: “Roma, Roma”. No quiere decir que lo haga en nombre del equipo o que la Roma apruebe este gesto. El año pasado mataron en Gran Bretaña a Jo Cox. Su asesino era un hombre del movimiento neonazi que, al apuñalarla, gritó “Britain first”. ¿Qué significa? ¿Que lo hizo en nombre de la Gran Bretaña? ¡Por supuesto que no! Ningún periodista habría hablado de terrorismo británico.
-Sin embargo el Papa, como otros representantes de las diferentes religiones, proponen el diálogo interreligioso como antídoto contra el terrorismo. Si las religiones no tienen que ver, ¿cómo podría ayudar el diálogo para derrotar esta plaga del mundo contemporáneo?
El odio entre las religiones es una idea de los terroristas. En este sentido hay que aislarlos, debemos quitarle fuerza a esta argumentación demostrando que las religiones no tienen problemas entre sí, que están unidas. Hay cristianos y musulmanes que viven juntos, trabajan juntos, colaboran en muchísimas partes del mundo. El Papa tiene razón: el diálogo es el primer paso.
-¿Qué le parece la oleada de islamofobia que se está radicalizando cada vez más en Europa?
Es un problema serio. Con cada ataque se enciende más el odio en contra de los musulmanes y se multiplican los ataques raciales, por ejemplo contra las mezquitas. A menudo en los informes de la policía británica son catalogados como “crímenes contra el islam”, justo con esta etiqueta. Por parte nuestra, animamos a la comunidad musulmana a no reaccionar, a no vengarse, sino a mantener la paz, a participar en manifestaciones contra la violencia y, si es necesario, a colaborar con la policía.
-Antes hablamos sobre el Papa. ¿Cuál es el significado que tiene para usted este encuentro?
Antes que nada quiero decir que estoy verdaderamente emocionado. Es un momento histórico, porque nunca había sucedido que cuatro imanes de la Gran Bretaña se reunieran con el Papa. Estamos muy honrados y es una manera para establecer un compromiso común por los refugiados, por los sin techo, por los pobres y por otras actividades caritativas. Cada uno de nosotros compartirá con el Papa sus historias de convivencia pacífica entre cristianos y musulmanes.
-¿Qué le dirá usted a Papa Francisco?
(Sonríe) Quiero decirle: “Gracias por haber defendido a los musulmanes”. Ha sido el único líder que ha dicho que el islam es una religión de paz. Esto nos ha tranquilizado muchísimo.
-Pero ha suscitado también algunas críticas, dentro y fuera de la Iglesia…
Lo sé. Pero Francisco es un hombre valiente. Sobre todo es un verdadero cristiano, porque ve a la persona humana sin importar su pertenencia religiosa. Primero somos humanos y después musulmanes. O cristianos. Entonces, quiero decirle: “Gracias” y decirle que la comunidad musulmana británica lo aprecia mucho.
–El Papa habla a menudo de una “tercera guerra mundial en pedacitos”. ¿Qué opina?
Creo que es un análisis preciso de la realidad internacional del presente, en el que los conflictos se intensifican cada día. Corremos el peligro de llegar a una guerra mundial: ya sucedió en el pasado y podría volver a suceder ahora.
Los musulmanes encargados del ritual de abrir y cerrar la Iglesia del Santo Sepulcro
En una reciente mañana de domingo, Adeeb Jawad Joudeh Al Husseini estaba sentado en un banco dentro de la única entrada pública a la Iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén. La puerta de entrada a la extensa iglesia, fundada en el siglo IV, es donde este musulmán de 53 años ha pasado gran parte de su vida.
Su padre, abuelo y decenas de generaciones de antepasados también dedicaron la mayor parte de sus vidas a sentarse en este banco, custodiando la iglesia que se cree contiene la tumba de Jesús, explica Al Husseini, sacando una llave de hierro de 20 centímetros del bolsillo interior de su chaqueta de cuero.
Esa llave es la única que puede abrir las imponentes puertas de madera de la iglesia, un deber que, según Al Husseini, fue encargado a su familia por Saladino, el sultán que arrebató Jerusalén a las Cruzados en 1187, una de las muchas veces en que el control de Jerusalén, codiciado por su santidad por judíos, cristianos y musulmanes, ha cambiado de manos.
