La psicóloga Raluca Petrican, del Instituto de Investigación Rotman de Toronto, y sus colegas de la Universidad de Toronto (Canadá) han realizado un estudio en el cual participaron 14 mujeres con una edad promedio de 72 años y que habían estado casadas durante un promedio de 40 años. El objetivo de los investigadores fue descubrir el secreto de la larga vida de sus matrimonios.
Los científicos mostraron a las voluntarias varios vídeos mudos de 10 segundos con su marido o con un desconocido que aparecía contento o de mal humor. La imagen iba acompañada con una palabra que, supuestamente, describía el acontecimiento al que habían reaccionado los hombres. Con ello, los investigadores trataron de confundir a las mujeres, ya que un comportamiento positivo se presentaba como la reacción a algo negativo. Por ejemplo, los hombres sonreían y parecían felices pero en la pantalla aparecía el subtítulo “Recuerdo de un accidente de tráfico”, cuando en realidad la sonrisa había sido provocada por los recuerdos felices del día de la boda, informa ‘New York Magazine’.
En esencia, los vídeos fueron diseñados para que las mujeres vieran una reacción emocional inesperada de su esposo que no coincidía con sus propios sentimientos. Durante todo el experimento, los cerebros de las voluntarias fueron escaneados.
El análisis de los resultados mostró que el cerebro de las mujeres registró una mayor actividad general al ver a sus maridos en los vídeos en comparación con las imágenes con extraños, pero solo cuando sus cónyuges mostraban emociones positivas. En los otros casos la actividad cerebral apenas superó los niveles de cuando estaban viendo en la pantalla a un desconocido. Además, la actividad se registró en las zonas del cerebro responsables de la empatía. Así que mirando a sus personas queridas en un buen estado de ánimo, las mujeres también estaban experimentando emociones positivas. Pero si el marido se portaba de una forma negativa, el cerebro de la mujer lo veía como a un extraño.
A partir de estos datos, los científicos han recomendado a los maridos mostrar a sus esposas sus emociones positivas con más frecuencia, entonces se sentirán más unidas a ellos y, lo más probable, la pareja tendrá una larga vida feliz.