La crisis económica está pasando una dramática factura. Las patologías psicológicas crecen sin parar debido a la ansiedad de muchas personas que se ven abocadas a un pozo sin fondo del que nadie parece querer rescatarlas.
Los médicos han facilitado unas cifras escalofriantes que dejan constancia de la situación real:
Cada día intentan suicidarse en España un total de 243 personas ingiriendo fármacos de los más diversos.
De ello saben muy bien los seis hospitales repartidos en España que cuentan con una unidad de toxicología. Entre ellos figura el Hospital Universitario Son Espases de Palma.
Según ha informado el jefe de la Unidad de Toxicología de este citado centro, Bernardino Barceló, 325 son atendidas por intoxicaciones etílicas y 81 por consumo de drogas ilegales, principalmente cocaína, y cada día muere una de ellas por esta causa.
A decir de Barceló esta cifra podría verse reducida “si los hospitales contasen con especialistas en politoxicología”.
Los hospitales españoles que cuentan con estas unidades clínicas especializadas son el Clínico y el Sant Pau en Barcelona, el Hospital Lozano Blesa de Zaragoza, el Hospital Río Ortega de Valladolid, el Hospital General de Valencia y el palmesano hospital.
“En otros hospitales hay personas especializadas, pero no son reconocidas oficialmente”, ha afirmado el doctor Barceló, que ha precisado que cada día ingresan en los servicios de urgencia de los diferentes hospitales españoles por diversas intoxicaciones 542 personas (197.830 personas al año).
En el 60 % de las intoxicaciones diarias (325 personas) está presente el alcohol, y el 45 por ciento (243 personas) son por la ingesta, con intenciones suicidas, de psicofármacos, fundamentalmente benzodiazepinas: antidepresivos, ansiolíticos, y relajantes musculares.
“La crisis económica se ha unido como un factor más en las ideas suicidas”, ha reconocido el doctor Barceló, que sin embargo considera que las personas que ingieren fármacos para quitarse la vida ya tienen un trastorno psíquico que se agrava con un conflicto familiar o con los problemas económicos.
“En las historias clínicas se observa significativamente el efecto de la crisis económica en las personas suicidas cuando hablamos con ellas tras recuperarlas, aunque la mayoría de veces hay un conjunto de causas desencadenantes”
(Publicado por Periodista Digital)