Iglesia de Cuba presenta Plan Pastoral al 2020: ‘Por el camino de Emaús’
9.00 p m| 11 set 14 (RELIGION DIGITAL/BV).- Los obispos cubanos han pedido a todos los católicos entrar en un camino de conversión personal y pastoral inspirada en el pasaje bíblico de los discípulos de Emaús para, como ellos, pasar “del desánimo a la esperanza a través del encuentro con Jesucristo en su Palabra y en la vida de la comunidad”. Por otro lado el Plan Pastoral ha criticado las reformas emprendidas por el Gobierno de la isla al considerar que no han logrado “reactivar” la economía y, aunque reconoce que se ha producido algunos cambios, aboga porque sean “más profundos y oportunos”.
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En el documento los obispos preguntan: “¿En qué medida nosotros nos sentimos empujados hacia Emaús por el desencanto ante expectativas sociales fallidas, comunidades que no han crecido al ritmo de nuestro deseo, líderes comunitarios que han escogido otros destinos, o el desgaste crónico asentado como el sedimento del alma? En Jesús contemplamos cómo Él se acerca al desencanto, cómo necesitamos dejarnos encontrar por Él, y cómo debemos salir nosotros a los caminos por donde tantas personas arrastran la vida”.
“Estamos iniciando una nueva etapa pastoral que requiere el compromiso de todos”, ha indicado en una carta el Presidente de la Conferencia de Obispos Cubanos, Mons. Dionisio García Ibañez. “Debemos llenarnos de la fortaleza de espíritu que animaba a los discípulos de Emaús después de encontrarse con Jesús”.
En su carta del 20 de mayo, para motivar el Plan, el arzobispo de Santiago de Cuba indicaba que al igual que los planes anteriores, éste tiene un marco de la realidad social y eclesial, un marco doctrinal, esta vez centrado en la experiencia de los discípulos de Emaús y un marco operativo siguiendo el método ver, juzgar y actuar que ofrece propuestas de iluminación, conversión y acción para cada etapa.
Sus propuestas de acción sugieren, entre otras: potenciar la acogida, animar la dimensión misionera de todos, hacerse presente en los espacios periféricos, acercarse a la religiosidad popular, asegurar el acompañamiento en los procesos catecumenales, fortalecer la identidad católica de discípulos misioneros, motivar al testimonio cristiano dentro de la familia y crear escuelas de padres, trabajar para que las comunidades sean verdaderos hogares en la fe, ofrecer a los cubanos un testimonio de humanidad, de valores cristianos y de discípulos de Jesús.
Este plan propone un camino procesual que se inicia por el anuncio de la Buena Noticia de Jesús, que construye su identidad en la iniciación cristiana y la formación para el discipulado, que se vive y fortalece en la familia y en la comunidad -ámbitos de comunión, crecimiento y compromiso y que se traduce en testimonio cristiano al ofrecer a la sociedad la expresión social de la fe.
Con una población que pasa de once millones de habitantes, Cuba cuenta con 305 parroquias, que crecen como comunidad de comunidades y tiene 357 sacerdotes; de los cuales, 177, son religiosos, y 180 diocesanos; cuenta con 84 diáconos permanentes y 776 religiosos; de los cuales 585 son mujeres, y 191 varones, pertenecientes a 96 comunidades religiosas: 70 femeninas y 26 masculinas.
Fruto del dinamismo misionero existen unas 2.300 casas de misión, el 62 por ciento ubicado en zonas rurales, surgidas por la falta de templos en nuevos pueblos y barrios, con una tendencia a su crecimiento debido a las iniciativas pastorales desde que, en 1986, la Iglesia cubana celebrara el Encuentro Nacional Eclesial Cubano, conocido como ENEC, evento que, después de veinticinco años de experiencia de fe en una sociedad atea de corte marxista, invitó a los católicos a salir de los templos y a ser Iglesia encarnada, orante y misionera.
