Muchos empleados creen que merecen un aumento de sueldo. Pero la  difícil tarea de abordar este espinoso asunto hace que  muchos no se atrevan a plantearlo.

El portal de Periodista Digital señala que, según la psicóloga y consultora española, Mónica Mendoza, hay claves que facilitan la delicada tarea.

LOS CONSEJOS

Estos son los siete consejos que propone la experta:

1) Preparar previamente toda la documentación

Si uno da el paso tiene que ir con todas sus armas documentales que acrediten que se merece dicho aumento. «Es clave hacerse con informes de éxito, una relación de los días en los que se ha trabajado en fin de semana, fuera de horario estipulado o tareas que se han realizado que eran propias de otro compañero que pudo ejecutarlas en su momento. Por otro lado, es positivo resumir los logros personales que repercutieron en el bien de la organización».

2) No pedirlo en un encuentro informal: pedir una reunión

«Es conveniente que cuando se vaya a realizar una petición de este tipo, se pida una reunión con la persona que tomará la decisión final y que sea una reunión de media hora como mínimo. No es recomendable provocar el encuentro en una situación informal porque la propuesta no será tomada tan en serio».

3) En la reunión: valorar los aspectos buenos de la empresa

Hay que saber negociar bien (la psicóloga cree que «en esta vida no gana el que lo hace mejor, sino el que negocia mejor») y para ello hay que elogiar las bondades de la empresa, lo que te ha aportado como trabajador:

«Cuando se inicie el contacto con el interlocutor, antes de pedir nada, se deberá dar las gracias por haber sido recibido. Es bueno resumir de forma breve las aspectos buenos de la empresa».

4) Solicitar una revisión al alza de rango salarial, no hablar de un aumento en concreto

Mónica Mendoza advierte «se consiguen más cosas cuando se pide por favor que se revise el rango salarial que si se demanda un aumento de un 5%, por ejemplo».

5) Defender la propuesta

«Pedir un aumento de sueldo es como una declaración de amor. Cuesta mucho empezarla pero una vez que se ha confesado, todo fluye de manera más fácil».

La experta considera que una vez pasado el difícil trago inicial, hay que defender la propuesta con todo el material del que se dispone: «Éste es el fondo de violines o la cena romántica con velitas que debe terminar de conquistar al interlocutor».

6) Después de la petición, emplear la técnica del silencio

Después de proponer el aumento, la psicóloga recomienda permanecer callado para ver cómo actúa el interlocutor. «Las personas no suelen aguantar bien los silencios y responden rápidamente».

Igualmente el responsable no tiene porque tomar una decisión en ese momento, por lo que no hay que presionar. Y tampoco amenazar con cambiarse a la competencia o abandonar la empresa.

7) No compararse con un compañero

No se recomienda porque el que utiliza el típico recurso de “éste trabaja menos que yo y cobra más” se retrata y queda peor que el que trabaja menos y cobra más.

«Las condiciones salariales pactadas con la otra persona en su día no son tema de nuestra incumbencia»