Luis María Anson es uno de los periodistas más renombrados de España. Ex Presidente de la Agencia EFE y fundador del diario La Razón y del diario digital El Imparcial . En este último ha escrito este interesante artículo de gran actualidad en el mundo del periodismo.
No se trata del nuevo periodismo de Tom Wolfe, que sigue, por cierto, vigente, sobre todo en España, donde el colaborador literario mantiene altas cotas de interés y cotización. Se trata del periodismo que la tecnología de vanguardia exige. Pedro J. Ramírez se adelantó a todos con el gran acierto de Orbyt. El periódico del futuro tendrá la calidad del actual periódico impreso pero se leerá en iPad, con ahorro de rotativa, papel y distribución; con mejora de inmediatez y de servicio a la actualidad.
Rupert Murdoch así lo ha entendido y ha lanzado un diario de pago en iPad: The Daily, en el que
incorpora vídeos, juegos, libros y otras aplicaciones aunque lo sustancial sea una información completa y bien elaborada y una considerable descarga de opinión. Por un dólar a la semana, los lectores pueden disfrutar de la lectura de The Daily. Pedro J. Ramírez se adelantó a Murdoch con la ventaja de que ofrece de forma instantánea en todo el orbe los contenidos de un periódico como El Mundo, elaborado con el tradicional estilo de contenidos completos y colaboración especializada y de calidad. Murdoch ha planteado un diario sin otro soporte que el de internet. Nace con internet y con internet se desarrolla.
Presido yo desde hace tres años un periódico digital: El Imparcial.es, el diario de referencia de la Fundación Ortega-Marañón. Es una aventura apasionante en el mismo filo de la vanguardia periodística. El periódico digital así concebido es una fórmula distinta al que se ofrece en iPad, pero me permite darme cuenta, con conocimiento de causa, del acierto del fundador de El Mundo con su Orbyt y del horizonte futuro del nuevo periodismo.
Aún más, la “tableta” está bien, es por supuesto mejor que el móvil para leer el periódico, pero resulta demasiado pequeña. En el futuro se harán “tabletas” de tamaño tabloide, que serán flexibles, doblables y enrollables, y permitirán leer el periódico en el mismo formato y tamaño del diario convencional. Todo ello sin salir de casa o de la oficina, y en cualquier parte del mundo.
Trabajé profesionalmente durante muchos años con la impresión caliente, el cartón de estereotipia, la teja y la rotativa convencional. Mi afición a las artes gráficas me llevó a aprender el manejo de la linotipia o a trabajar sobre platina para encordar una página. Impulsé, en el ABC verdadero, el offset y luego las nuevas tecnologías. Creo no equivocarme, después de tanto años de ejercicio profesional, al asegurar a mis lectores que efectivamente, conforme a lo que han impulsado Ramírez y Murdoch, el nuevo periodismo caminará indefectiblemente por los caminos del iPad. La fórmula se mejorará, año tras año, porque estamos todavía en la prehistoria de este nuevo periodismo tecnológico cuyos horizontes permanecen abiertos y esperanzados en la aldea global que anticipó McLuhan