El Plan Pastoral, de 27 folios, fue aprobado por la Asamblea de la Conferencia de Obispos Católicos Cubanos (COCC) en el mes de febrero de 2014 y ha tenido en cuenta algunos documentos de los obispos, como la Carta Pastoral de 2013 “La Esperanza no defrauda”, el “Documento Conclusivo” de Aparecida y la Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium del Papa Francisco.
“Exhortamos a cada cristiano a convertirse a Jesucristo y anunciar la alegría de su Evangelio”, señala el Plan en su Objetivo General, “para que el testimonio transformador de amor y esperanza de nuestras comunidades y familias llegue a todos los hombres y mujeres de nuestra Patria”. Es fruto de la consulta nacional hecha a las comunidades durante 2013 y los aportes de los obispos y agentes diocesanos y presenta datos sobre la actual realidad eclesial, política y social cubana. Su marco de realidad ofrece una mirada hacia la sociedad y otra hacia la Iglesia.
Su mirada hacia la sociedad repite afirmaciones hechas por los obispos en su carta pastoral de 2013 y señala logros y carencias en el ámbito demográfico, económico, social, político, internacional, cultural y religioso. En su mirada a la Iglesia enumera los recientes acontecimientos nacionales: Año Jubilar Mariano y visita de Benedicto XVI y señala los logros y los retos que aún enfrentan las comunidades.
En Cuba la participación en la misa dominical no llega al dos por ciento de la población, pero el Plan afirma que: “alrededor de un sesenta por ciento han sido bautizados y viven valores cristianos que configuran nuestra cultura, todos esperan nuestra evangelización”. También reconoce ¨múltiples y variadas expresiones de religiosidad”, diversidad que manifiesta que en “nuestra gente está viva la sed de Dios y la búsqueda de un sentido para la vida”.
El Plan indica que: “ninguna comunidad debe excusarse de entrar decididamente, con todas sus fuerzas, en el camino de conversión pastoral que aquí se propone, y de abandonar las estructuras caducas que lo entorpezcan y que no favorecen el anuncio de la fe”.
Sobre las reformas del gobierno y la cuestión social
Los obispos cubanos reclaman “reformas más profundas y oportunas”. Señalan en el documento que los cambios, relacionados con la eliminación de subsidios y la reestructuración de los empleos, son insuficientes. Aunque reconocen que la sociedad “ha recibido con agrado algunos cambios”, la Iglesia ha percibido “la urgencia en muchos ciudadanos para que se realicen reformas más profundas y oportunas” que permitan solucionar “problemas acuciantes generadores de agobio, incertidumbre y desgaste”, como el transporte, el vestido y la alimentación.
“Sectores amplios de población padecen pobreza material, producto de salarios que no alcanzan para sostener dignamente a la familia”, precisan. En el plan, los obispos señalan que muchos cubanos “aspiran a un modelo de Estado menos burocrático y más participativo, menos paternalista y más promotor, menos autoritario y más democrático”.
Refiere que algunos ciudadanos apuestan por un modelo de nación basado en una “sociedad inclusiva, abierta al pluralismo, con instituciones que permitan procesar desacuerdos, en el que los ciudadanos y sus representantes cultiven la cultura del diálogo, del respeto al que disiente o piensa diferente”.
La COCC se lamenta de que un cierto número de libertades en los medios de comunicación “se encuentra restringido”, aunque reconoce la existencia de “espacios incipientes de debate y discusión en torno al proyecto país”.
Considera “preocupante y poco constructivo” que se produzcan con frecuencia detenciones y hechos violentos “contra quienes se manifiestan divergentes con la ideología del único partido gobernante (el comunista)”.
Los obispos también critican “el aislamiento” que sufre la población cubana por parte de los Estados Unidos, en alusión al embargo económico, financiero y comercial que aplica el gobierno de Washington contra la isla desde hace más de medio siglo.
En ese sentido afirman que esa política “contribuye a acrecentar las dificultades de los más débiles; y se inclina porque en la relación entre los dos países se favorezca una política inclusiva mediante el respeto a las diferencias y el diálogo”.
Aquí el enlace al documento completo: Plan Pastoral 2014 – 2020: “Por el camino de Emaús”
Fuente:
Religión Digital