Saladino quería asegurarse de que la iglesia no fuera dañada por otros musulmanes, algo que ocurrió en 1009 cuando el califa al-Hakim ordenó que se quemaran varias iglesias en Tierra Santa, incluido el Santo Sepulcro (el hijo de Al-Hakim aprobó la reconstrucción de la iglesia en 1128).
“Así que Saladino dio a nuestra familia la llave para proteger la iglesia”, dijo Al Husseini. “Para nuestra familia, esto es un honor. Y es un honor no solo para nuestra familia, sino para para todos los musulmanes del mundo”.
Los miembros de la familia de Al Husseini, junto con otra familia musulmana, los Nuseibehs, se han convertido en parte integrante de la complicada estructura de la iglesia del Santo Sepulcro.
Una convivencia difícil
El complejo es ahora utilizado por seis diferentes iglesias antiguas -Católica, Ortodoxa Griega, Ortodoxa Armenia, Ortodoxa Siria, Etíope Ortodoxa y Copto Ortodoxa- cada una de las cuales tiene monjes que viven allí.
A lo largo de la historia, las relaciones entre las comunidades religiosas de este complejo han sido tensas y a veces desembocan en violencia por el control sobre partes del edificio.
Hasta el día de hoy, un decreto otomano del siglo XIX intenta mantener estas tensiones bajo control declarando que cada confesión se limite a usar los espacios que controlaban cuando se emitió el decreto en 1853.
Cada mañana, cuando las puertas de la iglesia se abren a las 4 de la madrugada, miembros de las dos familias -o un representante designado por ellos- están presentes para lo que se ha convertido en un acto ceremonial de cooperación.
El representante musulmán retira el pestillo y empuja para abrir una puerta abierta, luego un clérigo de la Iglesia Católica Romana, Ortodoxa Griega o Armenia Ortodoxa -quienes se rotan la encomienda- abren la otra puerta desde el interior, mientras que un clérigo de otras denominaciones supervisa la ceremonia. Lo mismo sucede al revés, cuando la iglesia cierra sus puertas a las 7 de la tarde.
Los turistas y peregrinos que vienen aquí a besar la losa de piedra donde el cuerpo de Jesús fue lavado antes de su entierro, y entran en la cámara subterránea que se cree contiene su tumba, pasan delante de estos guardianes musulmanes, que se sientan en el banco gran parte del día mientras atienden a la familia y los negocios.
Una tradición
Los historiadores no pueden determinar a cuánto tiempo atrás se remonta el papel de estos porteros, pero tampoco han hecho serios intentos de refutar el legado, algo que la mayoría considera esencial para las operaciones diarias de la iglesia.
“Es básicamente como un montón de cosas en la iglesia; es una tradición”, señala Raymond Cohen, profesor emérito de relaciones internacionales en la Universidad Hebrea de Jerusalén, quien estudió la iglesia y escribió el libro Saving the Holy Sepulchre (“Salvando el Santo Sepulcro”). “Y, en realidad, creo que es una de las joyas de Jerusalén”.
Mientras que la familia de Al Husseini tiene la llave, la familia de Nuseibeh tiene a su cargo el trabajo físico de abrir y de cerrar la puerta de la iglesia, un deber que se remonta a 637, cuando el califa Omar trajo por primera vez el Islam a Jerusalén, explica Wajeeh Y Nuseibeh, de 67 años, quien está sentado en el banco junto a Al Huseini.
“Nuestra familia llegó por primera vez a Jerusalén con Omar”, y desde entonces se le ha confiado la protección de la iglesia de los vándalos, dice Nuseibeh, entregándome su tarjeta de presentación, que declara que es “Custodio y portero de la Iglesia del Santo Sepulcro”.
Pero Al Husseini insiste en que la familia de Nuseibeh entró en a formar parte de la apertura de las puertas de la iglesia mucho más tarde (terminar de leer aquí el texto).
Fuentes:
AsiaNews / BBC / Religión Digital