Grace West, una niña de 12 años vecina de Nueva Jersey, tiene una fe inquebrantable. Enferma de Neuroblastoma, -un cáncer infantil que afecta a las células nerviosas-, viajó con su familia el pasado año a Roma para ver al Papa Francisco y pedirle que le ayudara.
El viaje lo sufragó la Fundación Make A Wish, que arregló una cita con el Sumo Pontífice, -según da cuenta ‘Daily Mail’-, y ahora los médicos acaban de confirmar que está completamente curada.
BENDICIÓN
Grace asegura a cal y canto que no ha sido la quimioterapia la que ha erradicado su mal, sino la bendición que recibió en el Vaticano, y el consejo que le dio el mentado de que rezara por él:
“Es el mejor regalo de Navidad que jamás habría podido pedir. El poder de la oración me ayudó”, afirma.
Su familia resaltó el poder de fe de Grace para poder salir adelante. “Ella tiene una fe muy fuerte”, reconoció su madre.